APRENDI A VIVIR
¿Qué cómo aprendí a vivir y cuándo aprendí a querer?....
¿Qué cómo aprendí a sufrir?.... ¿Cuándo?.... ¿cómo?.... no lo sé.
Aprendí a mirar las estrellas, alumbrando los sueños con ellas.
A mirar los colores del viento y a sentir el sabor del silencio.
Aprendí a encender ilusiones y a escuchar hablar los corazones,
con palabras calladas, con matices de mil sensaciones.
Cuando un día, el dolor tomó mi mano, conocí de frente a la tristeza,
la pena y el llanto se marcharon, al sentir el amor y su grandeza.
La soledad, querida compañera, la que con tanto miedo rechazaba,
me mostró la paz y la armonía de los momentos que con ella estaba.
Comprendí, el sentido de la vida, viviendo el amor y la desdicha,
sintiendo la alegría y la tristeza, conociendo lo breve de la vida.
Aprendí el valor de la paciencia, a calmar los vientos de mi ira,
a llenar con mares de esperanza las zonas más oscuras de mi vida.
Es así, que aprendí a vivir.