El laboratorio de un biofísico ruso en la Universidad de Kioto recreó por primera vez el tejido del corazón humano a partir de células madre. Se contrae sin estimuladores externos con una periodicidad comprendida entre 50 y 70 latidos por minuto.
Bajo temperaturas de casi 37ºC el músculo tiene vida propia: se encoge y se relaja en una increíble sucesión de movimientos apenas visibles. Los científicos ya saben provocar arritmias y otros estados patógenos en el tejido recreado. Ahora se concentran en probar en el tejido algunos medicamentos nuevos.
Dentro de unos 3 o 4 años será posible también trasplantar el sustituto del corazón en el pecho humano, pronostica Agladze.
(Con información de Russia Today)