En medio de una matanza que provocó en los últimos años miles de muertos por el narcotráfico en México, agentes de la DEA de EE.UU. participaron en “fiestas de sexo” con prostitutas, financiadas por narcos en el extranjero, según un reporte del inspector general del Departamento de Justicia de México.
“Un policía local –señala– arregló ‘fiestas de sexo’ con prostitutas financiadas por carteles locales de droga para estos agentes.” Las fiestas se realizaron durante “un período de varios años” en las oficinas que el gobierno estadounidense alquilaba en ese país.
Las fiestas sexuales son sólo un ejemplo de la conducta cuestionable destacada en un reporte del inspector general del Departamento de Justicia que examina la manera en que la agencia manejó las acusaciones de acoso sexual y mala conducta profesional de 2009 a 2012.
El reporte señala que algunas de las acusaciones no fueron investigadas por completo o no fueron reportadas a la dirección de la agencia. Criticó además la mala comunicación entre los investigadores de asuntos internos asignados a indagar la mala conducta y el personal de seguridad responsable del proceso de acreditaciones. E indicó que el FBI y la DEA desatendieron las peticiones de información, al punto que los investigadores “no pudieron tener plena confianza” de que recibieron toda la información.
El documento hace un recuento de varias de las acusaciones de otros casos de conducta sexual inapropiada —incluyendo insinuaciones, sexo entre instructores y estudiantes, así como relaciones entre un supervisor y un subordinado— que involucra a empleados de agencias federales del orden público que integran el Departamento de Justicia. Estas incluyen al FBI, la DEA, el Servicio Federal de Alguaciles de Estados Unidos y la Oficina Federal de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos.
Una sección del reporte describe las acusaciones de que agentes de la DEA acudieron a fiestas sexuales con prostitutas pagadas por cárteles del narcotráfico en otro país.
Tales aseveraciones salieron a la luz en una serie de entrevistas que sostuvieron los investigadores de asuntos internos de la DEA con agentes de policía en el extranjero en 2009 y 2010. Las fiestas fueron supuestamente organizadas durante un periodo de varios años por un funcionario extranjero, que también reveló que a varios agentes se les proporcionaron dinero, costosos regalos y armas de fuego.
El reporte no identifica el país donde supuestamente ocurrieron esas fiestas, pero un funcionario de una agencia federal del orden confirmó que se trata de Colombia.
(Con información de AP)