Las personas se asemejan siempre a cajitas de música... Algunas tienen muchos adornos, pero por dentro están vacías... Otras no tienen adornos, pero por dentro tienen todo un jardíno están llenas de gemas brillantes. Otras, cuando las abrimos, nos muestran su interior lleno de recovecos y muchas veces nos perdemos entre sus laberintos.. Luego, están aquellas cajitas que son transparentes, que las vemos con un solo darles una mirada y sabemos cómo van a actuar siempre... Y a nosotros siempre se nos ha ocurrido que las personas son cajas musicales... que sólo las conocemos y amamos luego de oír la música de su interior... Porque esa música tiene algo de magia, algo muy hermoso lleno de vida, algo de muy dentro de su alma... Y es lo que nos ha pasado ahora, hemos sentido la música de tu alma y precisamente por ello, quisiéramos enviarte la música de nuestra alma en esta cajita que te regalamos hoy...
Recuerdos de mis primeros años ... cuando no me podía dormir si no tenía a mi lado una cajita de música como la que ahora suena ... gracias a ti querida Raquel ... vuelvo a ser niño ... y soy feliz ....