Varoufakis tenía un plan para volver al dracma pero Tsipras no lo autorizó
Posted: 28 Jul 2015 03:01 AM PDT
El ex-ministro de Finanzas griego, Yanis Varoufakis, habría diseñado
un sistema de pagos y una banca paralela con la que preparar el terreno
para una eventual salida del euro.
El plan, que el primer ministro Alexis Tsipras nunca autorizó, estaba
diseñado para afrontar un escenario en el que la Troika forzase el
cierre de los bancos, como finalmente ocurrió.
En una grabación telefónica que ha hecho pública un diario
conservador griego (Kathimerini), Varoufakis explica abiertamente su
plan. El contexto es una teleconferencia con miembros de fondos de
capital riesgo, presuntamente coordinados por el ex-ministro de Finanzas
británico, Norman Lamont. La conversación se produjo el 16 de julio,
más de una semana después de que Varoufakis dimitiera de su cargo.
El ex ministro de Finanzas griego explica en la grabación que antes
de la llegada de Syriza al poder, en diciembre, obtuvo la aprobación de
Tsipras. En consecuencia, y apoyado por un reducido grupo de
colaboradores, se puso manos a la obra para crear un sistema de pagos
que permitiera funcionar en euros pero que pudiera cambiarse a dracmas
(anterior moneda griega) “de la noche a la mañana” si fuera necesario.
“Se hubiera creado un sistema bancario paralelo mientras los bancos
estuvieran cerrados como consecuencia de la agresividad del Banco
Central Europeo (BCE) y su negativa a darnos ni un respiro”, explica
Varoufakis a sus interlocutores en la teleconferencia. Para poner en
marcha este plan, el ex ministro de Finanzas estimaba que necesitaría al
menos 1.000 empleados. Una valoración muy aproximada porque nunca
obtuvo el visto bueno definitivo de Tsipras, apuntó el mismo.
Plan secreto
El plan preveía la apropiación del NIF de contribuyentes y empresas
mediante el pirateo de la web de la Secretaría General de Ingresos
Públicos, un organismo bajo control absoluto de la troika. “Queríamos
crear en secreto cuentas de reserva vinculadas a cada NIF sin decírselo a
nadie, solo para tener un sistema funcional. Con darle a un botón
podríamos asignar números de identificación a los titulares d elos NIF, a
los contribuyentes”, reveló.
Esto permitiría la creación de un sistema paralelo que podría
funcionar en caso de que los bancos fueran obligados a cerrar y haría
posible también realizar pagos entre terceros y el Estado, además de
poder establecer de forma eventual la creación de un sistema bancario
paralelo. Como la secretaría general “está controlada completa y
directamente por la troika”, Varoufakis llamó a un amigo suyo de la
infancia, un experto en informática y profesor de la Universidad de
Columbia, para hackear el sistema. Una semana después de que Varoufakis
se pusiera al mando del Ministerio de Finanzas, su amigo contactó con él
por teléfono y le dijo que tenía el “control” del hardware pero no del
software “que pertenece a la troika”.