La presidenta Cristina Fernández de Kirchner advirtió que "acá no hay un ataque contra un candidato, sino contra un proyecto que incluyó a millones de argentinos" y en ese sentido dijo que "el rol de cada militante, de cada dirigente, es lograr la unidad", al tiempo que remarcó lo que está pasando en otros países de la región con ataques contra gobiernos populares.
La Presidenta pronunció estos conceptos al hablar con la militancia juvenil en los patios de la Casa de Gobierno tras el acto que encabezó en el Salón de las Mujeres Argentinas.
Cristina agradeció a la militancia la solidaridad con los afectados por las inundaciones y exhortó que "hay que convencer a los compatriotas que del otro lado están los que quieren volver a los tiempos del alineamiento internacional incondicional, del endeudamiento para llevar al país al estado en que lo encontramos en 2003".
"No se trata de votar por el Frente de la Victoria o el Arcángel San Gabriel, porque del otro lado están los que voltearon al gobierno de Raúl Alfonsín", afirmó.
Agregó que también del otro lado se encuentran los que dijeron que "había que aceptar el fallo del juez Griesa y que había que pagar en efectivo" a los fondos buitre.
Al respecto, dijo que la oposición "no es inteligente" porque si se aceptaba el fallo el próximo gobierno se iba a encontrar con un problema irresoluble. "Tendrían que habernos apoyado los sectores de la oposición, pero prefirieron pegarse un tiro en el pie, por no decir en otro lado".
La Presidenta afirmó además que los ataques contra los gobiernos populares en la región comenzaron en 2005 cuando "esos tres grandes, Kirchner, Chávez y Lula frenaron en Mar del Plata el proyecto del Alca".
Instó a la militancia a recorrer el país y "preguntarles a los argentinos si están mejor ahora que antes", del gobierno kirchnerista.
En ese sentido, dijo que "el rol de cada militante y dirigente debe ser lograr la unidad, convencer a los que tienen una diferencia".
"Hay que hacerles entender que esto no es una cuestión de modales, sino de las políticas públicas que van a llevar adelante. No hay que pelear ni discutir, sino que hay que explicar", remarcó.
En esa línea, sostuvo que "estoy segura que vamos a seguir transformando el país porque las sociedades no van para atrás. Nadie vota para atrás, se vota para adelante".
"Son ustedes y el pueblo la garantía de que van a cuidar sus conquistas y que nadie se las arrebate", exhortó.
También afirmó que "yo voy a estar apoyando a todos nuestros candidatos del Frente para la Victoria porque en cada uno de los compañeros a presidente y vicepresidente van a seguir y continuar con estas políticas porque han participado de ellas porque hay un pueblo que no está dispuesto un paso marcha atrás y ellos también quieren formar parte de esta gloriosa historia".
"Ustedes creen que alguien quiere quedar en la historia como la persona que traicionó los ideales del pueblo y de las políticas que tanto nos costó llevar adelante", añadió.
Indicó: "No hagan comparaciones porque somos personas y somos distintos pero tengan la certeza absoluta que las ideas y el proyecto están arraigados en la sociedad".
La Presidenta le dijo a la militancia "piensen un poco, miren los cachivaches que hay enfrente", en alusión a la oposición y expresó "por eso les pido la unidad, porque somos militantes del amor y de la felicidad, de la patria, y quiero pedirles que seamos generosos, pero también inteligentes, pongamos todas las neuronas a trabajar porque del otro lado están escasas".