
Más de 6.000 agricultores, principalmente de Bélgica y Francia,
protestaron este lunes en Bruselas denunciando las pésimas condiciones
laborales y reivindicando apoyo financiero por parte de las instituciones europeas.
Según la emisora Radio Contact, los manifestantes lanzaron huevos y
bengalas a los policías y quemaron fardos de paja junto a los cordones
policiales instalados frente a la sede del Consejo de la Unión Europea
(UE), donde se inició una reunión extraordinaria de los ministros de
Agricultura de la UE para debatir la situación de la crisis.
Los granjeros británicos se sumaron a los manifestantes en Bruselas
que reivindican apoyar a los agricultores que sufren pérdidas.
Según informó el sindicato británico National Farmers Union of
England and Wales (NFU), el precio de la leche bajó un 25 por ciento en
un año.
Los agricultores europeos exigen desde hace meses aumentar los
precios de la carne y la leche, reducidos considerablemente debido a la
superproducción.
El embargo alimentario ruso impuesto en agosto de 2014 en respuesta a
las sanciones occidentales por la situación en Ucrania es uno de los
factores que contribuyeron a la crisis de superproducción en los países
europeos.
Sputnik