Avanzar con el ajuste del Estado sin reparar en ninguna consecuencia social ni política parece signar muchas de las decisiones del gobierno, que luego deben ser corregidas. La vicepresidenta Gabriela Michetti firmó el pasado 30 de diciembre el decreto que dejaría sin trabajo a 2035 empleados del Senado, institución que preside. El único análisis que hubo para tomar esa medida fue que se trataba de nombramientos realizados por su antecesor, Amado Boudou, a principios de 2015 y otro grupo de noviembre de ese año. A Michetti se le “pasó por alto” que entre los despedidos había 100 que pertenecían al Programa de Formación e Inserción Laboral para Discapacitados, implementado por el Parlamento para darles empleo a personas con capacidades diferentes.
Fuentes gremiales de la Cámara Alta hablaron con Tiempo y remarcaron que tienen abierta una línea de negociación con las autoridades. En la tarde de ayer les habían  arrancado el compromiso de reincorporar a los 100 trabajadores de aquel programa, mientras seguirían conversando por el resto. Sobre el final de la jornada, esa promesa se formalizó con un decreto correctivo, que excluyó de los despidos a los empleados con capacidades diferentes.
La noticia sobre los despidos en el Senado, que se suman a los de otras áreas del Estado nacional, se conoció el martes pasado. Sin embargo, la resolución había sido tomada por Michetti el 30 de diciembre. La fecha elegida no fue por azar. Varios de los nombramientos habían sido realizados por Boudou en enero de 2015 y el artículo 9º de Ley 24.600, que regula el funcionamiento del personal del Parlamento, establece que los empleados adquieren estabilidad luego de transcurridos 12 meses del nombramiento. Por eso, Michetti tomó su decisión al filo del fin de año. Y sin reparos ni análisis sesudos.
A eso se suman reclamos de trabajadores que revistieron muchos años como "planta transitoria" y que había obtenido estabilidad por las resoluciones que Michetti anuló.

El debate
El fuego cruzado por los despidos de estatales crece cada día. El principal bloque de la oposición en la Cámara Alta, el FPV, manifestó un “fuerte rechazo” a las medidas de la vicepresidenta y “desmintió” las declaraciones en las que Michetti aseguró contar con el respaldo de la oposición para estas medidas.
“El oficialismo quiere instalar que consultaron con el bloque del FPV, pero no fue así”, remarcó esta fuerza en un comunicado. Y recordó los dichos de Michetti en los que aseguró contar con el “aval de (Miguel Ángel) Pichetto, (jefe de bloque) y de otros senadores que no quieren que el Senado se desmadre”.
En respuesta, el kirchnerismo expresó: “rechazamos lisa y llanamente que se nos consultara respecto del despido masivo de trabajadores, en consecuencia. Queremos reafirmar que no estamos de acuerdo con la medida adoptada”.
Desde el gobierno, el encargado de hablar fue Andrés Ibarra, titular del ministerio  de Modernización, que se refirió a la andanada de despidos que viene practicando el macrismo.
Según el ministro que tiene a su cargo el análisis de las contrataciones de los últimos tres años, el Ejecutivo tuvo “conversaciones con los gremios” en las que se avisó que “iría muy fuerte respecto de los contratados que no están cumpliendo funciones porque es una falta de respeto hacia los propios empleados y la ciudadanía”. «

 

 

Tensión en Nación y municipios

Trabajadores despedidos de Jefatura de Gabinete hicieron ayer una asamblea en esa repartición, ubicada en la Avenida Belgrano y Diagonal Sur, y se declararon en estado de alerta y asamblea permanente ante los despidos, dispuestos por la actual gestión.
Los trabajadores recibieron la solidaridad del resto de sus pares que desarrollan su labor en el edificio y varios se sumaron a la asamblea, llegando a completar un cónclave de unas 200 personas.
La inquietud se replica en los municipios bonaerenses, donde se registraron miles de cesantías. En La Plata, trabajadores sostienen que el ajuste alcanzaría a unos mil empleados. En Quilmes, Martiniano Molina habría suprimido otros mil empleos. En Malvinas Argentinas se habla de unas 900 cesantías, mientras que otros 300 trabajadores serían dados de baja en Lanús. "Despiden gente con hasta 12 años de antigüedad" dijo Rubén García, de la Federación de Sindicatos de Municipales bonaerenses.

 

 

MALESTAR
Los gremios de los empleados del Congreso Nacional hicieron trascender ayer su "malestar" con los senadores que no se expresaron en contra de la decisión de la vicepresidenta Gabriela Michetti de despedir a 2035 empleados pertenecientes a la Cámara Alta. 

 

 

 

Despidos en el CCK: De Vido desmintió a Lombardi

El ex ministro de Planificación Julio De Vido negó irregularidades en la contratación de empleados del Centro Cultural Kirchner, despedidos anteayer por el titular del Sistema Federal de Medios y Contenidos Públicos, Hernán Lombardi.
Lombardi había dado a conocer un informe en que sostenía que "el 81% de las designaciones fue en 2015, de las cuales el 42% fue realizada en la segunda mitad del año. Y el 100% ingresó sin concursos ni evaluación previa".
En respuesta, De Vido sostuvo que "los contratos no podrían tener más de seis meses debido a que el CCK fue inaugurado el 21 de mayo del año pasado y que, obviamente, la mayoría de las contrataciones se hicieron durante 2015 ya que, como dije, el CCK se inauguró el año pasado".
Agregó que "los convenios con las distintas facultades; no son ninguna triangulación. Se trata de convenios Estado-Estado de asistencia técnica".
En tanto, los trabajadores fueron excluidos ayer por segunda vez de su lugar de trabajo y convocaron al "al público, artistas, trabajadores, organizaciones, medios y a todos los que quieran acompañarnos", a un encuentro que se realizará hoy.