Para el Comandante en Jefe, faro luminoso de la ética y la moral de los pueblos, mis mejores deseos en sus primeros 90 años de vida. Pese a los cientos de atentados de la CIA para asesinarlo, como lo hicieron con líderes como Hugo Chávez, Jaime Roldós, Maurice Bishop, Gaddafi, Torrijos, Palme, etc., ¡Fidel está invicto! Y que cumplas muchísimos más FIDEL.
Fidel viene por largo tiempo advirtiendo sobre una conflagración mundial y la destrucción del medio ambiente. El panorama internacional actual una vez más le otorga la razón. El accionar provocador del imperio por tratar de mantenerse de pié con sus extremidades de barro, hacen pensar que busca una guerra mundial -lo que de hecho ya lleva acabo con notable hipocresía- para pescar en río revuelto y sacar el mejor provecho para sobrevivir. Derrumbando a la Unión Europea (que la CIA misma configuró), con la masiva e incontrolable immigración de refugiados árabes y africanos. Destruyendo la influencia rusa y poniédola de rodillas ( cosa que no podrá) y planteando la guerra a China. El imperio no está dispuesto a caer sin llevarse por delante al mundo entero consigo.
Obama y sus mercenarios en Cuba
Obama dijo muy claro que si en 50 años no habían podido derrocar la revolución en Cuba, buscarían otra estrategia. Por eso el bloqueo sigue intacto y las cacareadas buenas intenciones no existen. Todo igual. No tuvo ninguna reserva incluso de reunirse con sus mercenarios cuando visitó Cuba. Ahora ofrecen becas a estudiantes y profesores cubanos para que estudien “liderazgo” gratis en Estados Unidos, cuando los propios ciudadanos estadounidenses pagan altos costos por educación y viven ahorcados por las deudas crediticias estudiantiles. Entiéndase “liderazgo” como el adoctrinamiento para sus revoluciones de colores o golpes blandos.
¡La más peligrosa para la paz mundial!
No hay nada más perverso y peligroso para la paz mundial que la elección presidencial de Hillary Clinton. La campaña mediática (medios corporativos cuya propiedad está en las farmacéuticas, industria militar y Wall Street) para presentar a Trump como el mismo demonio y a la Clinton como el ángel salvador no ha tenido tan buen resultado, pues es tanta la corrupción y mediocridad que ella encarna que las bases de su propio partido se niegan a elegirla. Es verdad que Trump no es lo mejor. Los mismos medios que hoy lo atacan 24 horas al día y 7 días a la semana, lo inflaron en las primarias (como inflan a Petro e inflaron a Clara López y Aida Abella en Colombia), para sacar de paso a pesos pesados del republicanismo como Jeb Bush, y ponerle un contrincante fácil de vencer a la Clinton. Lo que no contaban era que también las bases republicanas estaban hastiadas de la jerarquía partidista y se fueron en favor de Trump con más fuerza de lo que se creía. Trump no ganará la presidencia de los Estados Unidos porque el Estado Profundo (Deep State), o sea, el establecimiento, impondrá a la Clinton por encima de todo (igual como se la impuso como Secretaria de Estado al pusilánime de Obama). Y si llegare a ganar Donald Trump, por hechos inesperados como la mala salud de Hillary (que los que saben dicen que es grave) o un bien ganado carcelazo (que también suena imposible porque la justicia en Estados Unidos es igual de corrupta que el poder legislativo y ejecutivo), podría ser asesinado como hicieron con Lincoln, Garfield, McKinley y Kennedy. Para eso el “Deep State” no tiene inconvenientes. Siempre encuentran el loquito que dispare.