Página principal  |  Contacto  

Correo electrónico:

Contraseña:

Registrarse ahora!

¿Has olvidado tu contraseña?

LA CUBA DEL GRAN PAPIYO
¡ Feliz Cumpleaños Denis !
 
Novedades
  Únete ahora
  Panel de mensajes 
  Galería de imágenes 
 Archivos y documentos 
 Encuestas y Test 
  Lista de Participantes
 Conociendo Cuba 
 CANCION L..A 
 FIDEL CASTRO.. 
 Fotos de FIDEL 
 Los participantes más activos 
 PROCLAMA AL PUEBLO DE CUBA 
 
 
  Herramientas
 
General: Marx: el regreso del gigante
Elegir otro panel de mensajes
Tema anterior  Tema siguiente
Respuesta  Mensaje 1 de 5 en el tema 
De: Ruben1919  (Mensaje original) Enviado: 06/10/2012 19:57
  Marcello Musto
Marxismo Crítico
 
Marx: el regreso del gigante
 
 
Traducción para Marxismo Crítico de Merce Amado.
 
Si la eterna juventud de un autor radica en su capacidad de seguir estimulando nuevas ideas, entonces podemos decir sin lugar a dudas que Karl Marx sigue siendo joven.

Tras la caída del muro de Berlín, conservadores y progresistas, liberales y socialdemócratas, casi de forma unánime decretaron la desaparición definitiva de Marx. Sin embargo, sus teorías vuelven a estar otra vez de rabiosa actualidad, y esto ha ocurrido a una velocidad que es, a todas luces, sorprendente. Desde 2008, la crisis económica en curso y las profundas contradicciones que están desgarrando la sociedad capitalista, han hecho resurgir el interés en un autor arrinconado de forma precipitada después de 1989. Centenares de periódicos, revistas, canales de televisión y de radio se han hecho eco de los análisis que Marx hizo en El Capital y en los artículos que escribió para “The New-York Tribune” mientras observaba el pánico de 1857, la primera crisis financiera internacional de la historia.

Después de veinte años de silencio, en muchos países se vuelve a escribir y a hablar sobre Marx. En el mundo anglosajón las conferencias y cursos universitarios sobre su pensamiento se han puesto otra vez de moda. El Capital vuelve a ser un best-seller en Alemania, y en Japón se ha editado una versión manga de la obra. En China se está publicando una nueva edición, inmensa, de sus obras completas (traducidas del alemán y no, como en el pasado, del ruso). En América Latina se palpa un renovado interés por Marx entre las y los activistas políticos.

El frente académico ha acompañado este redescubrimiento retomando la edición histórico crítica de las obras completas de Marx y Friedrich Engels, la MEGA 2. La nueva edición alemana está organizada en cuatro secciones: (1) obras y artículos; (2) El Capital y todos sus manuscritos preparatorios; (3) correspondencia, y (4) cuadernos de notas. De los 114 volúmenes previstos, 58 ya se han publicado (18 desde que se retomó el proyecto en 1998). El proyecto ha publicado muchas de las obras inacabadas de Marx en el estado en que las dejó, en lugar de publicar los textos con las modificaciones editoriales que experimentaron como se solía hacer en el pasado.

Gracias a esta valiosa innovación y a la publicación de varios cuadernos inéditos, emerge un Marx muy distinto al que nos han presentado muchos de sus oponentes y de sus supuestos seguidores. La estatua de expresión inmutable que señalaba el camino al futuro con certeza dogmática desde las plazas de Moscú y Pekín ha dado paso la imagen de un pensador profundamente autocrítico, que dejó gran parte del trabajo de toda una vida inacabado por su necesidad de consagrar energía a seguir estudiando y revisando sus argumentos.

Así, algunas de las interpretaciones consolidadas de la obra de Marx están siendo nuevamente objeto de debate. Por ejemplo, las primeras cien páginas de La ideología alemana – un texto sobre el que se discutió mucho durante el siglo XX pero que casi siempre se ha considerado acabado – se han publicado ahora en orden cronológico y en su forma original, siete fragmentos separados. Se ha descubierto que formaban parte de otras secciones del libro, dedicado a dos autores de la izquierda hegeliana, Bruno Bauer y Max Stirner. La primera edición, publicada en Moscú en 1932, sin embargo, así como las numerosas versiones posteriores que cuentan sólo con ligeras modificaciones, crearon la falsa impresión de que había un capítulo introductorio sobre Feuerbach en el que Marx y Engels sentaron de forma exhaustiva las leyes del materialismo histórico (un término que Marx nunca utilizó) o, como dijo rotundamente el marxista francés Louis Althusser, conceptualizaron “una ruptura epistemológica inequívoca, claramente presente en la obra de Marx”

Otro interesante aspecto de esta edición es que distingue con mayor claridad entre las partes del manuscrito escritas por Marx y las escritas por Engels, lo cual lleva a una lectura muy diferente de ciertos pasajes que se solían considerar como un todo integrado.

Por ejemplo, el párrafo que diversos autores, unos motivados por la crítica feroz y otros por la defensa ideológica, han considerado como una de las principales descripciones de Marx de la sociedad postcapitalista: “la sociedad se encarga de regular la producción general, con lo que hace cabalmente posible que yo pueda dedicarme hoy a esto y mañana a aquello, que pueda por la mañana cazar, por la tarde pescar y por la noche apacentar el ganado, y después de comer, si me place, dedicarme a criticar…”

Ahora sabemos que este fragmento fue obra de Engels (todavía entonces influenciado por los socialistas utópicos franceses) y que no contaba en absoluto con el beneplácito de su mejor amigo.

Los nuevos textos incorporados son también importantes para El capital, la obra magna de Marx. En los últimos diez años se han publicado cuatro nuevos volúmenes de la MEGA2 que contienen todos los borradores que faltaban en los volúmenes II y III de El Capital (que Marx dejó inacabado). Así, podemos reconstruir todo el proceso de selección, redacción y corrección que Engels efectuó al editar los manuscritos de Marx. Engels realizó varios miles de modificaciones (una cifra impensable hasta hace muy poco) durante un largo período de trabajo que va desde 1883 hasta 1894. La MEGA2 nos permite ver qué modificaciones fueron más significativas y determinar dónde, por el contrario, fue capaz de ser más fiel al texto original de Marx – que en absoluto podía ser presentado como el producto acabado de su investigación, ni siquiera las páginas dedicadas a la famosa ley de la tendencia decreciente de la tasa de ganancia.

Relegar a Marx al estatus de clásico embalsamado, indicado sólo para la investigación académica especializada sería un error de la misma envergadura que convertirlo en la fuente doctrinaria del “socialismo real”. Ya que, en realidad, sus análisis nunca han gozado de mayor vigencia. Cuando Marx escribió El Capital, el modo de producción capitalista estaba todavía en una fase temprana de su desarrollo. Hoy en día, tras el colapso de la Unión Soviética y su expansión a nuevas regiones del planeta (sobre todo a China), el capitalismo se ha convertido en un sistema global que invade y configura todos los aspectos (no solo los económicos) de la existencia humana. En estas circunstancias, las ideas de Marx están demostrando ser más fértiles de lo que lo fueron en su época.

Además, actualmente la economía no sólo domina la política, dictando su agenda y determinando sus decisiones, sino que se halla fuera de su jurisdicción y control democrático. En las últimas tres décadas, los poderes de toma de decisiones se han trasladado inexorablemente de la esfera política a la económica. Las posibles decisiones políticas se han transformado en imperativos económicos. Esta subordinación de la esfera política a la economía, como si fuera un dominio aislado inmune al cambio, encierra actualmente la más grave de las amenazas a la democracia. Los parlamentos estatales son despojados de sus poderes, que se transfieren a los mercados. Los spread del crédito, las calificaciones de Standard & Poor’s y el índice de Wall Street – esos megafetiches de la sociedad contemporánea – tienen infinitamente mayor influencia que la voluntad de las personas. En el mejor de los casos, el gobierno político puede “intervenir” en la economía (cuando es necesario mitigar la anarquía destructiva del capitalismo y sus violentas crisis), pero no puede cuestionar sus reglas y sus decisiones fundamentales.

Tras veinte años en los que los cantos de alabanza a la sociedad de mercado sólo tuvieron que enfrentarse a la vacuidad de los diversos posmodernismos, la capacidad renovada de otear el horizonte a hombros de un gigante como Marx supone un avance positivo. No sólo para los académicos interesados en la comprensión profunda de la sociedad contemporánea, sino también para cualquiera que esté inmerso en la búsqueda teórica y política de una alternativa democrática al capitalismo.

Marcello Musto es profesor de teoría política en la York University (Toronto) y editor de los volúmenes: “Tras las huellas de un Fantasma” (Siglo XXI, México: 2011), “Karl Marx’s Grundrisse: Foundations of the Critique of Political Economy 150 Years After” (Routledge, London and New York: 2008) y “Marx for Today” (Routledge, London and New York: 2012). www.marcellomusto.com .

Fuente:  http://marxismocritico.com/2012/10/03/marx-el-regreso-del-gigante/



Primer  Anterior  2 a 5 de 5  Siguiente   Último  
Respuesta  Mensaje 2 de 5 en el tema 
De: Ruben1919 Enviado: 06/10/2012 23:42
 

Crisis global pone
de moda a Marx, mientras Sarkozy
quiere refundar el capitalismo

La crisis financiera que se inició en EEUU generando desempleo, desplome de Bolsas bursátiles, Bancos, Financieras y propiedades, muy rápidamente se extendió a Europa y otros continentes.

Gobernantes, periodistas y estudiosos recurren a encontrar una explicación al fenómeno. Uno de los hechos más significativos es como ha emergido a la consideración o la negación en los múltiples análisis Carlos Marx. En todos los continentes pero especialmente en EEUU y Europa sus principales trabajos sobre el capitalismos son repasados o leídos por primera vez por decena de miles que buscan saber

si lo que escribió explica lo que esta sucediendo.

No todos piensan en Marx, pero si son muchos los que piensan en que el capitalismo tal como lo conocemos por estos días debe ser reformulados entre estos esta el presidente francés, Nicolas Sarkozy que le acaba de proponer a su par norteamericano, George W. Bush, la necesidad de convocar una cumbre internacional para refundar las bases del capitalismo y buscar una respuesta internacional a la actual crisis.

 

Una experiencia que ahora se recuerda bien

Dos décadas después de la caída del Muro de Berlín, el mayor teórico del comunismo, Karl Marx, vuelve a estar de moda en el este de Alemania, tracias a la crisis financiera global.

 

Su análisis crítico del sistema capitalista de 1867, "El capital", ha salido de la sepultura para situarse como un improbable "best-seller" para la editorial académica Karl-Dietz-Verlag.

 

"Todos pensaron que no habría demanda para 'El capital' nunca más", dijo el director ejecutivo de la empresa, Joern Schuetrumpf, después de vender 1.500 ejemplares en lo que va de año, el triple que en 2007, una cifra que represente una multiplicación de las ventas por 100 desde 1990.

 

"Incluso los banqueros y los directores están leyendo 'El capital' ahora para intentar entender lo que han estado haciéndonos. Marx está definitivamente de moda ahora", aseguró Schuetrumpf.

 

El renacer del tratado de Marx refleja un rechazo más amplio al capitalismo presente en muchas personas en Alemania del Este, que hasta 1989 gozó la protección de una estado comunista y ahora se ve afectada por la pobreza y el desempleo.

 

Un mes de intensa confusión en el sector financiero ha hecho caer a los bancos en Estados Unidos y ha precipitado una seria de rescates financieros en muchos países, incluyendo Alemania, reforzando el sentimiento anticapitalista.

 

Una encuesta reciente reveló que 52 por ciento de los alemanes del este creen que el libre mercado es "inadecuado" y que un 43 por ciento afirma preferir el socialismo ante el capitalismo.

 

"Leímos sobre 'los horrores del capitalismo' en la escuela. Ellos lo entendieron. Karl Marx estaba por delante", afirma Thomas Pivitt, un trabajador de 46 años originario del este de Berlín.

 

"Yo tenía una vida bastante buena antes de la caída del muro", agregó. "Nadie se preocupaba por el dinero porque el dinero no importaba. Tenías trabajo incluso aunque no quisieras uno. La idea del comunismo no era tan mala".

 

El desempleo en la antigua zona comunista alcanza el 14 por ciento, el doble que en las zonas occidentales, y los salarios son significativamente más bajos. Millones de trabajos se perdieron después de la reunificación. Muchas empresas del Este fueron compradas por competidores occidentales y cerraron.

 

"No creo que el capitalismo sea el sistema correcto para nosotros", expresó Monika Weber, una empleada del ayuntamiento de 46 años.

 

Como muchos ciudadanos de la extinta república, Ralf Wulff dijo que estaba contento con la caída del muro, pero su euforia fue efímera.

 

"Me tomó pocas semanas darme cuenta de lo que se trata la economía de libre mercado", afirmó Wulff. "Es materialismo desenfrenado y explotación. Los seres humanos se pierden. No teníamos las comodidades materiales pero el comunismo todavía intentaba conseguirlo".

 

Nicolas Sarkozy y muchos europeos

tienen la ilusión de reformular el capitalismo.

El presidente francés, Nicolas Sarkozy, viajó el último 18 de octubre con la misión de convencer al presidente estadounidense, George W. Bush, de la necesidad de convocar una cumbre internacional para refundar las bases del capitalismo y buscar una respuesta internacional a la actual crisis, en línea con lo acordado por los Veintisiete en el reciente Consejo Europeo de Bruselas.

 

Sarkozy viajo a Norteamérica acompañado del presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, con la intención de persuadir al actual inquilino de la Casa Blanca de que no se puede esperar al resultado de las elecciones norteamericanas para comenzar a trabajar en los pilares del nuevo Bretton Woods, la conferencia en la que el actual sistema financiero internacional vio la luz en 1944.

 

Bush luego de la reunión eludió pronunciarse sobre la propuesta concreta de Sarkozy, aunque subrayó, ante la prensa, que “es esencial que preservemos los fundamentos del capitalismo democrático”. Agregando que en esta crisis y en un nuevo orden global financiero “es esencial que preservemos los fundamentos del capitalismo democrático, el compromiso de mercados libres, empresas libres y libre comercio”.

 

El presidente estadounidense, a quien restan tan sólo tres meses de mandato, añadió que “es importante que resistamos a la tentación de aislamiento económico y que continuemos con las políticas de mercado abierto”, una opinión que compartió Sarkozy.

 

No obstante, el mandatario galo dijo que “no podemos continuar en la misma línea porque los mismos problemas desatarán el mismo desastre. Tenemos que analizar las reglas que se aplicarán al siglo XXI. Vivimos en el siglo XXI, pero seguimos aplicando las normas del siglo XX”.

 

Entre las propuestas que llevará a esa futura cita, el presidente francés plantea acabar con los «paraísos fiscales», regular los 'hedge funds' -fondos de inversión de alto riesgo y escasa

 

Otra de sus iniciativas se centra en repensar el papel de las agencias de calificación de riesgos -que han cosechado sonoros fracasos en el análisis de los bancos ahora en apuros-, reflexionar si es conveniente que todas sean norteamericanas y qué hacer para prevenir conflictos de interés. Sarkozy insiste además en la necesidad de regular la remuneración de los directivos y revisar el sistema monetario internacional. "Esta cumbre Europa la quiere, Europa la pide y Europa la tendrá", dijo Sarkozy en Bruselas.

 

Lo que falta por venir

La crisis financiera se cobrará cerca de 165.000 puestos de trabajo en Nueva York en los próximos dos años, casi el doble de lo previsto en julio pasado, aseguró hoy el contralor (fiscal de cuentas) de la ciudad, William Thompson.

 

"Lo ocurrido en las últimas semanas hacen presagiar un clima económico mucho más difícil para la ciudad en el futuro cercano", aseguró Thompson en un artículo publicado hoy en la página web de su departamento.

 

"Nuestra previsión anticipa que nada menos que 165.000 empleos del sector privado se perderán en la economía de la ciudad durante los próximo 24 meses, frente a los 85.000 que se preveían en julio", reconoció el contralor neoyorquino.

 

De ellos, al menos 35.000 empleos pertenecerán al sector de los servicios financieros, una cifra que en julio situó en 25.000 puestos de trabajo.

 

Además, la crisis financiera hará que la ciudad ingrese por impuestos en este año fiscal unos 2.400 millones de dólares menos que en el ejercicio anterior, lo que supone el 6,2% del total, según los cálculos más recientes efectuados al respecto, que datan de julio, aunque serán revisados en noviembre.

 

En 2007, los servicios financieros representaron el 25% de los salarios que se pagaron en la ciudad, el doble que hace doce años.

Fuente: agencias y periódicos.


Respuesta  Mensaje 3 de 5 en el tema 
De: algoporalgo Enviado: 07/10/2012 00:32
Pobres cubanos si Hugo pierde

Respuesta  Mensaje 4 de 5 en el tema 
De: Ruben1919 Enviado: 07/10/2012 00:37
No resi ...Pobres los venezolanos pobres ....si los compañeros médicos cubanos de la misión barrio adentro algún día se fueran .- Los médicos hijos del capitalismo lo único que buscan es llenarse los bolsillos de plata .-

Respuesta  Mensaje 5 de 5 en el tema 
De: Ruben1919 Enviado: 04/12/2016 11:45
"Marx es normalmente citado, junto a Émile Durkheim y a Max Weber, como uno de los tres principales arquitectos de la ciencia socialmoderna,2 y ha sido descrito como una de las figuras más influyentes en la historia de la humanidad, en 1999 una encuesta de la BBC fue votado como el "mayor pensador del Milenio" por personas de todo el mundo.3 4 "

En mi humilde concepto Carlos Marx es el más grande pensador que ha tenido   la humanidad  y el que más
 ha contribuido a la liberación de las clases explotadas ...


Primer  Anterior  2 a 5 de 5  Siguiente   Último  
Tema anterior  Tema siguiente
 
©2024 - Gabitos - Todos los derechos reservados