De no corregirse las medidas de austeridad en España, el número de personas que viven en la pobreza podría aumentar en ocho millones en 2025, con lo que uno de cada tres de los nuevos pobres de Europa sería español.
Así lo afirma la ONG Intermón Oxfam en un informe publicado hoy con el título La trampa de la desigualdad, realizado por las organizaciones nacionales de Oxfam en los distintos países de la Unión Europea.
En él se analiza el efecto de la crisis y las medidas de austeridad que “están hundiendo a Europa en la pobreza”. Según revela el documento, hoy en día en España más de 12 millones de ciudadanos viven por debajo del umbral de la pobreza (uno de cada cuatro habitantes del país) y la cifra de europeos en riesgo de exclusión social supera ya los 121 millones de personas.
España tiene, además, el dudoso honor de ser el cuarto país más desigual de Europa, por delante de Grecia y por detrás de Letonia, Bulgaria y Portugal. Un panorama que parece catastrófico pero que no lo es, advierte Oxfam, “si se reacciona a tiempo”.
Las soluciones para evitar un futuro escenario fatal pasan por abandonar las políticas de austeridad que se han implantado en la UE, en especial en España, las cuales frenan el crecimiento y generan grandes dosis de desigualdad y pobreza entre los ciudadanos, asevera Jaime Atienza, director del Departamento de Campañas y Ciudadanía de Intermón Oxfam.
Según explica Atienza, “estamos asistiendo a un cambio de modelo de sociedad en la cual la brecha entre ricos y pobres podría alcanzar niveles similares a los de Sudán del Sur”, y añade que, de mantenerse la tendencia actual, en 2025 España contaría con 20 millones de pobres, lo que supondría el 42% de la población.
En 2025, continúa el informe, el 20% más rico de la población española podría ingresar 18 veces más que el 20% más pobre, y cifras similares se alcanzarían en el conjunto de la Unión Europea si continúan aplicándose las políticas actuales.
REACCIÓN SOCIAL
Una encuesta realizada recientemente por Metroscopia para Intermón Oxfam revela que el 76% de la población española considera que las medidas de austeridad incrementan o perpetúan las desigualdades en el país.
Asimismo, la encuesta refleja que, para evitar la desigualdad entre ricos y pobres, el 89% de los españoles estarían dispuestos a ayudar como voluntarios en causas que lo requieran; el 69% de los ciudadanos rechazarían trabajos que fomenten la economía en negro y un 61% de la población estaría dispuesta a realizar donaciones a organizaciones sociales. Tan solo un 35% aceptaría pagar más impuestos.
(Con información de EFE)