La víspera, el municipio de San Ramón, fue declarado Libre de Analfabetismo, el quinto del departamento de Cuscatlán y el 61 a nivel nacional.

El acto de la declaratoria estuvo presidido por el gerente nacional de alfabetización Milton Garay, la directora departamental Josefa Noemí Rodríguez, el alcalde municipal, Fredy Alexander Alvarado y el técnico de la Organización de Estados Iberoamericanos, Alexis Chávez.

Una representación de los alfabetizados también recibió su diploma y el documento que da crédito de sus estudios vencidos.

También reconocieron por su apoyo al desarrollo del Programa al alcalde y su concejo pluripartidista, a directores de Centros educativos y a la asesora cubana Yaqueline Vega.

Dentro de los beneficiados con este esfuerzo que impulsa el gobierno de Salvador Sánchez Cerén, destaca 'la Niña María', quien a sus 93 años recibió su diploma de graduada.

Expresó su agradecimiento al Programa Nacional de Alfabetización por la oportunidad de aprender porque de pequeña sus padres no pudieron enviarla a la escuela.

Por esos invitó a todos aquellos que no saben leer ni escribir a incorporarse porque si ella, a sus 93 años de edad pudo, los demás también podrán.

El Programa Nacional de Alfabetización es una respuesta al compromiso social del gobierno de mejorar la calidad de vida de las personas a través de la educación, especialmente de aquellos que no tuvieron la oportunidad de aprender a leer y escribir.

Tiene como objetivo contribuir a disminuir la tasa de analfabetismo significativamente en la población de 15 años en adelante, desde un enfoque de desarrollo personal, inclusivo, de equidad, flexibilidad y de calidad que les permita su integración efectiva y activa en los procesos de transformación de su realidad.

El proceso de alfabetización se desarrolla en tres niveles educativos presenciales que abordan diferentes temáticas vinculadas a la vida cotidiana de los beneficiarios.

El primero es el nivel inicial (equivalente al primero y segundo grado de educación básica); continuidad educativa que comprende el segundo nivel (correspondiente al tercero y cuarto grados) y tercer nivel (quinto y sexto grado).

'Fidel está presente y seguirá presente siempre que seamos fieles a los principios revolucionarios, de la transformación de la sociedad y sobre todo en la medida en que seamos consistentes en nuestros actos en relación con su legado', subrayó en entrevista con Prensa Latina.

Molina aseveró que la muerte de Fidel le causó un fuerte impacto, pero a la misma vez no lo entristeció del todo porque el líder de la Revolución cubana 'pudo irse en sus propios términos y nadie pudo matarlo' a pesar de los más de 600 intentos de asesinato en su contra.

'El venció a todos los que quisieron dañarlo lo cual es una victoria de la Revolución cubana y para América Latina', subrayó Molina, quien es filósofo y especialista en ética y pensamiento crítico.

Aseguró que le embargó un sentimiento de agradecimiento a Fidel porque es salvadoreño y porque su país, y mucha gente en su país le debe mucho a Fidel.

'Todos le debemos a Fidel, tenemos una deuda que no nos esclaviza, es una deuda que libera, que no nos vuelve siervos, sino que nos exige actos de liberación y de generosidad', expresó Molina al referirse a las diversas formas de solidaridad extendidas por el Comandante en Jefe y el pueblo cubano.

'Por eso he pensado en mi papá, que era del Partido Comunista Salvadoreño, y se fue al exilio, en tanto salvadoreños que fueron a sanar sus heridas a Cuba y, por eso, quiero darle las gracias a Fidel', manifestó.

Recordó que la Red de Intelectuales y Artistas en Defensa de la Humanidad también fue impulsada por Fidel.

'¿Y qué significa defensa de la humanidad? Es también una clave para entender cómo evolucionó el pensamiento y la praxis en Fidel', explicó el académico.

Porque la lucha durante mucho tiempo se vio como algo que debían hacer los trabajadores y el pueblo contra los opresores, la burguesía, conflictos que continúan, pero ahora tiene otros matices, otros cambios, puntualizó.

La lucha ahora es en defensa de la humanidad, obviamente hay que ponerse al lado de las mayorías populares, hay que luchar contra quienes quieren mantener a la mayor parte de la humanidad en la exclusión, como dijo el teólogo español Ignacio Ellacuría, asesinado en 1989 por un pelotón del batallón Atlácatl, de la Fuerza Armada de El Salvador, junto a cinco jesuitas en la Universidad Centroamericana y dos asistentes.

'Pero es la humanidad en su conjunto la que está en peligro, y no solo porque la especie humana está en peligro, sino también porque nos deshumanizamos progresivamente', lamentó.

Resaltó como otros de los elementos que afloran tras el fallecimiento del líder cubano, la reivindicación de la esperanza.

'Fidel es esperanza y eso lo hemos podido ver a lo largo de estos días en que el cortejo fúnebre avanzaba por la Isla, pues es imposible no sentirse, no solo conmovido, sino también movido en las ideas', manifestó.

Consideró que en América Latina, la intelectualidad tiene que mirar más al pensamiento latinoamericano, y no tanto al de Europa como ha hecho siempre y, al mismo tiempo, hacer notar el propio pensamiento en nuestro continente.

Ahora, luego de la pérdida física de Fidel, ser fiel a su legado significa ser consistente y congruente con los principios de la transformación revolucionaria de la sociedad, remarcó.

'No podemos renunciar a la transformación radical de las condiciones de vida de nuestros países, es un proyecto que no debemos solo usar de manera instrumental (...) hay que resolver los problemas no basta con decir Fidel, Fidel, es necesario poner su pensamiento preclaro en práctica', enfatizó.