Por: Miguel Suarez (2016-12-03) El pasado 25 de noviembre (2016) se conoció el fallecimiento del comandante Fidel Castro, uno de los hombres mas grandes del mundo, de la estatura de Lenin o Simon Bolivar.
La noticia, aunque todos sabíamos que podría ocurrir en cualquier momento debido a que el comandante había pasado los 90 años de edad, causo sorpresa y dolor en muchos de nosotros.
El comandante Raúl Castro, presidente de Cuba, visiblemente emocionado, informo al pueblo cubano y al mundo diciendo: "Con profundo dolor comparezco para informarle a nuestro pueblo, a los amigos de nuestra América y del mundo que hoy 25 de noviembre del 2016, a las 22.29 horas de la noche falleció el comandante en jefe de la Revolución cubana Fidel Castro Ruz".
Algunos medios colombianos remarcaron que Fidel había fallecido un día después de que se firmara el nuevo acuerdo entre las Farc-EP y la oligarquía colombiana, aduciendo que este era quien había convencido a las Farc de llegar a un acuerdo y otras impresiones como de que Fidel había puesto al mundo al bordo de una guerra nuclear en lo conocido como la “crisis de los misiles” donde el gobierno de los Estados Unidos bloqueo marítimamente a Cuba amenazado su invasión ocasionando la respuesta solidaria de la URRS que envió sus barcos para evitar la invasion y romper el bloqueo.
Pero, aunque no es cierto que Fidel haya convencido a la dirección de las Farc de llegar a un acuerdo ya que esta organización siempre había propendido por esto, siendo la oligarquía la que se había negado, lo que si es cierto que este era un convencido de que había que parar la confrontación armada en Colombia, dejando su posición plasmada en un libro titulado “La paz en Colombia”.
En una conversación suya con Andrés Pastrana, por hallá por los tiempos de los diálogos del Caguán y cuando estos estaban en una de sus crisis, Fidel le habría expresado a Pastrana: “estoy dispuesto a ir a San Vicente del Caguán, a la Zona de Distensión, a hablar con ellos. Pero no voy a hablar con Manuel Marulanda solamente. Le pediría a él que reuniera a los principales jefes. Yo estaría dispuesto a conversar con ellos y explicarles por qué, a mi juicio, había que buscar la paz...”.
Como todos sabemos el encuentro nunca se produjo a pesar de la disposición de Fidel de viajar a Colombia y la de Manuel Marulanda de viajar a Cuba a entrevistarse con Fidel.
Las razones de porque es importante la paz en Colombia, según se entiende del libro, son las condiciones actuales internas y externas, la disparidad logística entre la partes contendientes y la agresividad del imperio ante revoluciones tipo cuba que el imperio no dudo en aplastar o descarrillar, como ocurrió con Nicaragua o incluso Granada.
También pensaba Fidel que había que evitar tanto sufrimiento al pueblo colombiano, estaba en contra de la lucha excesivamente prologando y pensaba que era muy difícil mantener un ejercito guerrillero de unos 30 mil hombres con los cuales Farc planteaba tomarse el poder.
En uno de los apartes del libro, Fidel escribe: “Los grupos revolucionarios, en su lucha, estaban divididos en Nicaragua, El Salvador y Guatemala. Más tarde o más temprano los militantes comunistas se sumaron a la lucha armada de los campesinos y la pequeña burguesía revolucionaria. En todos, con sus peculiares e ineludibles características siempre presentes, surgieron tendencias aferradas al concepto de lucha excesivamente prolongada”.
Otra de las premisas que en Colombia nunca se cumplió, fue la unidad de los grupos guerrilleros, para la muestra un botón, Las Farc, ELN y EPL nunca llegaron a un nivel de unidad muy avanzado y hasta la actual negociación con la oligarquía se realiza por separado. Para Fidel, la unidad de la izquierda era esencial.
Así lo expreso en su libro: “El esfuerzo de Cuba se consagró a la búsqueda de la unidad. Constan las actas y fotos de los momentos históricos en que esta se logró. Hubo guerrilleros que perdieron años planeando triunfos para las calendas griegas. Se trataba de una concepción que no cabía en nuestras mentes”.
Con mucho respeto con la dirigencia guerrillera, respeto que siempre remarca en su libro, casi a manera de resumen el comandante Fidel Castro expresó sus diferencias con la dirigencia guerrillera diciendo:
“Yo discrepaba con el jefe de las FARC por el ritmo que asignaba al proceso revolucionario de Colombia, su idea de guerra excesivamente prolongada. Su concepción de crear primero un ejército de más de 30 000 hombres, desde mi punto de vista, no era correcta ni financiable para el propósito de derrotar a las fuerzas adversarias de tierra en una guerra irregular”.
Y aunque siempre Fidel dejó en claro que las condiciones de la guerra que el tuvo que enfrentar y que los llevaron a en alrededor de 7 años a tomar el poder, era muy diferentes a las de la lucha guerrillera en Colombia, termina diciendo:
“La idea de rendirse nunca pasó por la mente de ninguno de los que desarrollamos la lucha guerrillera en nuestra patria. Por eso declaré en una Reflexión que jamás un luchador verdaderamente revolucionario debía deponer las armas. Así pensaba hace más de 55 años. Así pienso hoy”.
Fidel y la revolución Cubana, han tenido mucho que ver con Colombia y para ello basta mirar la historia de la solidaridad que han recibido combatientes colombianos, desde su entrenamiento como ocurrió con el M-19, hasta acogida en situaciones bien complicadas como ocurrió con los miembros del JEGA, luego de la retención del Hermano de Cesar Gaviria, o la intermediación en el caso de la toma de la embajada de República Dominicana, por parte del M-19 y como sede y garantes en los diálogos que concluyeron con el acuerdo.
Hoy en Colombia, como en Cuba y en muchos otros países se realizan actividades para honrar la memoria del revolucionario y nosotros desde aquí queremos unirnos a estos diciendo “Larga vida Fidel”