Residencia de los Capitanes Generales en la Quinta de los Molinos en las décadas de 1850–1870
Esos molinos funcionaron hasta la segunda mitad del siglo XIX, movidos por la fuerza del agua de la llamada Zanja Real, primer acueducto con el que contó La Habana. Su construcción se inició en 1592, y fueron terminados tras 27 años de trabajo. Muy cerca de la Catedral de La Habana se encuentra el Callejón del Chorro, cuyo nombre viene de su antiguo uso. Originalmente la de La Catedral se llamaba Plaza de la Ciénaga, ya que era allí donde los habaneros acudían a abastecerse de agua, traída por la Zanja Real.
El Chorro, como también se conocía a la Zanja Real, de más 11 km de largo, partía del Río Almendares y traía agua a La Habana atravesando la calle Zanja, que lleva ese nombre en honor a la misma. Este primer acueducto fue dejado de usar cuando ante el creciente desarrollo de la ciudad, el gobierno español se vió obligado a buscar otra solución para el abastecimento de agua a la ciudad, creándose en 1835, el acueducto de Fernando VII y el de Albear en 1858; los cuales se unieron en 1878.
Jardín botánico
A partir de 1820 se realizaron algunas investigaciones y estudios sobre plantas y animales de la zona, por Felipe Poey Aloy. Al desaparecer los molinos del rey, se fundó en este lugar el Jardín Botánico de la Habana, a la par de la construcción de la casa de descanso de los Capitanes Generales. El Jardín Botánico fue trasladado hacia ese lugar, desde el área que actualmente comprende el Parque de la Fraternidad Americana y el sur del Capitolio Nacional, donde se había fundado en 1817 el primer Jardín Botánico.
El herbario del antiguo Jardín Botánico de la Habana, fue el núcleo del cual se partió, para buscar el desarrollo acelerado de la colecta botánica en el país. Álvaro Reinoso realizó muchos de sus experimentos, por tener muchas parcelas dedicadas al cultivo de caña de azúcar. La Universidad de la Habana se hizo cargo de ese lugar entre 1850 y 1871, momento en que pasó a manos del gobierno español por 8 años.
Pasado este período, el gobierno español devolvió a la Universidad este terreno, estableciéndose en este lugar la Escuela de Botánica, la cual compartía su terreno de estudio con la Escuela de la Segunda Enseñanza.
En 1906 ese jardín fue inscrito como sitio de referencia importante en el Sistema Mundial de Jardines Botánicos. En ese lugar fue declarada en el año 1936, la mariposa, como flor nacional de Cuba.
Residencia del Generalísimo Máximo Gómez y del Ejército Libertador
Al final de la Guerra de Independencia en Cuba, con la derrota de España y en ausencia de la representación del pueblo cubano, se firmó el 10 de diciembre, el Tratado de París. Terminada formalmente la guerra, el presidente de la República de Cuba en Armas, Bartolomé Masó, reunió a la Asamblea de Representantes de Santa Cruz del Sur, y renunció a su cargo. La Asamblea se trasladó para La Habana, a la casa número 819 de la Calzada del Cerro.
Recibimiento a Gómez
El 24 de febrero de 1899 hizo su entrada en La Habana el Generalísimo Máximo Gómez, proveniente de la región central del país. El alcalde de la ciudad, Perfecto Lacoste, dispuso entonces que el cuartel general del Ejército Libertador y de su Generalísimo, se establecieran en la Quinta de los Molinos, debido a la gran extensión del terreno. Allí Máximo Gómez fue recibido por una población con desmedido entusiasmo, y que lo vitoreó y lo aclamó a su paso.
Las discrepancias entre Gómez y el Consejo de Gobierno venían desde antes de la Asamblea de La Yaya, efectuada en Camagüey, en 1897. En dicho encuentro se redactó una constitución, en la cual se suprimió el cargo de general en jefe. Esto fue fruto de las primeras contradicciones, pues Gómez ocupaba ese cargo anteriormente.
En junio de 1989 se estableció allí la Oficina de Licenciamiento del Ejército Libertador, al mando de la cual estaba entonces el polaco Carlos Roloff. Algunas fuentes citan a la Quinta de los Molinos como la última residencia de Gómez, antes de morir el 17 de junio de 1905.
Vea también:
(Tomado de EcuRed )
Victas actuales (Fotos: Yasset Llerena Alfonso)
Sobre el Reparto Almendares
El 15 de enero de 1904 fue aprobada la parcelación del Reparto Almendares en las fincas rústicas propiedad del Nicanor del Campo; la Molina cubierta de espartillo y romerillo de costa y la Meléndez destinada a pastos. Con el tiempo ganó la preferencia en el gusto de la clase adinerada.
Historia
Por aquellos tiempos no existían calles pavimentadas, sólo caminos cubiertos de piedra sobre el cual se echaba un polvo blanco que los vecinos regaban con mangueras.
El transporte fue un factor favorable al crecimiento del Reparto. La primera ruta de guagua “La Caridad”, le atravesaba de este a oeste por calle 3era. (hoy 25). Por la calle 9na. (hoy 31), transitaba los tranvías Marianao-Parque Central y por 12 (hoy 44), Playa de Marianao-Calle Aguila y este doblaba en la curva de Montalvo (44 y 19) y continuaba por B (hoy 19).
En la esquina de 14 y 9 (31 y 44), existía un Paradero que abarcaba las cuatro esquinas y que el pueblo dio por llamar el Crucero de la Playa por el gran número de pasajeros que allí hacían transferencias.
La manzana comprendida por las calles 9-11-12-14 (hoy Ave. 31, 33, 42, 44), existía un solar yermo donde se montaba un parque de diversiones que nombraban Colón (por el apellido del dueño), también los circos que visitaban la zona; y cuando no se jugaba fútbol y pelota.
Muchos chivos se alimentaban de los árboles de álamo allí sembrados, por lo que el pueblo le dio por llamar a esa esquina “El Álamo”.
El cine Almendares se encontraba en la calle 31 y 50 y a las 4,00pm sonaba un timbre que se escuchaba a considerable distancia anunciando el inicio de la función.
En la década del 20, se creó la Asociación de Propietarios y Vecinos de los Repartos Almendares, Columbia, San Martín. Como logro de sus gestiones se encuentran: reparación y construcción de calles y aceras, saneamiento de solares yermos, recogidas de basuras, abastecimiento de agua a la población y alumbrado público. Dicha Asociación alcanzó gran prestigio como es evidente por su cuestionable lucha a favor de la comunidad.
En terrenos de las calle 18 y 3era. (25 y 48), construyeron un campo de tenis sólo para familias adineradas. Gracias a las gestiones de la Asociación, pudieron practicar este deporte (muy de moda en esa época), familias pobres del Reparto.
La esquina donde hoy se encuentra la ESBU “Jesús Menéndez” se conocía como la “Curva de Montalvo” porque allí doblaba el tranvía y el propietario de la residencia que hoy ocupa la Secundaria, tenía ese apellido.
Fuentes : Multimedia Proyecto Identidad 2003 CD tomo-3
(Tomado de EcuRed )