Las naciones que apoyan el Acuerdo de París de 2015 se comprometieron a limitar el aumento de las temperaturas a menos de dos grados Celsius por encima de los niveles preindustriales.
Sin embargo, eventos de calor extremo se esperan cada vez más a menudo a medida que ese límite se aproxima, aseguran los investigadores en Proceedings of the National Academy of Sciences.
Un análisis de 44 de las 101 megaciudades más pobladas mostró cómo el número de urbes que sufren estrés por calor se duplicó con 1,5 grados Celsius de calentamiento.
Tal tendencia podría exponer a más de 350 millones de personas adicionales al estrés por calor para mediados del presente siglo, si la población continúa creciendo según lo esperado, destacan.
A medida que el clima se calienta, el número y la intensidad de las olas de calor aumenta, dijo Tom Matthews, investigador principal y climatólogo en la Universidad John Moores de Liverpool.
La investigación ha demostrado que este es el caso del calentamiento global experimentado hasta la fecha y nuestra investigación es la más reciente que demuestra que podemos esperar aumentos aún mayores, dijo.
Durante las olas de calor de 2015 en esas zonas, alrededor de mil 200 personas murieron en Pakistán y más de dos mil murieron en la India, recordó.
Estas olas de calor son amenazantes para las grandes ciudades que contienen gran cantidad de asfalto absorbente de calor y hormigón, sin mencionar las enormes poblaciones, dijo Georges Benjamin, director ejecutivo de la Asociación Americana de Salud Pública.
Para llegar a estas conclusiones, los científicos examinaron el impacto del calentamiento global en el estrés térmico humano. Usaron para esto, modelos climáticos y observaron cómo el cambio de temperatura global podría afectar las proyecciones de estrés por calor en las ciudades más grandes del mundo.
Es probable que haya más superficie de tierra expuesta a estrés térmico peligroso, subrayan. Las áreas que ya experimentan estrés por calor tendrán ondas de calor más frecuentes y más largas, aseguran.