Así lo anunció la víspera el propio jefe de Estado, en una alocución trasmitida por Venezolana de Televisión, en la cual presentó evidencias que revelan la responsabilidad de la oposición en los actos vandálicos acaecidos en el país durante las últimas dos semanas.
Será una ofensiva en el campo de la economía para conmemorar con trabajo, con obras concretas, los cuatro años de la victoria memorable del 14 de abril de 2013, aseguró el mandatario desde el Palacio de Miraflores (sede del Gobierno).
Con esa victoria en las elecciones, dijo, el pueblo le dio a Venezuela el primer presidente chavista de la historia y apostó a 'la continuidad de la impronta del comandante eterno Hugo Chávez (1954-2013)'.
Maduro condenó las convocatorias a la violencia tras su elección hace cuatro años, promovidas y financiadas por el entonces candidato de la derecha, Henrique Capriles, y las consideró 'partes de un guión repetido por la oposición venezolana cuando sale derrotada en procesos democráticos y legítimos'.
A la derecha no le interesa el orden constitucional, ni el crecimiento económico o social de la patria, solo quiere expoliar las riquezas naturales que pertenecen al pueblo y por ello, si pierden en las urnas, se decantan por desestabilizar el país para acceder al poder por vías inconstitucionales, afirmó.
En abril de 2013, comentó, hubo 11 muertos, más de 300 heridos y muchos destrozos provocados por la violencia y el terror que desató la oposición.
Asimismo, reiteró que el 'Gobierno Bolivariano cree en el diálogo sobre principios, de manera pacífica y con bases democráticas, para solventar los problemas de los venezolanos'.
Como lo hice cuando fui electo presidente, lo hago ahora: convoco a la derecha a abandonar la agenda de violencia y participar en un proceso de negociación para trabajar de manera unida por la paz y el desarrollo económico de Venezuela, declaró.