Una mañana, un tipo, apreciaba su cuerpo frente al espejo
y notó que había tomado un bonito bronceado,
menos en el pipì, y decide hacer algo para remediarlo.
Fue a la playa, se desnudó, se acostó y se enterró
completamente en la arena, exceptuando el pipì para
que se le pudiera broncear con el sol.
Un rato más tarde, pasan dos ancianas, una de ellas
se apoyaba en un bastón para caminar mejor.
De pronto, una ve el pipì emergiendo de la arena y
empieza a tocarlo con el bastón y le dice a su amiga:
!Realmente el mundo no es justo Juanita!'
¿Que quieres decir?', pregunta la amiga...
Cuando tenía 20 , estaba curiosa por verlo;
Cuando tenía 30 , lo disfrute;
Cuando tenía 40, lo pedía;
Cuando tenía 50, pagué por él;
Cuando tenía 60, rogué por él;
Cuando tuve 70, se me olvidó que existía;
y, ahora que tengo 80, esos BICHOS crecen
silvestres y yo...
"YA NO ME PUEDO AGACHAR"