
Andy, fue cuarto. Foto: Mónica Ramírez
Si en las principales competencias internacionales de los últimos años varios de los mejores triplistas cubanos regresaron a la Isla sin concretar actuaciones acordes a su nivel, en este Campeonato Mundial ese fue el primer obstáculo vencido por nuestros representantes.
Como miembros del equipo más joven entre todos los inscritos, Cristian Nápoles, Andy Díaz y Lázaro Martínez lograron un excelente pase a finales y convirtieron a Cuba junto a Estados Unidos en la única nación con tres representantes en la instancia decisiva.
En una jornada donde solo tres hombres pudieron sobrepasar los 17 metros exigidos por los organizadores para avanzar de forma automática a la final de este jueves, el trío de antillanos se las arregló para protagonizar una de las actuaciones más destacadas del triple salto cubano en fases clasificatorias de toda su historia.
De ellos, el capitalino Cristian Nápoles tuvo el mejor performance y con unos 17.06m conseguidos en su primer intento avanzó como el tercer hombre mejor ubicado.

Lázaro Martínez, el más experimentado de los cubanos.Foto: Marcelino Vázquez
Como habíamos anunciado este domingo, llegar con seguridad a la disputa de las medallas implicó rondar una marca de 16.70m, un registro logrado por nuestros tres representantes este año, pero solo hecho por Nápoles en la arena internacional. Ahora todos ellos firmaron sus mejores cuotas extrafronteras y aun sin llegar a los 17 metros requeridos igualmente consiguieron sus pases, pues Andy Díaz (16.96m) terminó cuarto en el ordenamiento definitivo y el guantanamero Lázaro Martínez (16.66m) concluyó último entre quienes consiguieron boletos.
Con edades que oscilan entre los 18 y los 21 años, nuestros saltadores ya protagonizaron una actuación memorable para la Mayor de las Antillas, pues aunque en otros seis Campeonatos Mundiales Cuba había llegado con equipo completo, solo en la versión de París 2003 pudo incluir a tres representantes en la discusión de medallas.
Luego de vencer el primer paso y sacudirse el estigma de ineficiente en los últimos eventos cumbres, la escuela cubana del triple tiene una generación que comienza con buen pie y que deberá intentar emular sus marcas del año para aspirar a mejores resultados en una final con los norteamericanos Christian Taylor y Will Claye como claros favoritos.
En otras actuaciones de la fecha, la juvenil Roxana Gómez terminó su camino en Londres con una aceptable actuación entre las 24 concursantes que participaron en las semifinales de los 400 metros planos.
Luego de sorprender en la jornada de este domingo con su clasificación a esa instancia, la cienfueguera de 18 años estampó ahora un buen crono de 52.01s, acorde con su nivel actual y válido para ubicarse quinta en un heat con presencia de grandes favoritas como Shaunae Miller-Uibo, Stephannie Ann-McPherson y Quanera Hayes.
Mientras tanto, la vallista larga Zurian Hechavarría vio escapar su
oportunidad de llegar a las semifinales de este martes, cuando perdió el paso antes de cruzar el último obstáculo y terminó en el sexto puesto de su heat. La santiaguera tuvo una excelente progresión y se mostró fuerte en toda la carrera, al punto de salir de la última curva entre las cuatro primeras, pero el contratiempo la sacó de toda posibilidad de mantenerse en competencia.
Aun así, su tiempo de 56.44s representa su tercera marca del año y el segundo mejor registrado por ella en escenarios internacionales. Más allá del lamentable percance, su actuación en la competencia fundamental no desagrada, porque demuestra avances respecto al año anterior —puesto 33 en los olímpicos de Río con 57.28s— tanto en el registro conseguido como en la disposición para afrontar la carrera.
Wlodarczyk, McLeod y Kipyegon cumplen, Yulimar Rojas por primera vez en la cumbre
En otro eventos importantes del día, las triplistas Caterine Ibargüen (14.89m) y Yulimar Rojas —pupila del extraclase Iván Pedroso— protagonizaron uno de los duelos más esperados de la cita del orbe, esta vez definido a favor de la segunda con un excelente registro de 14.91m que le dio su primer título en citas universales al aire libre y una inédita segunda medalla para Venezuela.
En una especialidad donde se extraña a las representantes cubanas, la medalla de bronce fue al cuello de la veterana kazaja Olga Rypakova (14.77m), de nuevo entre las tres primeras del planeta.
Por su parte, uno de los momentos cumbres del día resultó la final del lanzamiento del martillo femenino, donde la fuera de serie polaca AnitaWlodarczyk se recuperó de un inicio inestable y con un discreto envío para ella de 77.90m retuvo su título planetario y logró su cuarta medalla mundial.
La actual recordista universal le sacó casi dos metros a la china
Zheng Wang (75.98) y a la también representante de Polonia Malwina Kopron (74.76m), sus más cercanas perseguidoras.
Finalmente, el vallista corto jamaicano Omar McLeod confirmó su dominio del año y ganó el oro con un aceptable tiempo de 13.04s. Mientras tanto, latambién titular olímpica kenyana Faith Chepngetich Kipyegon dominó una carrera de 1500 metros donde la sudafricana Caster Semenya (4:02.90) logró una espectacular medalla de bronce en su primera incursión importante en la distancia y dejó el camino listo para comenzar su competencia en los 800 metros.
En otros eventos de clasificación, los hombres de los 200 metros cumplieron su primera ronda con el fácil avance de favoritos como el jamaicano Yohan Blake (20.39s), el sudafricano Akani Simbine (20.26s) y el trinitario Jareed Richards (20.05s), aunque el principal foco de atención recayó en el cuatrocentistas Wayde van Niekerk (20.16s), inscrito también en esta distancia para poner en duda el dominio de otros establecidos.
Igualmente, el estadounidense Kerron Clement (48.35) lideró a los ocho finalistas de la vuelta con obstáculos.
Yaniuvis López: este martes por llegar a finales en la impulsión de la bala
En la fecha de este martes la Mayor de las Antillas solamente tendrá acción en la impulsión de la bala para las damas, donde la veterana Yaniuvis López intentará llegar a una final esquiva para ella en sus tres incursiones mundialistas previas.
Quizás como nunca antes, la santiaguera de 31 años encontrará un panorama tan favorable para lograr su mejor resultado en estos certámenes, pues la especialidad vive una de las temporadas más discretas de la última década y ella ha tenido uno de los mejores años de su carrera.
No obstante, aunque Yaniuvis aparece en la octava posición del escalafón mundial en este 2017, con una marca personal de 18.92m logrados en el Estadio Panamericano de La Habana, su historial no permite asegurarla como posible finalista.
Para avanzar sin sobresaltos a la instancia definitoria la cubana deberá lograr al menos un envío por encima de los 17.75m, una cuota nunca conseguida por ella en citas mundialistas, aun cuando siempre llegó con marcas muy superiores. Como otras muchas veces, todo pasará por la capacidad de repetir alguno de sus mejores registros del año en el momento ideal.
En otras pruebas del día, la croata Sara Kolak tratará de confirmar su liderazgo del año, aunque tendrá fuertes rivales en la recordista universal Barbora špotáková, la china Shiying Liu y la turca Eda Tugsuz, una atleta de solo 20 años que en este 2017 elevó su mejor marca personal en más de ocho metros durante su primera temporada entre mayores.
Igualmente, la pértiga masculina, los 800 metros y los 3000 mil con obstáculos para los hombres vivirán su jornada conclusiva con algunos duelos de interés.
A la par, habrá primera ronda en los 200 metros para las damas y semifinal femenina en la vuelta al óvalo con obstáculos. Sin embargo, la gran atracción del día será la final de los 400 metros planos entre los hombres, donde se espera una de las finales más reñidas del mundial, con la presencia de varios hombres con registros por debajo de los 44 segundos en este año, incluyendo al sudafricano Wayde van Niekerk, actual recordista universal y campeón defensor.
Venezuela conquista su primer oro en la historia de Mundiales de atletismo

Yulimar Rojas celebró con la bandera de su país. Foto: AFP
Nunca había sucedido. En realidad hace pocos años parecía una quimera. Pero el planeta dio varias vueltas y Yulimar Rojas cambió la historia: Venezuela conquistó hoy el título en triple salto, su primer oro de siempre en Mundiales de atletismo.
Esta victoria es por mi país. Quiero ganar más medallas y más campeonatos mundiales, seguiré trabajando fuerte para conseguirlo, expresó, rebosante de alegría, la triplista venezolana de apenas 21 años.
Parecía un cuento de hadas, Yulimar llegó al Mundial de Londres-2017 con la espina de haber perdido la final olímpica de Río contra la colombiana Caterine Ibargüen, quien, a su vez, intentaría hoy ganar su tercera corona mundial al hilo, algo nunca antes logrado por una triplista.
Era la hora de la revancha. Rojas tomó la delantera en la segunda rueda de saltos con un 14,82 metros, pero Ibargüen sacó a relucir su grandeza y llegó hasta los 14,89 en el tercer intento.
Así, el tiempo trascurría y la colombiana parecía abocada a consumar la hazaña: tres medallas de oro consecutivas. íMadre mía! Son cosas que se dicen rápido, pero mucho más fácil se resuelve un problema matemático.
Entonces, Yulimar mostró sobre el tapete la bestia competitiva que lleva dentro. La discípula del legendario saltador cubano Iván Pedroso tomó gran carrera de impulso en el quinto intento y, con la ayuda de todos los santos, voló hasta los 14,91 m, dos centímetros de más, líder. Era la campeona. Toda Venezuela celebraba. Pero a Ibargüen le quedaba una vida. Y esa morena es de competencia. No por gusto es campeona olímpica y doble titular mundial.
El sexto salto de la colombiana puso en pie a todo el estadio. Había que medir la distancia. Yulimar no quería mirar. Podía ser un registro ganador. El tiempo se detuvo. Los segundos parecieron horas, hasta que por fin los jueces dictaminaron: 14,88 m.
Venezuela toda saltó de júbilo, Yulimar Rojas era campeona del mundo, la primera monarca del orbe del atletismo vinotinto.
El último salto de Ibargüen me dio pánico. Sentí temor de perder la competencia y mi medalla de oro. Esa mujer es tremenda competidora, remarcó Rojas, una muchacha con un talento enorme y un futuro brillante por delante.
Me prometí a mí misma que cambiaría para mejor el color de la medalla olímpica, quería el oro, en mi cabeza no había otra cosa, declaró exultante.
A esas alturas pocas personas recordaban que Olga Rypakova estaba en competencia, y no es poco, porque la kazaja era la campeona olímpica de Londres-2012, en la misma pista de esta competencia.
Pero el duelo Rojas-Ibargüen era demasiado para añadir más protagonistas. Rypakova llegó hasta un sólido 14,77 m y se debió conformar con el bronce. No había nada más para ella en esta gélida noche londinense.
Desde ya está planteado el desafío: Ibargüen irá a por Yulimar en el próximo Mundial, en la siguiente Olimpiada, en cuanto torneo puedan coincidir en cada temporada.
Se huelen aires de revancha nuevamente en el triple salto para damas, una venganza que pondrá al atletismo de América Latina en el centro de la atención mundial.