En verdad, Raúl se encuentra muy bien de salud a pesar de su avanzada edad y le queda mucha tela por cortar (según parece).
Pero es cierto que nadie tiene la vida comprada y hay que ser previsor. La Revolución y el pueblo de Cuba se lo merecen.
Hizo muy bien en buscar un sucesor que tome el timón del barco ante cualquier eventualidad.
Nada se puede dejar librado al azar, teniendo al monstruo tan cerquita y agazapado.
SALUDOS REVOLUCIONARIOS
(Gran Papiyo)