La necesidad tiene cara de hereje.
En todo el mundo se empezará a inmunizar a la gente con vacunas que no han sido probadas debidamente.
Se sabe que, en promedio, una vacuna tarda 6 años en salir al mercado. Algunas necesitan 8 y otras 10 años.
Las que se están desarrollando y se habilitarán en los próximos meses, habrán cumplido un año.
Pero el tiempo urge y no queda otra que correr "riesgos desconocidos". Porque permitir que el virus se siga haciendo una fiesta, puede ser nefasto para la humanidad.
Hay que ponerle un freno lo antes posible.
Y eso de seguir demonizando a los chinos, es de una estupidez supina.
Es hora que reconozcamos sus logros y su sabiduría. Y tratemos de imitarlos.
Solamente, comparando los daños que hizo el COVID-19 en China, y la mortandad que produjo en Europa y América... más de un occidental debería llamarse a silencio.
SALUDOS REVOLUCIONARIOS
(Gran Papiyo)