Yotuel, Gente de Zona, Descemer Bueno, Maykel Osorbo y El Funky
Algunos de los artistas urbanos más populares de Cuba se juntaron para lanzar una fuerte critica al régimen y pedir un cambio de sistema a través de una canción. "No más mentiras, mi pueblo pide libertad, no más doctrinas. Ya no gritemos 'Patria o muerte' sino 'Patria y vida'", dice Alexander Delgado, de Gente de Zona, en un fragmento del tema presentado este martes en directo en las redes sociales.
Se trata de una colaboración Maykel Osorbo, El Funky, Yotuel, Gente de Zona, Descemer Bueno y otros músicos cubanos dedicada a reclamar el fin del régimen cubano y la libertad de Cuba
El video es un hecho extraordinario, y fue posible gracias a la unión de este equipo estrella, quienes se muestran en el video cantando desde Miami y La Habana.
La dirección estuvo a cargo de Asiel Babastro, uno de los directores preferidos de la música urbana en Cuba, y contó con la aparición especial del artista Luis Manuel Otero Alcántara, cuyo trabajo con el Movimiento San Isidro ha generado la empatía que despide esta canción.
“Ya se acabó, ya acabó, 60 años trancado el dominó”, dice el tema en referencia al gobierno cubano, quienes han retenido el poder durante más de 60 con un régimen autoritario de un solo partido.
El video alterna imágenes de los músicos protagonistas con fragmentos de videos recientes que ejemplifican la represión en Cuba, como la manifestación del joven cubano Luis Robles en el Boulevard de San Rafael el pasado diciembre, el asalto al Movimiento San Isidro y la manifestación de artistas ocurrida el 27 de noviembre frente al Ministerio de Cultura.
En una video llamada realizada por los artistas antes que se estrenara el video, Osorbo y Otero Alcántara repararon en que casi todos los que aparecían en el clip eran de raza negra, conectados por sus orígenes humildes y los barrios que los habían visto crecer.
La canción propone una nueva consigna para sustituir la vieja y dogmática oficialista “patria o muerte”, utilizada por el gobierno: “Ya no gritemos patria o muerte, sino Patria y Vida”, canta Alexander de Gente de Zona de modo emotivo.
En las imágenes del video se muestra una tribuna en llamas, lo que puede resultar una alegoría del fin de la ideología oficial cubana y una posible referencia a la obra Una tribuna para una paz democrática, de la pintora cubana Antonia Eiriz, y que fue censurada por el gobierno de Fidel Castro en 1967.
La imagen de Martí junto a la de George Washington encabezan y finalizan el video, una clara referencia a los ideales democráticos de ambas figuras históricas y un recurso visual que acerca a la diáspora de Estados Unidos con los cubanos de la isla.
"Mis hermanos, aquí está nuestro himno de guerra, vamos por la libertad definitiva", escribió Maykel Osorbo.
En apenas unas horas de este martes, el video ya superaba las 146,377 vistas y tiene todas las papeletas para convertirse en un himno cantado por muchos cubanos, quienes han venido reclamando al gobierno cubano libertades políticas, económicas y el fin de la dictadura.
Verguenza sentimos cuando vemos miserable como tu defendiendo una Tirania de mas de 60 Años,,Se acabo,,,,cuba es de los cubanos,,,cuba no puede ser Muerte,,,Cuba es y sera Vida,,,bienestar para cada ciudadano,,,,,siii siento Verguenza por gente como tu Papiyito,,,
‘Patria y Vida’: la canción de rap que irrita al régimen de Cuba
Un grupo de músicos confronta el emblema castrista de ‘Patria o Muerte’, se hace viral y provoca la ira del Gobierno.
CAMILA OSORIO
De acuerdo a la historia oficial cubana, en medio de la revolución de los años cincuenta, uno de los emblemas de Fidel Castro y otros guerrilleros durante la guerra fueron las tres palabras: Patria o Muerte. Un emblema que se ha repetido millones de veces en discursos, estatuas o propaganda oficial, tan famoso como Hasta la victoria siempre. Pero casi seis décadas después, un grupo de músicos se atrevió a insultar el logo oficial y el Gobierno de Cuba, que no logró detener la difusión digital de la canción, respondió con profunda irritación. Todo empezó la semana pasada, el martes 16 de febrero, cuando los músicos publicaron en varias plataformas una canción llamada Patria y Vida.
“Somos la dignidad de un pueblo entero pisoteada; A punta de pistola y de palabras que aún son nada”, dice la canción de los raperos cubanos Maykel Osorbo y El Funky –que viven en la isla– junto con otros músicos que viven fuera de Cuba, como Yotuel, Gente de Zona y Descemer Bueno. “No más mentiras, mi pueblo pide libertad, no más doctrinas; Ya no gritemos ‘Patria o Muerte’ sino ‘Patria y Vida”.
“Esto va a ser un himno de libertad”, dijo desde La Habana a CubaNet el rapero El Funky. “Hacer el vídeo fue bastante difícil, porque en la situación en la que estamos la gente no quiere correr riesgos. No te quieren alquilar unas luces, no te quieren alquilar unas cámaras. Todo fue corriendo, bajo tremendo misterio en una casa pudimos poner los telones negros aquellos, para poder hacer el video, y gracias a Dios salió. Pero ya tú sabes, bajo presión. Todo bajo presión”.
Aunque los artistas cantan en un salón oscuro, la edición del vídeo es tan crítica como su letra. Arranca con la quema de un dibujo del héroe cubano José Martí, y las cenizas dejan ver detrás a un dólar con la cara de George Washington (“Cambiando al Che Guevara y a Martí por la divisa”, dice la canción sobre el poder del dólar). En la segunda mitad del video se ven imágenes de represión de la policía contra el movimiento de jóvenes San Isidro, al igual que una imagen del líder del movimiento, el artista Luis Manuel Otero Alcántara, abrazando la bandera cubana: hace tres semanas, tanto Otero como el rapero Maykel fueron detenidos temporalmente por las autoridades después de manifestarse frente el parlamento para exigir la renuncia del ministro de Cultura.
“Y el mundo ta’ consciente de que el movimiento San Isidro continúa”, dice la canción sobre los cientos de jóvenes que salieron a las calles en noviembre del año pasado exigiendo libertad de expresión en la isla, después del encarcelamiento del rapero Daniel Solís. Además de criticar el lema de Fidel, la canción habla de la importancia de tolerar las diferencias políticas en la isla (“Que no siga corriendo la sangre, por querer pensar diferente”), o critica la opulencia para extranjeros en los balnearios cubanos cuando sus ciudadanos siguen buscando migrar a Estados Unidos para escapar la extrema pobreza (”Publicidad de un paraíso en Varadero; Mientras las madres lloran por sus hijos que se fueron“).
La reacción del gobierno
En menos de una semana la canción sumó más de un millón y medio de reproducciones en YouTube y, aunque el gobierno cubano ha intentado durante años tener más control sobre el discurso político en redes, no pudo detener que la canción se expandiera como fuego. “Quisieron borrar nuestra consigna y Cuba la viralizó en redes”, escribió el viernes en su cuenta de twitter el presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, en defensa de Patria o Muerte, cuando la canción opositora ya se había expandido.
El jueves en la noche, además, el gobierno logró que se interrumpiera la transmisión regular en los canales oficiales para pasar el himno nacional a las 9 p.m., y los periódicos oficiales también han publicado varios artículos criticando la canción de los raperos. “Huele a azufre el ‘arte’ que nace a merced de la voluntad de quienes pagan –a toda costa y a todo costo– para intentar irrumpir, desde la más burda injerencia política, en la soberanía de una nación”, escribió el diario oficial Granma, aludiendo a una supuesta injerencia extranjera entre las voces críticas de la isla. “El texto apuesta sin disimulo por la restauración capitalista y el derrocamiento del poder revolucionario”, explica otro de los artículos oficiales.
El esfuerzo por acallar a los raperos reforzó la canción en vez de censurarla. “Anoche dos activistas independientes [Osmel Adrián Rubio y Anyell Valdés] escribieron ‘Patria y Vida’ en el portal de su casa en La Habana. Hoy las fuerzas de seguridad del régimen sitiaron la casa y les cortaron el internet. Así de nervioso está el régimen por esta canción”, denunció en twitter José Miguel Vivanco, director de Human Rights Watch, difundiendo el video a sus 159.000 seguidores en América. La vicepresidenta del Parlamento Europeo, Dita Charanzová, también compartió el video.
“Yo creo que esa canción refleja el estado de orfandad en el que se encuentra el país. Casi no encuentro ningún referente que no sea Donald Trump en el que un presidente responda a los artistas difamándolos. En Cuba no solo lo hace Díaz-Canel, sino también todo el aparato del Estado”, dijo a El PAÍS el escritor cubano Carlos Manuel Álvarez. “Esta situación refleja la fragilidad o el estado de miedo que tiene el gobierno cubano, que puede sentir que una canción compuesta por seis o siete músicos pone en peligro su estabilidad política”.
El episodio es un nuevo capítulo en la apasionante historia política de la música cubana, en la que algunos cantantes se mantuvieron cerca al régimen (como el trovador Silvio Rodríguez), otras se convirtieron símbolos del exilio cubano (como la reina de la salsa, Celia Cruz), y más recientemente muchos jóvenes raperos que vivían en la isla enfrentaron al Gobierno con sus versos inspirados en el hip-hop más crítico de Estados Unidos (como los raperos Los Aldeanos, ahora en Miami, que hablaban desde ya hace unos años de La Habana que había “cambiado al Che Guevara por dinero”).
La canción de Patria y Vida tiene como estrofa: “Se acabó, tu cinco nueve, yo doble dos; Ya se acabó, sesenta años trancando el dominó”. Se trata de acertijo: el famoso juego de dominó en la isla tiene la cifra 9, cuando en los de otros países del Caribe solo van hasta el 6, y queda “trancado” cuando no hay una ficha más que jugar. El cinco nueve, el 59, fue el año glorioso de Fidel, cuando ganó la guerra, y los raperos apelan a que esta ha sido la ficha del Gobierno durante sesenta años para solo gritar Patria o Muerte y parar el juego. La ficha de los raperos en esta historia, en cambio, es el futuro: el doble dos, ya sea el 2020 en el que se fortaleció el movimiento San Isidro, o el 2022, en el que esperan ver una Cuba con mucha más vida que muerte.