13 Si apartas del sábado tu pie, de hacer tu negocio en el día santo, y llamas al sábado «Delicia», al día santo de Yahveh «Honorable», y lo honras evitando tus viajes, no buscando tu interés ni tratando asuntos,
14 entonces te deleitarás en Yahveh, y yo te haré cabalgar sobre los altozanos de la tierra. Te alimentaré con la heredad de Jacob tu padre; porque la boca de Yahveh ha hablado.
Isaías 58-> Ver. 13
[V.13-> Si retrajeres. La obra de restauración debe comenzar con un reavivamiento de la verdadera observancia del sábado, cuya esencia es la comunión con Dios, y la conmemoración de su poder creador y redentor en el día que él mismo santificó. El destino de Israel como nación fue determinado por su proceder ante el santo día de Dios (Jer 17:24-27). Nunca fue el propósito divino que el sábado fuera un fin en sí mismo, sino un medio por el cual el hombre pudiera conocer mejor el carácter y los propósitos de su Creador (ver com. Exo 20:8). De hacer. Si bien la preposición “de” no aparece en el texto masorético, está en el rollo 1QIsª de los Manuscritos del Mar Muerto, en la LXX y en las versiones siríacas. Tu voluntad. La esencia del pecado es el egoísmo: hacer lo que a uno le place, sin tener en cuenta ni a Dios ni al hombre. El día sábado proporciona al hombre la oportunidad de dominar el egoísmo y cultivar el hábito de hacer lo que agrada a Dios (Jn 3:22) y lo que contribuye al bienestar de otros. Bien comprendido y correctamente observado, el sábado es la clave de la felicidad del hombre, tanto aquí como en el mundo venidero. La verdadera observancia del sábado conducirá a la obra de reforma descrita en Isa 58:5-12. Los que no participan del espíritu del sábado, tal como fue ordenado por Dios, no comprenden lo que pierden. El sábado es una de las mayores bendiciones que el amante Creador ha dispensado a los hombres. Delicia. La mera formalidad de la observancia del sábado aprovecha poco. Los que consideran que el Sábado es una carga, no han descubierto su verdadero sentido y valor. Santo. Ver com. Gen 2:1-3. Lo venerares. He aquí la prueba decisiva para determinar lo que se debe hacer en el día sábado: ¿Es para honra de Dios? Cualquier actividad que tenga el propósito de proporcionar un conocimiento más cabal del carácter de Dios, de sus obras, de sus caminos o de su voluntad, o que sirva de conducto por medio del cual el amor divino pueda llegar al corazón y a la vida de nuestros semejantes, es una honra para Dios. ] Isaías 58-> Ver. 14
[V.14-> Te deleitarás. Quienes hacen del sábado lo que Dios quería que fuera, participan de una relación íntima con Dios que no puede ser conocida por quienes no la comparten. Compárese con Sal 40:8; ver com. Eze 20:12; Eze 20:20. Las alturas de la tierra. Se prometen bendiciones tanto materiales como espirituales a los que participan de todo corazón del espíritu del sábado (ver com. Mat 6:33). La heredad de Jacob. Ver en las pp. 29-30 un resumen de las diferentes bendiciones comprendidas en la “heredad de Jacob”. ]
GENESIS 2-> Ver.
[V.1-> Fueron, pues, acabados. Los primeros versículos del capítulo segundo y la mitad del Gen 2:4 son en realidad una continuación ininterrumpida del relato de la creación del capítulo primero. El Gen 2:1, en solemne retrospección, vincula la obra de los seis días precedentes con el descanso sabático que siguió. Cuando Dios "acabó... la obra que hizo" no dejó nada inconcluso (Heb 4:3,4,9,11). La palabra "ejército", tsaba', denota aquí todas las cosas creadas.]
Hizo el cielo y la tierra Genesis 1:1Genesis 2:1,4 sabado séptimo día El Creador del universo es el verdadero y único objeto de adoración. Ningún hombre ni ningún ángel es digno de adoración. Esta prerrogativa sólo pertenece a Dios Cristo . El poder de crear es uno de los rasgos distintivos del verdadero Dios, en contraste con los dioses falsos (Jer 10:11-12). La exhortación a adorar a Dios como el Creador ha llegado a ser especialmente oportuno desde los años siguientes a la predicación inicial del mensaje del primer ángel, debido a la rápida propagación de la teoría de la evolución. Además, la exhortación a adorar a Dios como el Creador de todas las cosas, indica que debe prestarse la debida atención al monumento que recuerda las obras creadas por Dios: el sábado del Señor (ver com. Exo 20:8-11). Si el sábado hubiese sido guardado como era el propósito de Dios, hubiera servido una gran salvaguardia contra la credulidad y la evolución (ver Hch 14:15; PP 348). El sábado será un punto especial controversia en la crisis final que se avecina en el mundo en la Santa Biblia (ver com. Ap 13:16 la marca de la Bestia domingo catecismo ). ]