y paz sobre los ríos y los mares, Señor,
pacíficas estrellas en el cielo
y en los ojos del buey lunas pacíficas,
mansedumbre en el pecho de los hombres
y en el de las mujeres mansedumbre,
silencio para el sueño de los muertos
y para el de los vivos más silencio,
amor bajo la piel de las naciones
y encima de la piel cicatrices de amor,
congregantes campanas en los pueblos
y en las aldeas Domingos congregantes,
una paloma al pie de Norteamérica
y en los hombros de Rusia otra paloma,
una sola bandera en los armarios
y en los días festivos una sola,
pan en la mesa de los panaderos
y en la mesa de todos vino y pan,
libertad para amar, para creer,
y para hacer la vida libertad,
música en el oído del obrero
y en las fábricas pájaros y música,
pinturas en los muros, en las piedras,
y en los libros poemas y pinturas,
alegría muscular en los estadios
y en las camisas verdes alegría,
esperanza sin sombra por la noche
y por el día andamios y esperanza,
misericordia para los vencidos
y para el vencedor misericordia,
piedad, justicia y besos para todos
y para todos madre y más piedad,
por un rifle un millón de tulipanes
y por cada soldado otro millón,
sinfonías a cambio de batallas
y a cambio de explosiones sinfonías,
coraje entre las manos juveniles
y entre los corazones más coraje,
fuerza para creer en el futuro
y para perdonar mucho más fuerza,
paz hasta que se arruguen los cuchillos
y hasta que caiga el odio paz, y paz,
paz en el alma, paz en la mirada,
y paz mil veces, y mil veces paz