Hay a quien se le llena la
boca cuando habla de libertad. Lo digo por ese nuevo alias que ha
aparecido por aquí, que no es, sino, otra forma de propaganda del
Ucrania ¿O de yanquilandia?.
Dicen, y es muy cierto, que la
verdad es la primera victima en una guerra. Basta con ver como la
información se nos niega, si no es la que los
“demócratas Yanquis” o sus marionetas europeas permiten ¡¡RÍANSE
USTEDES DE LA CENSURA FRANQUISTA!! o de las cuantiosas dictaduras que
el Tío San regaló con la escusa de reinstalar la democracia en su
patio trasero y más allá.
La guerra de Ucrania no es
otra cosa que el intento desesperado del caduco imperio yanqui por
mantener su hegemonía sobre el planeta.
La guerra de Ucrania enfrenta
dos visiones diferentes del mundo de las oligarquías financieras,
pero sobre todo, la industria armamentista USA que está aprovechando
estos enfrentamientos para fabricar nuevos modelos y deshacerse del
material bélico en desuso, para eso azuzan la guerra allá donde
sea. Esta vez en Ucrania.