Se me apagó una estrella. 
De todo el firmamento me habían designado una pequeña estrella. Dijeron que era débil y debía tomar precauciones.
Todo lo hice, eso creí.
Y a unos días de la semana 9, mi estrellita se apagó.
Dios la tiene oculta en una cajita de tesoros que me permitirá ver cuando vaya a su casa.
Dios Bendiga a mi familia.
Dios Bendiga esas estrellitas sin luz.
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