¿No es verdad que a veces somos tímidos, para
expresar el amor que sentimos?
¿Puede ser que por no "avergonzar" a la otra
persona o por no avergonzarnos a nosotros mismos dudamos en
decir:
"TE QUIERO" y tratamos de
decirlo con otras frases como "CUÍDATE" ...
"NO CORRAS RÁPIDO" ó "PÓRTATE BIEN"
Acaso no son diferentes formas
de decir "TE QUIERO, eres importante para mí"
o "Me importas, no quiero que estés mal?
A veces -en
verdad- somos extraños: la única cosa que queremos decir, es la
única cosa que no decimos.
Y, muchas veces no lo comunicamos del todo
y la otra persona
se siente ignorada y no querida.
Por esto, debemos ESCUCHAR AL AMOR
en
las palabras que las otras personas nos
dicen.
Las palabras explícitas son
necesarias, pero con frecuencia, la manera de
decir
las cosas es aun más importante.
Un apodo dicho cariñosamente
porta mayor afecto y amor que los sentimientos
que son expresados de manera poco sincera.
Un abrazo o un beso impulsivos dicen:
”TE
AMO", aun cuando las palabras digan algo diferente.
Cualquier expresión de preocupación
de una
persona por otra dice:
"TE QUIERO".
El problema de escuchar al amor
es que no siempre entendemos el lenguaje de
amor que la otra persona está
usando.
Lo cierto es que rara vez
escuchamos; oímos las palabras, pero no
escuchamos las acciones que acompañan esas palabras o en las expresiones del
rostro.
Normalmente sólo escuchamos el rechazo o el malentendido.
No vemos
el amor que esta allí, debajo de la superficie aun cuando las palabras sean
amargas.
"Si escuchamos
atentamente, nos daremos cuenta que somos más amados de lo que
pensamos".
CARIÑOS
AIMAR