Usa tus oídos...
Usa
tu olfato...
para percibir el olor de las flores, del perfume,
del amor...
No lo impregnes, con los malos olores, como lo son
el odio, el egoísmo, la traición.
Usa tu
gusto...
para saborear el triunfo de tus metas
alcanzadas;
de los logros obtenidos con esfuerzo y dedicación...
No lo uses para saborear las
derrotas de otros, o cuando algo les sale mal
Usa tu
tacto...
para sentir y dar amor; para tocar a las
personas
con tus deseos positivos, con tu
caridad...
No lo uses para
pedir
injustificadamente, o para golpear sin piedad.
¡El
Sexto Sentido,
el más importante..!
es el que nos da la sabiduría para distinguir la
diferencia
entre los otros sentidos; entre el bien y el mal,
entre dar o
recibir, entre salvar o matar.
A veces miramos sin ver;
oímos sin
escuchar;
olemos sin percibir;
probamos sin saborear;
tocamos
superficialmente..!
¡Usa tus sentidos sabiamente;
no se trata de
cuántos tengas,
sino de cómo los utilizas!