Querida Ines.
La primera impresión que nos surge en esta época navideña, es de un movimiento acelerado y compulsivo al consumiso, para ponerle apellido y argumento al acto de regalar, por tanto, es inevitable tener sentimientos encontrados...
Pero si nos concentramos un poco más y detenemos estas tendencias más mundanas, podremos encontrarle el verdadero sentido a estas fiestas y entonces si lo hacemos, nos llegará una suave y sutil oleada de emoción, cuando descubrimos que lo que más importa para este 24 de diciembre en la noche, es reunirse en una cena familiar al surgimiento del amor y la solidaridad que solo pueden registrar los seres humanos.Por eso en estas fechas todo cambia,aunque lamentablemente se olvidan los buenos propositos muchas veces ,cuando pasan estas fechas.Como tu bien dices....
Ojala el espiritu de la Navidad permanezca en los corazones todo el año.
Un fuerte abrazo
Feliz Navidad