En nuestras vidas existen dos días que carecen de relevancia por lo que representan, el pasado y el futuro, es decir, ayer y mañana. Ayer fue para aprender y mañana será la consecuencia lógica de lo que hoy puedas realizar. Es el hoy lo que te interesa y lo que realmente merece toda nuestra atención. Por eso te sugiero que: ✔ Hoy enfrenta a la vida con la convicción de que este día jamás volverá. ✔ Hoy es la última oportunidad que tendrás de vivir intensamente, pues nadie te asegura que mañana volverás a ver el amanecer. ✔ Hoy ten la audacia de no dejar pasar ninguna oportunidad, tú única alternativa es la de triunfar. ✔ Hoy invierte tu recurso más importante: tu tiempo, en la obra más trascendental: TU VIDA, cada minuto vívelo apasionadamente para hacer de hoy un día diferente y único en tu vida. ✔ Hoy desafía cada obstáculo que se te presenta con la fe de que vencerás. ✔ Hoy resiste al pesimismo y conquista al mundo con una sonrisa, con la actitud de esperar siempre lo mejor. ✔ Hoy has de cada tarea ordinaria una expresión sublime y única. ✔ Hoy ten los pies en la tierra comprendiendo la realidad y la mirada en las estrellas para inventar tu porvenir. ✔ Hoy ten tiempo de ser feliz y deja tu huella y tu presencia en el corazón de los demás. ✔ Hoy, te invito a empezar un tiempo nuevo donde soñemos que es posible
cuanto nos proponemos y lo realicemos con alegría y dignidad.