La palabra, cuando es clara y sincera, nos acerca a los demás, nos ayuda a darnos a conocer, nos muestra lo que los demás piensan y viven… el silencio es el mayor grado de comunicación que podemos conseguir con un ser humano.
Ábreme el cofre sagrado de tu silencio, comparte conmigo desde lo que eres, desde lo que vives, desde lo que lloras y desde donde te alegras… sin palabras.
Entraré de puntillas, sin hacer ruido, para no romper la hermosura que me ofreces a través de tu silencio...
El silencio es el mayor grado de comunicación.