Manchas de sangre
Si te manchas de sangre, siempre es mejor que laves la prenda inmediatamente, pues la sangre seca es algo difícil de eliminar.
Si la tela es blanca y lavable, deberás sólo sumergir la prenda en agua fría, cambiándola varias veces, y frotar con jabón hasta quitar la mancha.
También puedes frotar la mancha reciente de sangre con agua fría a la que le habrás añadido unas gotas de agua oxigenada o también agua y sal. Déjalo secar y después lávalo. Si la sangre ya se ha secado, prueba a lavar la prenda con agua oxigenada y fosfato trisódico en solución, aclarándolo con agua dejando la prenda secar.