De pronto, una de las chicas conmovida le dice:
¡¡Mire abuelo, bandera lo que se dice bandera no hay, pero yo tengo una tatuada en la nalga,si la quiere ver y despedirse, se la puedo mostrar!!...
El viejo acepta, ella se baja los jeans y le muestra el tatuaje.
El hombre emocionado comienza a besarle la nalga en el lugar del tatuaje diciendo:
¡¡Adiós mi Cuba querida, adiós mi patria natal!!........y así siguió besándole la nalga como 15 minutos... luego la mira y le dice:
¿No te podrías dar vuelta?, .... ¡¡¡Ya me dieron ganas de despedirme de Fidel!!