Acuérdate de que el amor al prójimo es el secreto de nuestra felicidad. No hables mal de nadie, no tengas rencores ni cultives odio en tu corazón.
La ofuscación y el odio son venenos que atacan el hígado y descomponen el sistema nervioso.
Aprende a perdonar y a olvidar, para que tu corazón viva en paz y tu salud no se resienta.
La tranquilidad es el secreto de las vidas largas y felices