AMAMOS PORQUE SI
Amamos porque sí, sencillamente
porque sí, sin saberlo,
como cuando la espiga se levanta,
como la
lluvia cuando está cayendo,
como el viento que pasa y no lo sabe
y sin
embargo, pasa y es el viento.
Amamos porque sí, sencillamente
porque sí,
sin razón y sin remedio,
como se seca un pozo,
como se empaña a veces un
espejo,
como una fecha que cambió de día
o un nombre que olvidamos en un
sueño.
Amamos porque sí, sencillamente
y no importa en qué tiempo,
si
en un amanecer de primavera
o en un lento crepúsculo de invierno,
pues
si el árbol lozano da más flores
son más dulces los frutos
de los
árboles viejos.
Amamos porque sí, sencillamente
por un porqué fatal que
no sabemos,
como el traje de luto para un niño
o como las estrellas para
un ciego,
como van hacia abajo las raíces
y hacia arriba las ramas
con las hojas por dentro.
Amamos porque sí, sencillamente
porque sí,
porque es cierto,
como un anochecer al mediodía,
como una llamarada
sobre el hielo,
como resucitar estando vivos
sólo para morir sin haber
muerto.
Amamos porque sí, sencillamente.
Sencillamente, como pasa el
viento ...
A/D