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General: Que es el Agnosticismo ????
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De: el señor pastor  (Mensaje original) Enviado: 19/02/2013 04:09
Que es el Agnosticismo ???? -
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Agnosticismo




El agnosticismo (del griego α- a-, sin + γνώσις gnōsis, conocimiento) es aquella postura filosófica o que, a grandes rasgos, considera inaccesible el ser humano todo conocimiento de lo divino y de lo que trasciende o va más allá de lo experimentado o experimentable. El agnosticismo es una doctrina basada en observaciones y experiencias, y por lo tanto declara como inaccesible todo fenómeno que escape de la experimentación o reproducibilidad. En otras palabras, para un agnóstico, el valor de verdad de ciertas afirmaciones (particularmente las metafísicas respecto a la teología, el más allá, la existencia de Dios, dioses, deidades, o una realidad última) es incognoscible o, dependiendo de la variante de agnosticismo, imposible de adquirir su conocimiento debido a la naturaleza subjetiva de la experiencia.

«El gnosticismo es un conjunto de sincréticas filosófico-religiosas que llegaron a mimetizarse con el cristianismo en los tres primeros siglos de nuestra era, convirtiéndose finalmente en un pensamiento declarado herético después de una etapa de cierto prestigio entre los intelectuales cristianos. En efecto, puede hablarse de un gnosticismo pagano y de un gnosticismo cristiano, aunque el más significativo pensamiento gnóstico se alcanzó como rama heterodoxa del cristianismo primitivo.»
El término proviene del griego Γνωστικισμóς (gnostikismós); de Γνωσις (gnosis): "conocimiento".»


En algunas versiones (como el agnosticismo débil) esta falta de certeza o conocimientos es una postura personal relacionada con el escepticismo. En otras versiones (como el agnosticismo fuerte) se afirma que el conocimiento sobre la existencia o no de seres superiores no sólo no ha sido alcanzado sino que es inalcanzable. Finalmente hay versiones (apateísmo) en las cuales se afirma que la existencia o no de seres superiores, no sólo no es conocida sino que es irrelevante. En general, los agnósticos consideran que las religiones no son una parte esencial de la condición humana, pero sí de la cultura y de la historia humana.

Quienes profesan el agnosticismo no son necesariamente antirreligiosos, siendo el tipo ideal de agnóstico respetuoso con todas las creencias que proceden de una reflexión individual y honesta. El agnóstico entiende las creencias sobrenaturalistas sólo como una opción personal de cada individuo, que él no comparte.
Los servicios de investigación demográfica normalmente incluyen a los agnósticos en la misma categoría que los ateos y personas no religiosas, aunque esto puede ser engañoso dependiendo del número de agnósticos teístas que se identifican primero como agnósticos y en segundo lugar como seguidores de una religión particular.

La Biblia nos dice que debemos aceptar la existencia de Dios por fe. Hebreos 11:6 dice, “Pero sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que le hay, y que es galardonador de los que le buscan.” Dios es espíritu (Juan 4:24) así que Él no puede ser visto o tocado. A menos que Dios elija revelarse a Sí Mismo, Él es esencialmente invisible para nuestros sentidos (Romanos 1:20) La Biblia enseña que la existencia de Dios puede ser claramente apreciada en el universo (Salmo 19:1-4), sentida en la naturaleza (Romanos 1:18-22), y confirmada en nuestros propios corazones (Eclesiastés 3:11).

En pocas palabras, el agnóstico no niega la existencia de un dios, sólo dice que ésta no es demostrable.


Etimología


El término Agnóstico fue introducido por Thomas Henry Huxley en 1871 para describir su filosofía que rechaza el gnosticismo, por el cual no rechazaba sólo a ese grupo religioso del primer milenio, sino a todos los grupos que afirmaban tener un conocimiento oculto o místico.
Los primeros líderes de la iglesia cristiana utilizaron la palabra griega "gnosis" (conocimiento) para describir el “conocimiento espiritual.” El agnosticismo no debe ser confundido con las visiones religiosas que se oponen a la doctrina del gnosticismo - éstos son conceptos religiosos que no se relacionan generalmente con el agnosticismo. Huxley utilizó el término en un sentido amplio. No debe confundirse con Nosticismo.-

Definición según Thomas Henry Huxley




En el libro "Aphorisms and Reflections" escrito por Henrietta A. Huxley, esposa de Thomas Henry Huxley, ella recoge múltiples volumenes de notas y ensayos del señor Huxley , quien acuñó el término "Agnosticismo". En dichas notas se encuentra un parrafo donde Thomas Henry Huxley define con claridad lo que significaba el término para él:

"Agnosticismo, de hecho, no es un credo, sino un método, la escencia en la que se sustenta la aplicación rigurosa de un solo principio."

Y más adelante en el mísmo párrafo:

"El principio puede ser expresado positivamente: En asuntos intelectuales, sigue tu razón tan lejos como te lleve sin importar ninguna otra consideración. Y negativamente: En asuntos intelectuales, no pretendas que son ciertas las conclusiones que, o no son demostrables, o no han sido demostradas. Esto entiendo como signíficado de la fé Agnóstica, que si un hombre mantiene completa e incorrupta, no deberá sentir verguenza de mirar al universo a la cara, cualquiera que sea el futuro deparado para él".

Variaciones y tipos de agnosticismo


El agnóstico suele separar las posturas religiosas entre "conocer" y "creer". Para él, una persona religiosa se distingue de una atea por el hecho de que el religioso "cree" y el ateo "cree que no". Así, el agnóstico se aparta de estas posturas indicando que unos y otros (religiosos y ateos) afirman un nivel de conocimiento sobre la realidad superior que él no comparte. En cambio, para el religioso no se puede hacer esta separación: la afirmación "creo en Dios" implica "conozco que Dios existe".



Algunas variantes del agnosticismo incluyen:

Agnosticismo fuerte: es la postura que afirma que es imposible conocer la existencia de un dios o dioses. Los agnósticos fuertes a menudo argumentan que todo lo relacionado con la metafísica está fuera del alcance de las certidumbres del conocimiento.
El agnosticismo fuerte habitualmente se justifica en los campos epistemológicos con el argumento de que los humanos solo pueden experimentar el mundo natural y por lo tanto no pueden saber acerca de nada de lo que exista fuera de este, incluyendo deidades. Una crítica es que esta justificación solo es válida si las deidades son vistas exclusivamente como seres supernaturales, pero para apoyar esta perspectiva uno debe tener al menos algo de conocimiento acerca de la naturaleza de las deidades. La respuesta agnóstica es que, ya que el mundo natural puede ser explicado por la ciencia, las deidades por definición deben ser supernaturales.

Agnosticismo débil: es la postura que tienen los agnósticos que consideran que el conocimiento sobre la existencia de dioses, es posible. No hay consenso sobre si las personas que dicen desconocer si es posible el conocimiento sobre dioses son agnósticos débiles. En todo caso se trata de un problema semántico, y parece ser que hace falta un mejor término para estas personas.
Las personas que afirman la posibilidad del conocimiento sobre dioses, a menudo observan la alta sofisticación y penetración de la naturaleza que tiene la ciencia física. Al mismo tiempo suelen convalidar el conocimiento filosófico, como evidencia a favor o en contra de la existencia de dioses.

Agnosticismo apático: también conocido como agnosticismo apático o agnosticismo apatético es una postura que consiste en considerar que la posible existencia de deidades, y la búsqueda de conocimiento al respecto, no es importante, y que en consecuencia el debate al respecto no es importante. El apateísmo se opone al agnosticismo interesado.

La diferencia entre el apateísmo y el agnosticismo fuerte es sutil. Mientras el agnosticismo fuerte afirma: No sé si existen dioses y creo que no es posible saberlo, el apateísmo afirma: No sé si existen dioses, y no creo que sea importante saberlo.
El término apateísmo es una mezcla de las palabras teísmo y apatía.
Esta indiferencia respecto de la existencia de deidades no es necesariamente el resultado de una reflexión filosófica, sino que a menudo es consecuencia de la falta de interés del individuo por las cosas sobrenaturales, y en general por la metafísica

Un argumento filosófico a favor del apateísmo es la falta de consecuencias verificables de la existencia de Dios. Es decir: si la existencia de algo no produce efectos verificables como tales, la existencia de este algo es irrelevante.
El ignosticismo no debe confundirse con apateísmo, que aunque ambas posturas asumen nula importancia al papel de dios o deidades en el mundo experimentable o sensible, el apateísmo puede asumir su existencia dándole solo nula importancia mientras que el ignosticismo no le ve sentido a los argumentos en favor o en contra de su existencia sobre la base de que tales conceptos están mal definidos o son infalsables. Es decir, en el apateísmo se puede asumir su existencia o no existencia, mientras en el igteísmo primero se debe refinar o cambiar totalmente el concepto de dios o deidades antes que asumir alguna postura sobre la probabilidad de sus existencias.

Agnosticismo interesado: aquel que considera que el conocimiento de la existencia de deidades es relevante para el ser humano, en oposición al Agnosticismo apático, que considera lo contrario. Por lo general este interés se justifica argumentando la gran relevancia que tendría tanto la existencia de deidades, como su inexistencia para el papel que desempeña el hombre en el mundo.

Agnosticismo modelo: apunta a que las preguntas filosóficas y metafísicas no son verificables fehacientemente sino un modelo maleable de pensamiento que debe basarse sobre la racionalidad. Esta rama del agnosticismo no se enfoca en la existencia de deidades.

Ignosticismo: Algunos filósofos han visto el ignosticismo como una variación de ateísmo o agnosticismo, mientras que otros han considerado que es distinto. Según las definiciones de Theodore Drange los ignósticos no son ni ateos ni agnósticos. Una simplificación máxima en la materia establece que un ateo diría, "No creo que Dios exista", un agnóstico diría, "No sé si Dios exista o no", y un ignóstico diría que, "No sé qué se quiere decir cuando se dice Dios existe".


Mapa porcentual de ateos y agnósticos a nivel mundial, Actualización del Mapa de Zuckerman 2006.
(para agrandar hacer click aqui)


Algunas opiniones filosóficas


Entre los más famosos agnósticos (en el sentido original) se encuentran Thomas Henry Huxley, Thomas Alva Edison, Charles Darwin, Marie Curie y Bertrand Russell. A partir de los trabajos de David Hume, especialmente Dialogues Concerning Natural Religion (Diálogos con respecto a la religión natural), se piensa que él era agnóstico, aunque es un tema que sigue en debate.
La posición agnóstica es visible en varios filósofos post-kantianos, que mantienen que la razón que pretende hablar de lo incondicionado cae en contradicción, tanto para demostrar la existencia de Dios como para negarla.

Thomas Henry Huxley


Las posturas agnósticas son tan antiguas como el escepticismo filosófico, pero el término «agnosticismo» fue acuñado por el biólogo Thomas Henry Huxley (abuelo del conocido novelista inglés Aldous Huxley) en una reunión de la Sociedad Metafísica en 1869. En ella definió a los agnósticos como a las personas que niegan tanto el ateísmo como el teísmo y que aseguran que no es posible hallar respuesta a la duda metafísica de la existencia de un poder superior o Dios. En una carta a un amigo escribe:

"Yo no afirmo ni niego la inmortalidad del hombre. No veo razón para creer en ella pero tampoco tengo ningún medio para desaprobarla. No tengo objeciones a priori a esa doctrina. Nadie que tenga que lidiar día a día con la naturaleza puede meterse en el brete de las dificultades a priori. Dame alguna evidencia que justifique mi creencia en cualquier cosa y yo creeré. ¿Y cómo no habría de creer? No sería más maravilloso que la conservación de la energía o la indestructibilidad de la materia. [...] No tiene sentido que me hables de analogías y probabilidades. Yo sé a qué me refiero cuando digo que creo en la ley de los cuadrados inversos, y no basaré mi vida y mis esperanzas en alguna convicción más débil."


Desde entonces el término 'agnóstico' también ha sido usado para designar aquella persona que, aunque no considera que sea incognoscible la existencia de Dios, cree que las evidencias a favor y en contra de la existencia de una deidad no resultan concluyentes, por lo que se muestra indecisa sobre el tema.

"Por naturaleza tengo la antipatía más grande posible contra el ateísmo. Y sin embargo sé que yo —a pesar de mí mismo— soy exactamente lo que un cristiano llamaría un ateo. No puedo ver ni una sombra de evidencia acerca de que lo desconocido que se esconde tras los fenómenos del universo tenga algo que ver con nuestra relación con un Padre que nos ama y nos cuida, como dicen los cristianos. Así que con respecto a los demás dogmas cristianos —como la inmortalidad del alma y el castigo y recompensa futuros— ¿qué voy a objetar yo —que me siento compelido a creer en la inmortalidad de lo que llamamos materia y energía y a creer en un inconfundible estado actual de castigos y recompensas por nuestras acciones— qué voy a objetar contra esas doctrinas? Dame una pizca de evidencia y estoy listo para saltar a tu lado."

Con respecto al origen del término «agnóstico» para describir su actitud, Huxley da la siguiente explicación:

"Por eso inventé el título que me pareció más apropiado: «agnosticismo». Me vino a la cabeza como la antítesis del gnosticismo que apareció al principio de la historia de la iglesia. Los gnósticos pretendían saber tanto justamente acerca de las cosas que yo más ignoro. Para mi gran satisfacción el término tuvo éxito."


Se considera que el agnosticismo de Huxley es una consecuencia natural de las condiciones intelectuales y filosóficas de 1860, en que la intolerancia religiosa estaba tratando de impedir los descubrimientos científicos que parecían chocar contra una lectura literal de la Biblia (en especial del libro del Génesis) y otras doctrinas cristianas establecidas. Sin embargo el agnosticismo no se debe confundir con el deísmo, el panteísmo u otras formas científicas positivistas de teísmo.

"En temas intelectuales, sigue tu razón tanto como puedas, sin tener ningún otro tipo de consideración. Y negativamente: en temas intelectuales, no finjas que es cierta ninguna conclusión que no haya sido demostrada o sea demostrable."


Charles Darwin




En 1879, cuando Darwin estaba escribiendo su autobiografía, le llegó una carta preguntándole si él creía en el Dios Yahvé, y si el teísmo y la evolución eran compatibles. Él replicó que «un hombre puede ser un ardiente teísta y un evolucionista», citando como ejemplos a Charles Kingsley y Asa Gray; con respecto a él, dijo que «nunca había sido ateo en el sentido de negar la existencia de un Dios». Agregó: «Creo que en general (y más cuanto más viejo me hago) aunque no siempre, creo que "agnóstico" sería una descripción correcta de mi pensamiento».

El jueves 28 de septiembre de 1881 Darwin recibió la visita de dos conocidos ateos: Ludwig Büchner y Edward Aveling. Estaba presente Brodie Innes, un religioso amigo de la familia.
Darwin explicó sagazmente que «el reverendo y yo hemos sido medio amigos por treinta años. Nunca hemos estado de acuerdo en ningún tema: más bien nos miramos y cada uno piensa que el otro debe estar muy enfermo». En la charla después de la cena, Darwin les preguntó a sus invitados: «¿Por qué se hacen llamar ateos?», explicando que él prefería la palabra agnóstico. Aveling replicó que «un agnóstico no era sino un ateo elástico, y un ateo no era sino un agnóstico agresivo». Darwin respondió: «¿Y por qué tienen que ser tan agresivos?», preguntándose qué iban a ganar imponiendo esas nuevas ideas en la gente, cuando la libertad de pensamiento estaba «más que bien» para las personas educadas, pero si la gente ordinaria «estaría madura para ello».

Aveling respondió que si «las revolucionarias verdades de la selección natural y sexual hubieran sido confinadas sólo para las pocas personas sensatas» y él «habría demorado la publicación del Origen de las especies, ¿dónde estaría el mundo en este momento?». Seguramente su propio ilustrativo ejemplo había alentado a los librepensadores a
«proclamar la verdad desde los techos de las casas»
. Darwin en ese momento aceptó que «el cristianismo no está apoyado en evidencias», pero que él no estaba dispuesto a forzar esa idea en nadie, ya que de hecho «yo no abandoné el cristianismo hasta que tuve cuarenta años de edad».

Bertrand Russell




El panfleto de Bertrand Russell Por qué no soy cristiano, basado en una conferencia que dio en 1927, se considera un manifiesto clásico de la creencia agnóstica. El ensayo presenta brevemente las objeciones de Russell a algunos de los argumentos sobre la existencia de Dios y del átomo, como herencia extraterrestre y luego presenta una discusión acerca de sus objeciones morales a las enseñanzas cristianas. Luego les pide a sus lectores que se paren «sobre sus dos pies y dirijan una mirada cruda y directa al mundo [...] con una actitud sin miedo y una inteligencia libre».
En el otro panfleto posterior de Russell ¿Soy ateo o agnóstico? (subtitulado «Un ruego de tolerancia ante los nuevos dogmas»), él confirma que es un agnóstico en el sentido filosófico de que no puede creer la verdad de la existencia o no existencia de Dios. Sin embargo en el mismo ensayo admite que la manera más clara de presentarse ante una audiencia no filosófica sería como ateo.

Apuesta de Pascal




La apuesta de Pascal es un argumento creado por Blaise Pascal en una discusión sobre la creencia en la existencia de Dios, basado en el supuesto de que la existencia de Dios es una cuestión de azar. El argumento plantea que, aunque no se conoce de modo seguro si Dios existe, lo racional es apostar que sí existe. "La razón es que, aún cuando la probabilidad de la existencia de Dios fuera extremadamente pequeña, tal pequeñez sería compensada por la gran ganancia que se obtendría, o sea, la gloria eterna". Básicamente, el argumento plantea cuatro escenarios:

* Puedes creer en Dios; si existe, entonces irás al cielo.
* Puedes creer en Dios; si no existe, entonces no ganarás nada.
* Puedes no creer en Dios; si no existe, entonces tampoco ganarás nada.
* Puedes no creer en Dios; si existe, entonces no irás al cielo.

La apuesta de Pascal fue expresada por el propio filósofo de la siguiente manera:

"Usted tiene dos cosas que perder: la verdad y el bien, y dos cosas que comprometer: su razón y su voluntad, su conocimiento y su bienaventuranza; y su naturaleza posee dos cosas de las que debe huir: el error y la miseria. Su razón no está más dañada, eligiendo la una o la otra, puesto que es necesario elegir. He aquí un punto vacío. ¿Pero su bienaventuranza? Vamos a pesar la ganancia y la pérdida, eligiendo cruz (de cara o cruz) para el hecho de que Dios existe. Estimemos estos dos casos: si usted gana, usted gana todo; si usted pierde, usted no pierde nada. Apueste usted que Él existe, sin titubear. Pensamientos".

La azarosidad de la existencia de Dios


El filósofo argentino Mario Bunge señala que el supuesto en el que se basa el razonamiento de Pascal, que la existencia de Dios es una cuestión de azar, "es a la vez científicamente falso, filosóficamente confuso, moralmente dudoso y teológicamente blasfemo". Sería científicamente falso porque ninguna ciencia puede medir o calcular la probabilidad de la existencia de Dios. Sería filosóficamente confuso porque el argumento incluye la confusión entre la plausibilidad de una proposición y la probabilidad de un hecho. Sería moralmente dudoso porque los creyentes religiosos honestos se muestran reticentes respecto a la sugerencia de creer en Dios porque resulta conveniente. Y, finalmente, sería teológicamente blasfemo porque los teólogos sostienen que Dios no es ni mucho menos una criatura casual, sino el único ser necesario.

Contra este tipo de objeciones los apologistas pascalianos han recordado a sus críticos que la "Apuesta de Pascal" no pretende ser una razón suficiente para la creencia en el cristianismo, sino precisamente una respuesta utilitarista, bien sea a la utilización del utilitarismo para intentar negar la fe cristiana, bien por la aplicación a un particular contexto histórico de debate religioso. El argumento de Pascal sólo sería válido para los agnósticos que deben considerar los beneficios de practicar la fe por poco que confíen en ello. En cambio, un ateo descartaría el razonamiento de entrada puesto que para él la probabilidad de que exista Dios es nula. Los defensores de la apuesta argumentan que Pascal no pretendió probar científicamente la existencia de Dios, ni tampoco derivar filosóficamente las probabilidades de la existencia del dios cristiano de la plausibilidad de una toma de decisión frente a ciertas probabilidades, así como tampoco caer en un casualismo teológico ya que la apuesta va dirigida a aquellos que enfrentan "la posibilidad de la existencia de Dios" y no a "la existencia de un Dios probable". Pascal comienza con la premisa de que la existencia o no-existencia de Dios no es comprobable por la razón humana, desde el momento en que la esencia de Dios es "infinitamente incomprensible". En cuanto la razón no puede resolver la cuestión, uno debe "apostar", sea suponiendo o haciendo un "salto de fe". Finalmente Pascal jamás habría defendido, continúan sus defensores, una fe religiosa por conveniencia ya que no es la creencia en Dios en sí misma la que produce la salvación ni la no-creencia en Dios la condena , sino las causas de este rechazo (la elección de la nada en un nulo horizonte de trascendencia implícito en la inexistencia del dios cristiano) y las posibles consecuencias de la misma (la privación de la vista de Dios), con lo cual su apuesta es sólo una etapa intermedia a un verdadero proceso de conversión. En tal caso la contracrítica se resume a que no se puede afirmar, sin caer en contradicción, que Pascal pretendiera probar la existencia de Dios con la conveniencia de apostar por Dios y que, a la vez, dicha existencia fuera para él sólo una probabilidad útil:

"Dices que eres de tal contextura que no aciertas a creer. Pues aprende al menos a tenerte por tal: pues aun cuando la razon te guía sin embargo no sabes decidirte. Trabaja pues por convencerte, no aumentando las pruebas de la existencia de Dios, sino disminuyendo tus pasiones".

En conclusion, para que quede en claro el termino Agnoticismo, lo resumo como la ponencia de que es imposible conocer o probar la existencia de Dios. Fin.

Fuente: Wikipedia


Pd. Espero que mis creencia les sirva a cada uno de ustedes para entender un poco mas....... lo dejo en el aire el final para que no se mal interprete.
http://www.taringa.net/posts/info/4197340/-Que-es-el-Agnosticismo-.html


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De: el señor pastor Enviado: 02/05/2013 05:17


 
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