251. Mateo 3:2: y diciendo: Arrepentíos, porque el reino de los
CIELOS se ha acercado.
252. Mateo 3:16: Y Jesús, después que fue bautizado, subió luego del agua; y he aquí los
CIELOS le fueron abiertos, y vio al Espíritu de Dios que descendía como paloma, y venía sobre él.
253. Mateo 3:17: Y hubo una voz de los
CIELOS, que decía: Este es mi Hijo amado, en quien tengo complacencia.
254. Mateo 4:17: Desde entonces comenzó Jesús a predicar, y a decir: Arrepentíos, porque el reino de los
CIELOS se ha acercado.
255. Mateo 5:3: Bienaventurados los pobres en espíritu, porque de ellos es el reino de los
CIELOS.
256. Mateo 5:10: Bienaventurados los que padecen persecución por causa de la justicia, porque de ellos es el reino de los
CIELOS.
257. Mateo 5:12: Gozaos y alegraos, porque vuestro galardón es grande en los
CIELOS; porque así persiguieron a los profetas que fueron antes de vosotros.
258. Mateo 5:16: Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras, y glorifiquen a vuestro Padre que está en los
CIELOS.
259. Mateo 5:19: De manera que cualquiera que quebrante uno de estos mandamientos muy pequeños, y así enseñe a los hombres, muy pequeño será llamado en el reino de los
CIELOS; mas cualquiera que los haga y los enseñe, éste será llamado grande en el reino de los
CIELOS.
260. Mateo 5:20: Porque os digo que si vuestra justicia no fuere mayor que la de los escribas y fariseos, no entraréis en el reino de los
CIELOS.
261. Mateo 5:45: para que seáis hijos de vuestro Padre que está en los
CIELOS, que hace salir su sol sobre malos y buenos, y que hace llover sobre justos e injustos.
262. Mateo 5:48: Sed, pues, vosotros perfectos, como vuestro Padre que está en los
CIELOS es perfecto.
263. Mateo 6:1: Guardaos de hacer vuestra justicia delante de los hombres, para ser vistos de ellos; de otra manera no tendréis recompensa de vuestro Padre que está en los
CIELOS.
264. Mateo 6:9: Vosotros, pues, oraréis así: Padre nuestro que estás en los
CIELOS, santificado sea tu nombre.
265. Mateo 7:11: Pues si vosotros, siendo malos, sabéis dar buenas dádivas a vuestros hijos, ¿cuánto más vuestro Padre que está en los
CIELOS dará buenas cosas a los que le pidan?
266. Mateo 7:21: No todo el que me dice: Señor, Señor, entrará en el reino de los
CIELOS, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los
CIELOS.
267. Mateo 8:11: Y os digo que vendrán muchos del oriente y del occidente, y se sentarán con Abraham e Isaac y Jacob en el reino de los
CIELOS;
268. Mateo 10:7: Y yendo, predicad, diciendo: El reino de los
CIELOS se ha acercado.
269. Mateo 10:32: A cualquiera, pues, que me confiese delante de los hombres, yo también le confesaré delante de mi Padre que está en los
CIELOS.
270. Mateo 10:33: Y a cualquiera que me niegue delante de los hombres, yo también le negaré delante de mi Padre que está en los
CIELOS.
271. Mateo 11:11: De cierto os digo: Entre los que nacen de mujer no se ha levantado otro mayor que Juan el Bautista; pero el más pequeño en el reino de los
CIELOS, mayor es que él.
272. Mateo 11:12: Desde los días de Juan el Bautista hasta ahora, el reino de los
CIELOS sufre violencia, y los violentos lo arrebatan.
273. Mateo 12:50: Porque todo aquel que hace la voluntad de mi Padre que está en los
CIELOS, ése es mi hermano, y hermana, y madre.
274. Mateo 13:11: El respondiendo, les dijo: Porque a vosotros os es dado saber los misterios del reino de los
CIELOS; mas a ellos no les es dado.
275. Mateo 13:24: Les refirió otra parábola, diciendo: El reino de los
CIELOS es semejante a un hombre que sembró buena semilla en su campo;
276. Mateo 13:31: Otra parábola les refirió, diciendo: El reino de los
CIELOS es semejante al grano de mostaza, que un hombre tomó y sembró en su campo;
277. Mateo 13:33: Otra parábola les dijo: El reino de los
CIELOS es semejante a la levadura que tomó una mujer, y escondió en tres medidas de harina, hasta que todo fue leudado.
278. Mateo 13:44: Además, el reino de los
CIELOS es semejante a un tesoro escondido en un campo, el cual un hombre halla, y lo esconde de nuevo; y gozoso por ello va y vende todo lo que tiene, y compra aquel campo.
279. Mateo 13:45: También el reino de los
CIELOS es semejante a un mercader que busca buenas perlas,
280. Mateo 13:47: Asimismo el reino de los
CIELOS es semejante a una red, que echada en el mar, recoge de toda clase de peces;
281. Mateo 13:52: El les dijo: Por eso todo escriba docto en el reino de los
CIELOS es semejante a un padre de familia, que saca de su tesoro cosas nuevas y cosas viejas.
282. Mateo 16:17: Entonces le respondió Jesús: Bienaventurado eres, Simón, hijo de Jonás, porque no te lo reveló carne ni sangre, sino mi Padre que está en los
CIELOS.
283. Mateo 16:19: Y a ti te daré las llaves del reino de los
CIELOS; y todo lo que atares en la tierra será atado en los
CIELOS; y todo lo que desatares en la tierra será desatado en los
CIELOS.
284. Mateo 18:1: En aquel tiempo los discípulos vinieron a Jesús, diciendo: ¿Quién es el mayor en el reino de los
CIELOS?
285. Mateo 18:3: y dijo: De cierto os digo, que si no os volvéis y os hacéis como niños, no entraréis en el reino de los
CIELOS.
286. Mateo 18:4: Así que, cualquiera que se humille como este niño, ése es el mayor en el reino de los
CIELOS.
287. Mateo 18:10: Mirad que no menospreciéis a uno de estos pequeños; porque os digo que sus ángeles en los
CIELOS ven siempre el rostro de mi Padre que está en los
CIELOS.
288. Mateo 18:14: Así, no es la voluntad de vuestro Padre que está en los
CIELOS, que se pierda uno de estos pequeños.
289. Mateo 18:19: Otra vez os digo, que si dos de vosotros se pusieren de acuerdo en la tierra acerca de cualquiera cosa que pidieren, les será hecho por mi Padre que está en los
CIELOS.
290. Mateo 18:23: Por lo cual el reino de los
CIELOS es semejante a un rey que quiso hacer cuentas con sus siervos.
291. Mateo 19:12: Pues hay eunucos que nacieron así del vientre de su madre, y hay eunucos que son hechos eunucos por los hombres, y hay eunucos que a sí mismos se hicieron eunucos por causa del reino de los
CIELOS. El que sea capaz de recibir esto, que lo reciba.
292. Mateo 19:14: Pero Jesús dijo: Dejad a los niños venir a mí, y no se lo impidáis; porque de los tales es el reino de los
CIELOS.
293. Mateo 19:23: Entonces Jesús dijo a sus discípulos: De cierto os digo, que difícilmente entrará un rico en el reino de los
CIELOS.
294. Mateo 20:1: Porque el reino de los
CIELOS es semejante a un hombre, padre de familia, que salió por la mañana a contratar obreros para su viña.
295. Mateo 22:2: El reino de los
CIELOS es semejante a un rey que hizo fiesta de bodas a su hijo;
296. Mateo 23:9: Y no llaméis padre vuestro a nadie en la tierra; porque uno es vuestro Padre, el que está en los
CIELOS.
297. Mateo 23:13: Mas ¡ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! porque cerráis el reino de los
CIELOS delante de los hombres; pues ni entráis vosotros, ni dejáis entrar a los que están entrando.
298. Mateo 24:29: E inmediatamente después de la tribulación de aquellos días, el sol se oscurecerá, y la luna no dará su resplandor, y las estrellas caerán del cielo, y las potencias de los
CIELOS serán conmovidas.
299. Mateo 24:36: Pero del día y la hora nadie sabe, ni aun los ángeles de los
CIELOS, sino sólo mi Padre.
300. Mateo 25:1: Entonces el reino de los
CIELOS será semejante a diez vírgenes que tomando sus lámparas, salieron a recibir al esposo.
301. Mateo 25:14: Porque el reino de los
CIELOS es como un hombre que yéndose lejos, llamó a sus siervos y les entregó sus bienes.