A los ocho días de la resurrección..
Tomás toca el cuerpo del Señor..
Su dedo traspasa las heridas de los clavos.
Y su mano traspasa el seno del Señor..
Así es revelado el Espíritu de Dios
Oh, Señor mío y Dios mío..
Para ser creyentes tenemos que traspasar la carne de Cristo..
Y vivir en Espíritu lo que el Señor nos reveló en la carne...
El Ungido