De nada sirve que creais que conocéis las cosas del mundo si no conoceis las cosas de Dios....
No hay cristianos biblicos, los cristianos verdaderos siguen solo los mandamientos del Evangelio. Muchos preceptos del viejo testamento fueron abolidos por Jesucristo porque solo eran preceptos de hombres.
Jesucristo mandó predicar por todos los pueblos solo el Evangelio, pero los poderosos de roma y de otros imperios que no amaban el Evangelio, fueron los que impusieron al mundo sus biblias (las leyes del viejo testamentoque Jesucristo había dejado abolidas:
LA VERDADERA LEY DE DIOS ENSEÑADA POR JESUCRISTO
Dios, Creador de todas las cosas, entregó la Ley a su pueblo en tiempos de Moisés, pero pasados los años los escribas dominados por los dictadores y hombres codiciosos del pueblo, cambiaron la Ley de Dios. Los profetas avisaron al pueblo de estas cosas y así dijeron:
"...mi pueblo no conoce el juicio de Yavé. ¿Cómo decís: Nosotros somos sabios, y la ley de Yavé está con nosotros? Ciertamente la ha cambiado en mentira la pluma mentirosa de los escribas" (Jeremías 8:7-9).
"Y la tierra se contaminó bajo sus moradores; porque traspasaron las leyes, cambiaron los mandamientos, quebrantaron el pacto sempiterno" (Isaías 24:5-6)
"Dice, pues, el Señor: Porque este pueblo se acerca a mí con su boca, y con sus labios me honra, pero su corazón está lejos de mí, y su temor de mí no es más que un mandamiento de hombres que les ha sido enseñado" (Isaías 29,13).
Estas cosas escribieron los profetas para avisar al pueblo, pero el pueblo no hacía mucho caso de estas enseñanzas de los profetas. Entonces, Dios se hizo Hombre y, cuando predicó el Evangelio, así dijo a los escribas y sacerdotes del pueblo:
"Hipócritas, bien profetizó de vosotros Isaías, cuando dijo:
Este pueblo de labios me honra;
Mas su corazón está lejos de mí.
Pues en vano me honran,
Enseñando como doctrinas, mandamientos de hombres". (Mateo 15,7-9
En tiempos de Jesucristo el pueblo estaba en tinieblas porque ya no conocía la verdadera Ley de Dios. Entonces, Jesucristo nos volvió a enseñar la verdadera Ley de Dios, y así es como el pueblo que estaba en tinieblas vio una gran Luz:
" El pueblo asentado en tinieblas vio gran luz;
Y a los asentados en región de sombra de muerte,
Luz les resplandeció". (Mateo 4:15-16)
Jesucristo, cuando nos predicó el Evangelio, nos enseñó la verdadera Ley y los verdaderos mandamientos de Dios, y así nos dijo:
"todas las cosas que queráis que los hombres hagan con vosotros, así también haced vosotros con ellos; porque ésta es la ley y los profetas". (Mateo 7:12)
"Entonces vino uno y le dijo: Maestro bueno, ¿qué bien haré para tener la vida eterna? El le dijo: ¿Por qué me llamas bueno? Ninguno hay bueno sino uno: Dios. Mas si quieres entrar en la vida, guarda los mandamientos. Le dijo: ¿Cuáles? Y Jesús dijo: No matarás. No adulterarás. No hurtarás. No dirás falso testimonio. Honra a tu padre y a tu madre; y, Amarás a tu prójimo como a ti mismo. El joven le dijo: Todo esto lo he guardado desde mi juventud. ¿Qué más me falta? Jesús le dijo: Si quieres ser perfecto, anda, vende lo que tienes, y dalo a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo; y ven y sígueme. Oyendo el joven esta palabra, se fue triste, porque tenía muchas posesiones" (Mateo 19:16-22)
Ésta es la verdadera Ley y estos los verdaderos mandamientos de Dios enseñados por Jesucristo, y esta Ley y estos mandamientos dejan abolidos todos los mandamientos escritos en el viejo testamento que faltaban a la misericordia y que mandaban esclavitud, desigualdad, castigos terribles y penas de muerte..., porque la verdadera Ley de Dios es la misericordia y el perdón...
"... si supieseis qué significa: Misericordia quiero, y no sacrificio, no condenaríais a los inocentes" (Mateo 12:7)
"Entonces se le acercó Pedro y le dijo: Señor, ¿cuántas veces perdonaré a mi hermano que peque contra mí? ¿Hasta siete? Jesús le dijo: No te digo hasta siete, sino aun hasta setenta veces siete". (Mateo 18:21-22)