Los primeros jesuitas eran cripto-Judios. El mismo Ignacio de Loyola era un cripto-Judio de lo Oculto
Cábala. A cripto-Judio es un Judio que se convierte a otra religión y hacia el exterior abraza el nuevo
religión, mientras que el mantenimiento de las prácticas judías en secreto. Como John Torell explica: "En 1491 de San Ignacio
Loyola nació en la provincia vasca de Guipúzcoa, España. Sus padres eran marranos y en el
momento de su nacimiento, la familia era muy rica. En su juventud se convirtió en miembro de la comunidad judía
Illuminati orden en España. Como una tapadera para sus actividades de cifrado judío, se puso muy activo como
Católica Romana. El 20 de mayo 1521 Ignacio (como se le llama ahora) fue herido en una batalla, y
se convirtió en un semi-inválido. No se puede tener éxito en el campo militar y político, comenzó una búsqueda de
santidad y eventualmente terminó en París, donde estudió para el sacerdocio. En 1539 tuvo
se trasladó a Roma, donde fundó la "Compañía de Jesús", que se convertiría en la más vil y sangriento
y persiguiendo el orden en la Iglesia Católica Romana. En 1540, el actual Papa Paulo III aprobó
el orden. A la muerte de Loyola en 1556 había más de 1000 miembros en la orden de los jesuitas,
ubicado en un número de naciones ".
Ignacio de Loyola, secretario, Polanco, era de ascendencia judía y fue la única persona presente en
Lecho de muerte de Loyola. James Lainez, que sucedió a Loyola como el segundo General de los Jesuitas, fue también de
Ascendencia judía. Judios fueron atraídos a la orden de los jesuitas y se unieron en gran número. Lacunza fue
no es la excepción. Él era un Judio, lo que explica por qué se introdujo la enseñanza escatológica de una
volver a los sacrificios de animales judíos durante el Milenio. (En un libro titulado La venida del
Mesías en Gloria y Majestad publicado en 1812, 11 años después de la muerte de su autor, el jesuita
Emanuel de Lacunza quien escribió bajo el seudónimo ficticio de un Judio convertido supuestamente,
Rabino Juan Josafat Ben Ezra, con el fin de ocultar su identidad y para hacer sus escritos más
del gusto de los lectores protestantes. Promovió los escritos de los jesuitas del siglo XVI sacerdote
Francisco Ribera, el desarrollo de una perspectiva futurista que restringía los cumplimientos proféticos en la
libro de Apocalipsis hasta el fin del mundo). Lacunza escribió también que durante un milenio después de la
tribulación por los sacrificios de animales judíos serían reintegrados junto con la Eucaristía (la masa) de
la Iglesia Católica. Lacunza ha seguido después de fábulas judías y sustituido los mandamientos de
Dios con los mandamientos de los hombres. Esa doctrina da la primacía Judios en el plan de Dios y
relega los cristianos a un paréntesis profético a ser suplantados por los Judios durante el
mil años de reinado terrenal de Cristo.