Para la construcción de la Iglesia Catedral de Bariloche, el arquitecto Alejandro Bustillo ofreció su proyecto gratuitamente. Su sentimiento se orientó en un estilo neogótico con reminiscencias francesas. Un proyecto que incluía, buscado o no, algo de las herméticas ciencias medievales.
El edificio forma una cruz latina tendida en el suelo con su cabecera orientada exactamente al Este, para que el Sol ilumine de forma adecuada el interior a través de los vitrales, y en el exterior la luz de todas las horas del día crean planos de luz y sombra que embellecen y glorifican este coloso protector del pueblo. Sus muros son de piedra, sus techos negros, severos, dan vigor y culminan la obra a 69 metros de altura en la aguja del campanario.
En 1942 se regularizó el dominio del terreno donde emplazarla y dos años más tarde se concluyó con la estructura de hormigón realizada por la Compañia General de Construcciones con la conducción del Ingeniero Pedro Faukland, actuando como capataz don Esteban Capitanich. Fue cuando comienzan su labor los picapedreros.
Luego se nombró capataz del equipo a don José Lukman, esloveno de nacimiento, picapedrero por herencia, recibido en su juventud tras cuatro años de escuela tallando en las cavas romanas de Aurisinia. El fue quien diseñó y labró, las molduras que le dan elegancia al conjunto, y quien a golpes de maza dió forma a la mayoria de los arcos y a la piedra de encaje.
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Para entonces el conjunto de trabajadores de la iglesia, unos cuarenta, almorzaban cada medio día en una fonda de tradición: “La Veneta”, un pequeño edificio de madera ubicado en la esquina de Vice Almirante O’Connor y Palacios muy cerca de la obra, atendida con esmero por la señora Emma Dilena de Lukman, la esposa del capataz.
Los breves instantes de descanso y jolgorio que los trabajadores disfrutaban en aquel restaurante de mesas largas y bancos en lugar de sillas, son muy recordados. Era al mismo tiempo un lugar de comunicación y acercamiento entre los obreros de la región y los llegados de Croacia, Eslovenia e Italia.
Vitrales Iglesia Catedral Bariloche
Los vitrales son un tema aparte: Exequiel Bustillo: promocionó una Comisión de Damas, que, presidida por la señora Isabel Nevares de Ortiz Basualdo – hermana del obispo Jaime de Nevares logró reunir por donaciones el dinero suficiente para encargarlos. En Buenos Aires se había detectado al señor Enrique Thomas, un francés poseedor del arte preciosista del vitral. Pero, ¿quien podia determinar qué imágenes corresponderían al templo?
Atinadamente el Dr. Exequiel Bustillo se comunicó con monseñor Essandi preguntándole acerca de los motivos que deberían contemplarse en los vitrales, sugiriendo tibiamente sobre la posibilidad de que estas imágenes tuviesen vinculaciones regionales, participación que el sacerdote aceptó con entusiasmo. Y asi surgió del taller de Enrique Thomas una preciosa imagen de Nuestra Señora del Nahuel Huapi – patrona del templo- e imágenes vernáculas. En los vitrales estan representados, además, los aborígenes, el padre jesuita Nicolas Mascardi, fray Francisco Menéndez, el mismísimo general Julio Argentino Roca, Ceferino Namuncura, el padre Milanesio – el primer curita del pueblo de Bariloche – y hasta los creadores del templo: los arquitectos Alejandro Bustillo representado como san Rafael – y Miguel Angel Césari, como san Miguel Arcangel.
Los vitrales fueron colocados en 1947, quedando la obra concluida por fuera, con el interior aún en bruto y piso de cemento alisado. Aun así los vecinos, entre ellos Luis Fernández y Pablo Depellegrin, proveyeron algunos bancos. En el campanario, sin campanas, se instaló un carrillón con amplificadores, que por largos años, acompañó con su excelente sonido de campanas al pueblo de Bariloche.
El 29 de noviembre de 1483 un sacerdote y abogado nacido en Estrasburgo accedía al cargo de Maestro de Ceremonias del papado en Roma, tras haber comprado el puesto por unos 450 ducados. Se llamaba Johann Burchard y hasta su muerte en 1506 serviría en ese cargo a cinco pontífices.
Unos pocos años antes, en 1503, Burchard se hizo construir un palacio, que todavía sigue en pie en la actual Vía del Sudario (en el número 44) con el nombre de Casa del Burcardo, con una torre anexa.
La torre, junto con el lugar de nacimiento de Burchard, acabaron por dan nombre al lugar donde se alzaban: Torre Argentina. Argentina porque el nombre latino de Estrasburgo era Argentoratum. Lo que vendría a significar algo así como la torre del estrasburgués.
Localización de Largo di Torre Argentina en Google Maps
En 1927 las autoridades romanas decidieron demoler buena parte de las construcciones de Torre Argentina (entre ellas la torre de Burchard) para crear una gran plaza, la actual Largo di Torre Argentina, situada en el antiguo Campo de Marte en el camino entre el Panteón y el Foro.
Durante las obras aparecieron la cabeza y los brazos de una estatua de proporciones colosales, lo que llevó a realizar excavaciones arqueológicas que, como suele ser habitual en la capital italiana, encontraron más de lo que se esperaba hallar: toda una área sacra con restos de cuatro templos de época romana republicana, además del Teatro de Pompeyo.
El teatro fue el primero permanente construido en Roma (y el primer edificio totalmente de mármol), en el año 55 a.C., gracias a una argucia de Pompeyo.
Como estaba prohibido levantar teatros permanentes en la ciudad hizo construir en lo alto de la cávea un templo dedicado a Venus Victrix, argumentando que la propia cávea no era más que una escalinata para acceder al templo.
Tenía 150 metros de diámetro y capacidad para más de 17.000 espectadores. Tras la escena había un enorme pórtico de 180 por 135 metros que rodeaba un jardín, y en el extremo de este pórtico opuesto al teatro se ubicaba la Curia de Pompeyo.
Una curia era una reunión para discutir asuntos públicos, y en época republicana servía también para designar el edificio donde se reunía el Senado, generalmente la Curia Hostilia situada en el Foro.
Pero había otras, como la mencionada de Pompeyo, precisamente el lugar donde en marzo del año 44 a.C. se estaba reuniendo el Senado.
Allí se dirigió Julio César el día 15 de ese mes para encontrar la muerte a manos de un grupo de senadores, como cuentan Plutarco y Suetonio.
Al entrar César se levantó el Senado; pero luego que se sentó, aquellos le rodearon en tropel, enviando delante a Tulio Cimbro, con pretexto de pedirle por un hermano desterrado; todos intercedían con él, tomando a César las manos y besándole en el pecho y la cabeza. Al principio desechó sus súplicas; pero viendo que no desistían, se levantó con enfado, y entonces Tulio retiró con entrambas manos la toga de los hombros, y Casca fue el primero, porque se hallaba a la espalda, que, desenvainando el puñal, le dio una herida poco profunda en el hombro. Echóle mano César a la empuñadura y, dando un grito, le dijo en lengua latina: “Malvado Casca, ¿qué haces?” Y éste, llamando a su hermano, le pedía en griego que le socorriese. Herido ya de muchos, miró en rededor, queriendo apartarlos; pero cuando vio que Bruto alzaba el puñal contra él, soltó la mano de que tenía asido a Casca, y cubriéndose la cabeza con la toga, entregó el cuerpo a los golpes. Hiriéronle sin compasión, empleándose contra su persona muchos puñales, con los que se lastimaron unos a otros, tanto que Bruto recibió una herida en una mano, queriendo concurrir a aquella muerte, y todos se mancharon de sangre (Plutarco, Vidas Paralelas: Bruto)
Esta curia, según afirman Suetonio y otros autores, fue tapiada posteriormente como lugar nefasto. Posiblemente a lo que se refieren es a la estructura de hormigón de tres metros de ancho por dos de alto con que Augusto mandó cubrir el lugar para señalarlo. Con el tiempo, el entorno sería convertido en letrinas públicas.
Se decidió tapiar la curia en la que había sido asesinado, designar con el nombre de “Parricidio” los idus de marzo y no celebrar jamás una reunión del Senado en esta fecha (Suetonio, Vidas de los doce césares: El divino Julio)
En la actual plaza Largo di Torre Argentina se pueden ver hoy los restos del lado este del pórtico, así como tres de los cuatro templos.
Restos del teatro de Pompeyo están en el subsuelo de la Vía di Grotta Pinta, mientras que las bóvedas originales del teatro forman los sótanos de los restaurantes de esta calle y parte de las paredes del hotel Albergo Sole al Biscione.
El punto exacto donde cayó César, justo en el centro del fondo de la curia, a los pies de la estatua de Pompeyo, puede contemplarse hoy frente a los restos de los templos, prácticamente embebido bajo el pavimento de la calle.
The Spot Where Julius Caesar Was Killed Opens to Tourists in Rome — What to Know
Travelers to Rome have a new way to step into history thanks to a brand-new elevated walkway that will bring visitors over the spot where Julius Caesar was killed.
The Largo Argentina square where the infamous assassination took place in 44 B.C. opened to the public this week, according to Rome’s mayor. The new access is thanks to a series of walkways (and nighttime illumination) funded by the luxury jeweler Bulgari, The Associated Press reported.
“Happy to be able to give back to the Romans and tourists the Sacred Area of Largo Argentina in all its beauty,” Mayor Roberto Gualtieri wrote in a Facebook post, calling the site “a real precious jewel made of history, art and culture, nestled in the heart of our city.”
Gualtieri added visitors will be able to “literally immerse themselves in History” by visiting the wall of the Curia of Pompeo where Caesar was killed along with the ruins of four temples.
The walkways are accessible and both wheelchair and stroller friendly. To reach the ruins, travelers can either descend on a staircase or use an elevator platform, the AP noted. General admission will cost 5 euros (about $5.50), and the ruins will be open every day except Mondays and some holidays.
Previously, the ancient spot was only visible from the street level. That is on a higher ground than the temples, which were first unearthed in the 1920s as part of dictator Benito Mussolini’s plan to change the landscape of the city, according to the wire service.
“We go forward in this way to enhance and make more and more fruitful and attractive the great city cultural heritage that never ceases to amaze with its treasures and wonders,” Gualtieri said in his post.
Looking east through nave on 23 June 1976, two days after the summer solstice Mary Magdalene's relics in the crypt
In 1976, Hugues Delautre, one of the Franciscan fathers charged with stewardship of the Vézelay sanctuary, discovered that beyond the customary east-west orientation of the structure, the architecture of La Madeleine incorporates the relative positions of the Earth and the Sun into its design. Every June, just before the feast day of Saint John the Baptist, the astronomical dimensions of the church are revealed as the sun reaches its highest point of the year, at local noon on the summer solstice, when the sunlight coming through the southern clerestory windows casts a series of illuminated spots precisely along the longitudinal center of the nave floor.[13][14][15][16][17]
Looking east through nave on 23 June 1976, two days after the summer solstice Mary Magdalene's relics in the crypt
In 1976, Hugues Delautre, one of the Franciscan fathers charged with stewardship of the Vézelay sanctuary, discovered that beyond the customary east-west orientation of the structure, the architecture of La Madeleine incorporates the relative positions of the Earth and the Sun into its design. Every June, just before the feast day of Saint John the Baptist, the astronomical dimensions of the church are revealed as the sun reaches its highest point of the year, at local noon on the summer solstice, when the sunlight coming through the southern clerestory windows casts a series of illuminated spots precisely along the longitudinal center of the nave floor.[13][14][15][16][17]
Our Lady of the Nahuel Huapi is the Patron Saint of Bariloche and its cathedral. The images inside this catholic temple show the indigenist roots of evangelization in Patagonia.
We discovered Bariloche’s church cathedral as soon as we reached the city. Close to the shore of Lake Nahuel Huapi and surrounded by a line of tall pine-trees, it does not go unnoticed.
This house of prayer features a Neo-gothic style with simple lines, very high walls and a dome crowned with a significant crucifix and a globe. Inside, its classical construction in the shape of a Latin cross combines perfectly with the simplicity outside.
Upon entering the building past its thick wooden gates, we stopped at the hall to appreciate two important figures. One of them was made of stone and it represented the image of Our Lady of the Nahuel Huapi holding Child Jesus in her arms and resting her right hand on the shoulder of a native child. The second one was carved in wood and it featured Ceferino Namuncurá wearing his classic poncho pampa. Both of them are enough evidence of the missionary message of the Church.
The indigenist roots of evangelization in Patagonia
It does not go unnoticed
High-rise and simplicity
Neo-gothic style with simple lines
We were surprised to learn that the cathedral was put under the protection of Our Lady of the Nahuel Huapi by Monsignor Essandi and that such image had accompanied the ancient mission founded by Father Mascardi during the seventeenth century.
We reached the central nave almost in silence, as if accompanying that very high and simple resonance box. It was held by large columns and the walls were made of local stone. At the altar, a large crucified Jesus Christ prevailed.
The colorful Byzantine stained glasses occupied a predominant position in the last stage of the construction of the cathedral. The image of the Patron Saint stood completely transparent in the altar in front. What is particular about these stained glass figures is that they offered a tribute to their own artisans. The faces of the missionaries Mascardi and Melanesio and of all those who gave their life to the Church, namely builders Alejandro Bustillo and Miguel Angel Césari, were assigned to Biblical characters (Saint Raphael Archangel, Saint Michael Archangel, etc).
These stained glass windows let the sunlight in during the day and the artificial lights at night. When the sun sets, the church comes to a new life: the illumination outside seems to make its walls higher and to highlight its construction details.
We thought the details carved in local wood were quite significant. They were present in the long well-finished pews, in the side altars and the confessional booths.
The building was raised by architect Alejandro Bustillo in 1946. A staircase of six steps made of stone provides majesty to the cathedral entrance through the main gate.
After touring around the entire venue, we left the church feeling quite pleased that it was surrounded by two blocks of excellent green parks. Several religious images and benches to enjoy outdoor life perfectly combined with the peace we had just experienced inside.
Several days later, we attended a choir presentation that gave us a different image of the same cathedral: a place for liturgical meetings but also to encounter and enjoy culture. Another outstanding feature of Bariloche’s cathedral.
Mónica Pons Eduardo Epifanio
How to get here: San Carlos de Bariloche Cathedral Our Lady of the Nahuel Huapí Almirante O’Connor Ave. and Beschtedt St.