Ayer ya hicimos una breve incursión sobre el Arco del Triunfo del Carrousel. Dejamos en un punto y aparte una explicación más profunda del monumento que lo corona. Allí vemos un carro tirado por cuatro caballos que es escoltado por las alegorías de la Victoria y de la Paz. Pero este monumento no fue siempre el que estuvo allí mirando al frente del Museo del Louvre. Para entender su historia quizá antes tengamos que dar una vuelta por Venecia.
Los cuatro caballos originales de la cuadriga de bronce fueron parte del botín de guerra de Napoleón, y se encontraban en la plaza de la Basílica de San Marco de Venecia. Estos caballos venecianos eran, a su vez, copias de originales griegos de bronce dorado del siglo IV a. C. que venían del Templo del Sol de Corintia.
Estas esculturas originales datan de finales de la Antigüedad Clásica y han sido atribuidas al escultor griego Lisipo del siglo IV a.C. Aunque siempre se creía que eran de bronce, los análisis sugieren que están hechas de cobre. Al parecer este material fue escogido para obtener un más satisfactorio dorado. Dados los actuales conocimientos de la tecnología antigua, este método de fabricación sugiere que las piezas son de factura romana en vez de helénico.
Los caballos junto a su cuadriga fueron expuestos en el Hipódromo de Constantinopla durante siglos. En 1204, fueron tomados por las fuerzas venecianas durante el saqueo de la capital bizantina en la Cuarta Cruzada. Lo que ocurrió con el auriga después de la Cuarta Cruzada es desconocido. El Dogo de Venecia Enrico Dandolo envió los caballos a Venecia, donde se instalaron en la terraza de la fachada de la Basílica de San Marcos en 1254.
En 1797, Napoleón tomó los caballos por la fuerza y los llevó a París, donde fueron usados en el diseño del Arco de Triunfo del Carrousel, en ese caso junto a un cuadriga.
En 1815 los caballos fueron devueltos a la Basílica tras la derrota francesa. Permanecieron en la terraza hasta comienzos de la década de 1980, cuando, para evitar daños por la polución del aire y el efecto del excremento de las aves, fueron substituidas por réplicas. Desde entonces, la cuadriga original está expuesta en un Museo dentro de la Basílica.
El carro parisino es escoltado por las alegorías de la Victoria y de la Paz, en oro. Se cree comúnmente que la persona que conduce el carro es el emperador en persona. Sin embargo, no es el caso.
En su momento se fabricó una estatua de bronce de «Napoleón triunfador conduciendo el carro de la victoria«, y se la colocó en su lugar correspondiente. Pero el emperador rehusó al final a ver su esfinge en la cumbre de este arco dedicado a la gran armada. Se quitó la estatua en 1812 y el carro se quedó vacío hasta 1828.
La estatua de Napoleón es de bronce dorado y es obra de François Frédéric Lemot. Se encuentra actualmente en el Museo del Louvre, a escasos cincuenta metros de su destino original.
En 1815 los aliados contra Francia ocupan la capital gala y devuelven los caballos a Venecia.