LOS DÍAS DE LAS PLAGAS SERÁN ACORTADOS según las profecías... HABRÁ GRAN TRIBULACIÓN en el mundo, pero AQUELLOS DÍAS SERÁN ACORTADOS
Las plagas y los desastres que vienen al mundo, vienen como un aviso del cielo para que los hombres se arrepientan y vuelvan a buscar a Jesucristo y a pronunciar su Bello Nombre. Pero la gran mayoría de los hombres no quieren recordar el nombre de Jesucristo y tampoco quieren recordar sus misericordiosos mandamientos.
Los hombres no quieren recordar a Jesucristo ni tampoco sus mandamientos. Entonces, ¿cómo pueden acabar las plagas si los hombres no se arrepienten?... Pero aún así, y sin que las naciones del mundo se arrepientan, Jesucristo quiere que sus hijos se salven, y por atención a sus hijos, puede hacer que las plagas desaparezcan o que no sean tan mortales o que los días de las plagas se acorten para que sus hijos puedan salvarse, pues las escrituras de las profecías nos dicen "Y si aquellos días no fuesen acortados, nadie sería salvo":
"...porque habrá entonces gran tribulación, cual no la ha habido desde el principio del mundo hasta ahora, ni la habrá. Y si aquellos días no fuesen acortados, nadie sería salvo; mas por causa de los escogidos, aquellos días serán acortados". (Mateo 24:21-22)
Seguidamente, recordaremos las profecías de Jesucristo más extensamente:
"Y muchos falsos profetas se levantarán, y engañarán a muchos; 24:12 y por haberse multiplicado la infracción de la Ley, el amor de muchos se enfriará. 24:13 Mas el que persevere hasta el fin, éste será salvo. 24:14 Y será predicado este evangelio del reino en todo el mundo, para testimonio a todas las naciones; y entonces vendrá el fin. 24:15 Por tanto, cuando veáis en el lugar santo la abominación desoladora de que habló el profeta Daniel (el que lee, entienda), 24:16 entonces los que estén en Judea, huyan a los montes. 24:17 El que esté en la azotea, no descienda para tomar algo de su casa; 24:18 y el que esté en el campo, no vuelva atrás para tomar su capa.
24:19 Mas ¡ay de las que estén encintas, y de las que críen en aquellos días! 24:20 Orad, pues, que vuestra huida no sea en invierno ni en día de reposo; 24:21 porque habrá entonces gran tribulación, cual no la ha habido desde el principio del mundo hasta ahora, ni la habrá. 24:22 Y si aquellos días no fuesen acortados, nadie sería salvo; mas por causa de los escogidos, aquellos días serán acortados". (Mateo 24:11-22)
LA LEY DEL "Ojo por ojo, y diente por diente"
ESCRITA EN EL VIEJO TESTAMENTO FUE ABOLIDA POR JESUCRISTO
"Oísteis que fue dicho: Ojo
por ojo, y diente por diente. Pero yo os digo:
No resistáis al que es malo; antes, a cualquiera
que te hiera en la mejilla derecha, vuélvele también la otra; y al que quiera
ponerte a pleito y quitarte la túnica, déjale también la capa....... ". (Mateo
5:...)
El Señor dejó abolida esta ley del "ojo por ojo y diente por diente"
porque era una Ley que no contemplaba el perdón ni la misericordia.
"Oísteis que fue dicho: Amarás
a tu prójimo, y aborrecerás a tu enemigo. Pero
yo os digo: Amad a vuestros enemigos, bendecid
a los que os maldicen, haced bien a los que os aborrecen, y orad por los que os
ultrajan y os persiguen...." (Mateo 5...)
"Si
decimos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos, y la
verdad no está en nosotros.
Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar
nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad. Si decimos que no
hemos pecado, le hacemos a él mentiroso, y su palabra no está en
nosotros".(1ª
Juan 1:8-10)
«Huyamos de toda vanidad; odiemos absolutamente las obras del mal camino. No viváis solitarios, replegados en vosotros mismos, como si ya estuvierais justificados, sino, reuniéndoos en un mismo lugar, inquirid juntos lo que a todos en común conviene.....» (Carta de Bernabé 4,10).
«Comunicarás en todas las cosas con tu prójimo, y no dirás que las cosas son tuyas propias, pues si en lo imperecedero sois partícipes en común, ¡cuánto más en lo perecedero!..... No seas de los que extienden la mano para recibir y la encogen para dar. Amarás como a la niña de tus ojos a todo el que te habla del Señor». (Carta de Bernabé 19,8-9)
Jesucristo fue adorado por los apóstoles y por las mujeres
que le seguían:
"Entonces ellas, saliendo del
sepulcro con temor y gran gozo, fueron corriendo a dar las nuevas a
sus discípulos. Y mientras iban a dar las nuevas a los discípulos,
he aquí, Jesús les salió al encuentro, diciendo: ¡Salve! Y ellas,
acercándose, abrazaron sus pies, y le
adoraron. Entonces
Jesús les dijo: No temáis; id, dad las nuevas a mis hermanos, para
que vayan a Galilea, y allí me verán". (Mateo28:8-10)
"Pero los once
discípulos se fueron a Galilea, al monte donde Jesús les había
ordenado. Y cuando le vieron, le
adoraron"
(Mateo 28:16-18.)
Y también dice la escritura que todos los ángeles adoren a
Jesucristos:
"Y otra vez, cuando
introduce al Primogénito en el mundo, dice: Adórenle
todos los ángeles de Dios.
Ciertamente
de los ángeles dice: El
que hace a sus ángeles espíritus,
Y a sus ministros llama de
fuego. Mas
del Hijo dice: Tu
trono, oh Dios, por el siglo del siglo;
Cetro
de equidad es el cetro de tu reino. (Hebreos
1:6-8 )
"Por tanto, id, y
haced discípulos a todas las naciones,
bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; enseñándoles
que guarden todas las cosas que os he mandado;
y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén".
(Mateo 28,19-20).
"Y será predicado este
evangelio del reino en todo el mundo, para testimonio a todas las
naciones; y entonces vendrá el fin". (Mateo 24,11-14).
Esto es lo que había mandado predicar Jesucristo, solamente el Evangelio. Y
esto es lo que habían predicado los primeros cristianos por todos los pueblos
hasta el siglo IV...
Pero el Evangelio no fue bien recibido por los poderosos dictadores de las
naciones, porque el Evangelio mandaba "NO MATARÁS", y también
mandaba que los poderosos dictadores repartieran todos sus bienes entre los
pobres.
Los poderosos de las naciones no querían hacer estas cosas que les mandaba el
Evangelio. Entonces buscaron en las leyes judías del viejo testamento, leyes
que les justificaran en su opulencia y en su poder. Y ésta fue la causa de
imponer a los cristianos todas las leyes del viejo testamento como si todas
fueran leyes de Dios.
Jesucristo había dado su vida para dejar anuladas todas las leyes del viejo
testamento que mandaban hacer daño o esclavizar a las personas, porque
aquellas leyes no las había mandado Dios. Y los poderosos de Roma, sin
respeto ninguno a Jesucristo, volvieron a imponer al mundo las leyes del viejo
testamento que Jesucristo había dejado anuladas.
"Jesús los llamó y les dijo: "Sabéis que los jefes de las naciones las tiranizan y que los grandes las oprimen con su poderío. Entre vosotros no debe ser así, sino que si alguno de vosotros quiere ser grande, que sea vuestro servidor; y el que de vosotros quiera ser el primero, que sea el servidor de todos; de la misma manera que el hijo del hombre no ha venido a ser servido, sino a servir y dar su vida en redención de muchos". (Mateo 20:25-28.)
Letra en tamaño todo normal:
"Jesús los llamó y les dijo: "Sabéis que los jefes de las naciones las tiranizan y que los grandes las oprimen con su poderío. Entre vosotros no debe ser así, sino que si alguno de vosotros quiere ser grande, que sea vuestro servidor; y el que de vosotros quiera ser el primero, que sea el servidor de todos; de la misma manera que el hijo del hombre no ha venido a ser servido, sino a servir y dar su vida en redención de muchos". (Mateo 20:25-28.)
Los gobernantes de Israel condenaron a Jesús:
"...Jesús nazareno, que fue varón profeta, poderoso en obra y en palabra delante de Dios y de todo el pueblo; y cómo le entregaron los principales sacerdotes y nuestros gobernantesa sentencia de muerte, y le crucificaron." (Lucas 24, 20)
Que mandó Jesucristo BIBLIA O EVANGELIO...VAYAMOS A LAS ESCRITURAS.
"Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura. El que creyere y fuere bautizado, será salvo; mas el que no creyere, será condenado". (Marcos 16:15-16).
"Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén". (Mateo 28,19-20).
"Y será predicado este evangelio del reino en todo el mundo, para testimonio a todas las naciones; y entonces vendrá el fin". (Mateo 24,11-14).
TESTIMONIOS DE LAS ESCRITURAS que enseñan que JESUCRISTO ES DIOS
Dios es la vida y es el Padre, y Jesucristo dijo "Yo soy el camino, y la verdad, y la vida", y también dijo que el que le había visto a Él, había visto al Padre:
Juan 14:6 Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí. 14:7 Si me conocieseis, también a mi Padre conoceríais; y desde ahora le conocéis, y le habéis visto. 14:8 Felipe le dijo: Señor, muéstranos el Padre, y nos basta. 14:9 Jesús le dijo: ¿Tanto tiempo hace que estoy con vosotros, y no me has conocido, Felipe? El que me ha visto a mí, ha visto al Padre; ¿cómo, pues, dices tú: Muéstranos el Padre? 14:10 ¿No crees que yo soy en el Padre, y el Padre en mí? Las palabras que yo os hablo, no las hablo por mi propia cuenta, sino que el Padre que mora en mí, él hace las obras.
Y el profeta Isaías llamó a Jesucristo Dios Fuerte, Padre Eterno:
Isaías 9:6-7 Porque un niño nos es nacido, hijo nos es dado, y el principado sobre su hombro; y se llamará su nombre Admirable, Consejero, Dios Fuerte, Padre Eterno, Príncipe de Paz. Lo dilatado de su imperio y la paz no tendrán límite, sobre el trono de David y sobre su reino, disponiéndolo y confirmándolo en juicio y en justicia desde ahora y para siempre.
Y el profeta Isaías enseñó que solo hay un Dios Fuerte y estaba hablando del único Dios de siempre:
Isaías 44:8 No temáis, ni os amedrentéis; ¿no te lo hice oír desde la antigüedad, y te lo dije? Luego vosotros sois mis testigos. No hay Dios sino yo. No hay Fuerte; no conozco ninguno.
Y también dijo Isaías que Dios es el Primero y el Último:
Isaías 44:6 Así dice Yavé Rey de Israel, y su Redentor, Yavé de los ejércitos: Yo soy el primero, y yo soy el postrero, y fuera de mí no hay Dios.
Y el libro del Apocalipsis dice que Jesucristo es el Alfa y la Omega (el Primero y el Último, principio y fin), el Todopoderoso:
Apocalipsis 1:7-8 He aquí que viene con las nubes, y todo ojo le verá, y los que le traspasaron; y todos los linajes de la tierra harán lamentación por él. Sí, amén. Yo soy el Alfa y la Omega, principio y fin, dice el Señor, el que es y que era y que ha de venir, el Todopoderoso.
Más testimonios de las Escrituras que nos enseñan que Jesucristo es Dios:
Juan 20:26-28 Llegó Jesús, estando las puertas cerradas, y se puso en medio y les dijo: Paz a vosotros. Luego dijo a Tomás: Pon aquí tu dedo, y mira mis manos; y acerca tu mano, y métela en mi costado; y no seas incrédulo, sino creyente. Entonces Tomás respondió y le dijo: ¡Señor mío, y Dios mío! Jesús le dijo: Porque me has visto, Tomás, creíste; bienaventurados los que no vieron, y creyeron.
Mateo 1:23 He aquí, una virgen concebirá y dará a luz un hijo, Y llamarás su nombre Emanuel, que traducido es: Dios con nosotros
Romanos 9:5 de quienes son los patriarcas, y de los cuales, según la carne, vino Cristo, el cual es Dios sobre todas las cosas, bendito por los siglos. Amén.
Y es que Jesucristo es el verdadero Dios y la vida eterna:
1ª Juan 5:19-20 Sabemos que somos de Dios, y el mundo entero está bajo el maligno. Pero sabemos que el Hijo de Dios ha venido, y nos ha dado entendimiento para conocer al que es verdadero; y estamos en el verdadero, en su Hijo Jesucristo. Este es el verdadero Dios, y la vida eterna.
Jesucristo, cuando fue tentado por el diablo, dijo que sólo a Dios se debe adorar y que "a Él sólo servirás". Y cuando el diablo se fue, vinieron los ángeles y sirvieron a Jesucristo:
Mateo 4:8-11 escrito está: Al Señor tu Dios adorarás, y a él sólo servirás. El diablo entonces le dejó; y he aquí vinieron ángeles y le servían
La palabra griega que significa en esta cita "adorarás" es la palabra "proskunhseiV". Y esta palabra griega tiene la misma raíz que la palabra griega escrita en otras citas donde se dice que a Jesucristo le "adoraron" ("prosekunhsan"):
Las mujeres que iban con Jesús y los apóstoles adoraron a Jesús:
Mateo 28:8-10 Entonces ellas, saliendo del sepulcro con temor y gran gozo, fueron corriendo a dar las nuevas a sus discípulos. Y mientras iban a dar las nuevas a los discípulos, he aquí, Jesús les salió al encuentro, diciendo: ¡Salve! Y ellas, acercándose, abrazaron sus pies, y le adoraron. Entonces Jesús les dijo: No temáis; id, dad las nuevas a mis hermanos, para que vayan a Galilea, y allí me verán.
Mateo 28:16-18 Pero los once discípulos se fueron a Galilea, al monte donde Jesús les había ordenado. Y cuando le vieron, le adoraron
Y las escrituras también dicen que a Jesús le adoren los ángeles:
Hebreos 1:6 Y otra vez, cuando introduce al Primogénito en el mundo, dice: Adórenle todos los ángeles de Dios.
Y el contexto de esta última cita también nos enseña que los Dios:
Hebreos 1:5-10 Porque ¿a cuál de los ángeles dijo Dios jamás: Mi Hijo eres tú, Yo te he engendrado hoy, y otra vez: Yo seré a él Padre, Y él me será a mí hijo? 1:6 Y otra vez, cuando introduce al Primogénito en el mundo, dice: Adórenle todos los ángeles de Dios. 1:7 Ciertamente de los ángeles dice: El que hace a sus ángeles espíritus, Y a sus ministros llama de fuego. 1:8 Mas del Hijo dice: Tu trono, el Dios, por el siglo del siglo; Cetro de equidad es el cetro de tu reino. 1:9 Has amado la justicia, y aborrecido la maldad, Por lo cual te ungió Dios, el Dios tuyo, Con óleo de alegría más que a tus compañeros. 1:10 Y: Tú, oh Señor, en el principio fundaste la tierra, Y los cielos son obra de tus manos. Como vemos, esta escritura nos enseña que Jesucristo creó la tierra y los cielos, pues dice de Jesucristo:
Tú, oh Señor, en el principio fundaste la tierra, Y los cielos son obra de tus manos
BIBLIAS HABLAN DE SACRIFICIOS, PERO DIOS NO HABÍA MANDADO SACRIFICIOS...
Los
"testigos de Jehová", los "evangélicos, los judíos y otras religiones
Judaizantes imponen la creencia de que todas las leyes de penas de
muerte y de sacrificios del viejo testamento son mandamientos de Dios,
pero nos dicen las escrituras que Dios no había mandado sacrificios:
JESUCRISTO TAMBIÉN ABOLIÓ DEL VIEJO TESTAMENTO LAS LEYES SOBRE LOS
SACRIFICIOS, QUE ERAN INSOPORTABLES PARA LOS POBRES (sacrificios , que
Dios no había mandado)...
No es lo mismo ofrendas de amor en
agradecimiento a Dios, que no cuesten sacrificios, que los sacrificios
que a veces tenían que hacer los pobres, que Dios no había mandado, y
que les imponían los sacerdotes cuando los pobres en muchos casos no
tenían ni para comer. Jesucristo, cuando nos habló de los sacrificios,
así nos dijo:
"Si hubierais comprendido lo que quiere decir: "Misericordia quiero y no sacrificios", no condenaríais a los inocentes". (Mateo 12,7).
Los verdaderos mandamientos que había dado Dios desde el principio son los mandamientos del Evangelio, que mandan:
"NO MATARÁS", perdonar a las personas setenta veces siete, amar a
nuestros enemigos, hacer el bien a los que nos persiguen y tener
misericordia con todos... También manda a los ricos que repartan todos
sus bienes entre los pobres y que no condenen ni maten a sus
semejantes... porque lo que Dios quiere es la misericordia y no los
sacrificios, y mucho menos los sacrificios humanos, esto es, las penas
de muerte y los genocidios donde se mataba a hombres, mujeres y niños.
Jesucristo dijo que Él era el Primero y el Último:
"Yo
soy el Alfa y la Omega, principio y fin,
dice el Señor, el que es y que era y
que ha de venir, el Todopoderoso".
(Apocalipsis
1:8.)
"Y él puso su diestra
sobre mí, diciéndome: No temas; yo
soy el primero y el último; y el que vivo, y estuve muerto; mas he
aquí que vivo por los siglos de los siglos,
amén. Y tengo las llaves de la muerte y del Hades".
(Apocalipsis 1:9-18
Y además Jesucristo dijo que sólo a
Dios se debe adorar:
"escrito está: Al
Señor tu Dios adorarás, y a él sólo servirás.
El diablo entonces le dejó; y he aquí vinieron ángeles y le
servían". (Mateo4:8-11)
y Jesucristo fue adorado por los apóstoles y por las mujeres
que le seguían:
"Entonces ellas, saliendo del
sepulcro con temor y gran gozo, fueron corriendo a dar las nuevas a
sus discípulos. Y mientras iban a dar las nuevas a los discípulos,
he aquí, Jesús les salió al encuentro, diciendo: ¡Salve! Y ellas,
acercándose, abrazaron sus pies, y le
adoraron. Entonces
Jesús les dijo: No temáis; id, dad las nuevas a mis hermanos, para
que vayan a Galilea, y allí me verán". (Mateo28:8-10)
"Pero los once
discípulos se fueron a Galilea, al monte donde Jesús les había
ordenado. Y cuando le vieron, le
adoraron"
(Mateo 28:16-18.)
Los mandamientos de
Jesús son los mandamientos del Padre
"Si
guardareis mis mandamientos, permaneceréis en mi amor;
así como yo he guardado los mandamientos de mi Padre, y permanezco
en su amor. Estas cosas os he hablado, para que mi gozo esté en
vosotros, y vuestro gozo sea cumplido. Este
es mi mandamiento: Que os améis unos a otros, como yo os he amado.
Nadie tiene mayor amor que este, que uno ponga su vida por sus
amigos. Vosotros
sois mis amigos, si hacéis lo que yo os mando.
Ya no os llamaré siervos, porque el siervo no sabe lo que hace su
señor; pero os he llamado amigos, porque todas
las cosas que oí de mi Padre, os las he dado a conocer".
(Juan
15:10-15)
"El
que tiene mis mandamientos, y los guarda, ése es el que me ama; y el
que me ama, será amado por mi Padre, y yo le amaré, y me
manifestaré a él.
Le dijo Judas (no el Iscariote): Señor, ¿cómo es que te
manifestarás a nosotros, y no al mundo? Respondió Jesús y le dijo:
El que me ama, mi palabra guardará; y mi Padre le amará, y
vendremos a él, y haremos morada con él. El
que no me ama, no guarda mis palabras; y la palabra que habéis oído
no es mía, sino del Padre que me envió".
(Juan
14:21-24)
La
Ley de Dios fue cambiada según anunciaron los profetas
La Ley que Jesucristo nos enseñó en el Evangelio, que
mandaba que los hombres tuvieran misericordia y perdonaran a sus
semejantes, es totalmente contraria a muchos preceptos del viejo
testamento, preceptos que Jesucristo dejó abolidos porque no eran
verdadera Ley de Dios, sino preceptos de hombres, pues la Ley de Dios
fue cambiada por los escribas, como dicen los profetas:
"... mi pueblo no conoce el
juicio de Yavé. ¿Cómo decís: Nosotros somos sabios, y la ley de
Yavé está con nosotros? Ciertamente
la ha cambiado en mentira la pluma mentirosa de los escribas"
(Jeremías 8:7-9).
"Ay
de los que dan leyes inicuas y de los escribas que escriben
prescripciones tiránicas
para apartar del tribunal a los pobres y conculcar el derecho de los
desvalidos de mi pueblo, para despojar a las viudas y robar a los
huérfanos" (Isaías 10,1-2)
"Y
la tierra se contaminó bajo sus moradores; porque traspasaron las
leyes, cambiaron los
mandamientos, quebrantaron el pacto sempiterno"(Isaías
24:5-6)
"Así
ha dicho Yavé el Señor: Esta es Jerusalén; la puse en medio de las
naciones y de las tierras alrededor de ella. Y
ella cambió mis decretos y mis ordenanzas en impiedad más que las
naciones, y más que las tierras que están alrededor de ella;
porque desecharon mis decretos y mis mandamientos, y no anduvieron en
ellos". (Ezequiel 5:5-6)
"Sus
profetas son livianos, hombres prevaricadores; sus sacerdotes
contaminaron el santuario,falsearon la ley"
(Sofonías 3:1-4).
"Mi
pacto con él fue de vida y de paz.......
Mas vosotros os habéis apartado del camino; habéis
hecho tropezar a muchos en la ley; habéis corrompido el pacto de
Leví, dice Yavé
de los ejércitos". (Malaquías
2,5-10).
La
Ley de Dios fue cambiada según anunciaron los profetas
La Ley que Jesucristo nos enseñó en el Evangelio, que
mandaba que los hombres tuvieran misericordia y perdonaran a sus
semejantes, es totalmente contraria a muchos preceptos del viejo
testamento, preceptos que Jesucristo dejó abolidos porque no eran
verdadera Ley de Dios, sino preceptos de hombres, pues la Ley de Dios
fue cambiada por los escribas, como dicen los profetas:
"... mi pueblo no conoce el
juicio de Yavé. ¿Cómo decís: Nosotros somos sabios, y la ley de
Yavé está con nosotros? Ciertamente
la ha cambiado en mentira la pluma mentirosa de los escribas"
(Jeremías 8:7-9).
"Ay
de los que dan leyes inicuas y de los escribas que escriben
prescripciones tiránicas
para apartar del tribunal a los pobres y conculcar el derecho de los
desvalidos de mi pueblo, para despojar a las viudas y robar a los
huérfanos" (Isaías 10,1-2)
"Y
la tierra se contaminó bajo sus moradores; porque traspasaron las
leyes, cambiaron los
mandamientos, quebrantaron el pacto sempiterno"(Isaías
24:5-6)
"Así
ha dicho Yavé el Señor: Esta es Jerusalén; la puse en medio de las
naciones y de las tierras alrededor de ella. Y
ella cambió mis decretos y mis ordenanzas en impiedad más que las
naciones, y más que las tierras que están alrededor de ella;
porque desecharon mis decretos y mis mandamientos, y no anduvieron en
ellos". (Ezequiel 5:5-6)
"Sus
profetas son livianos, hombres prevaricadores; sus sacerdotes
contaminaron el santuario,falsearon la ley"
(Sofonías 3:1-4).
"Mi
pacto con él fue de vida y de paz.......
Mas vosotros os habéis apartado del camino; habéis
hecho tropezar a muchos en la ley; habéis corrompido el pacto de
Leví, dice Yavé
de los ejércitos". (Malaquías
2,5-10).
los misericordiosos mandamientos de Jesucristo (la Gracia) también
nos entrega otros mandamientos misericordiosos, que así nos dicen:
"... si supieseis qué
significa: Misericordia quiero, y no sacrificio,
no condenaríais a los inocentes" (Mateo 12:7
)
Como vemos, lo que Dios quiere es la misericordia y ésta
es la Ley de Dios, porque esto es lo que Dios que hagamos: misericordia con
todos.
"Amarás
al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente.
Este es el primero y grande mandamiento. Y el segundo es semejante: Amarás a tu
prójimo como a ti mismo". (Mateo
22:34-40)
Si no amas a tu prójimo como a ti mismo, no tienes
misericordia. Entonces, no sigues la Ley de la Gracia, porque la Gracia es la
misericordia de Dios derramada sobre sus hijos. Y la Gracia (la misericordia)
también manda a los hombres que no maten a sus semejantes sino que los
perdonen:
"Entonces se le acercó Pedro y
le dijo: Señor, ¿cuántas veces perdonaré a
mi hermano que peque contra mí? ¿Hasta siete? Jesús le dijo: No te digo hasta
siete, sino aun hasta setenta veces siete".
(Mateo18:21-22)
"Porque si perdonáis a los hombres sus ofensas, os
perdonará también a vosotros vuestro Padre celestial; mas
si no perdonáis a los hombres sus ofensas, tampoco vuestro Padre os perdonará
vuestras ofensas". (Mateo 6:14)