Los judíos celebraban la pascua así como
enseñaban las escrituras del viejo testamento que ellos tenían, Y los
cristianos celebran la pascua como manda y enseña Jesucristo en el nuevo pacto, así como lo enseña el Evangelio:
""El primer día de la fiesta de los panes sin
levadura, vinieron los discípulos a Jesús, diciéndole: ¿Dónde quieres
que preparemos para que comas la pascua?
Y él dijo: Id a la ciudad a cierto hombre, y decidle: El Maestro dice:
Mi tiempo está cerca; en tu casa celebraré la pascua con mis discípulos.
Y los discípulos hicieron como Jesús les mandó, y prepararon la pascua.
Cuando llegó la noche, se sentó a la mesa con los doce"". (Mateo 26:18
""Y mientras comían, tomó Jesús el pan, y bendijo, y lo partió, y dio a sus discípulos, y dijo: Tomad, comed; esto es mi cuerpo.
Y tomando la copa, y habiendo dado gracias, les dio, diciendo: Bebed de ella todos;
porque esto es mi sangre del nuevo pacto, que por muchos es derramada para remisión de los pecados.
Y os digo que desde ahora no beberé más de este fruto de la vid, hasta
aquel día en que lo beba nuevo con vosotros en el reino de mi Padre"".
(Mateo 26:27
""Fueron, pues, y hallaron como les había dicho; y prepararon la pascua.
Cuando era la hora, se sentó a la mesa, y con él los apóstoles.
Y les dijo: ¡Cuánto he deseado comer con vosotros esta pascua antes que padezca!
Porque os digo que no la comeré más, hasta que se cumpla en el reino de Dios.
Y habiendo tomado la copa, dio gracias, y dijo: Tomad esto, y repartidlo entre vosotros;
porque os digo que no beberé más del fruto de la vid, hasta que el reino de Dios venga.
Y tomó el pan y dio gracias, y lo partió y les dio, diciendo: Esto es mi
cuerpo, que por vosotros es dado; haced esto en memoria de mí.
De igual manera, después que hubo cenado, tomó la copa, diciendo: Esta copa es el nuevo pacto en mi sangre, que por vosotros se derrama""........ (Lucas 22:15
En estos dos mandamientos cuelga toda la ley y los profetas.
"Entonces los fariseos, oyendo
que había hecho callar a los saduceos, se juntaron a una. Y uno de
ellos, intérprete de la ley, preguntó por tentarle, diciendo:
Maestro, ¿cuál es el gran mandamiento en la ley? Jesús le dijo:
Amarás al Señor tu
Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente.
Este es el primero y grande mandamiento. Y el segundo es semejante:
Amarás a tu prójimo como a ti mismo. En estos dos mandamientos
pende toda la ley y los profetas"(Mateo
22:34-40)
"En
estos dos mandamientos cuelgatoda la ley y
los profetas":
"Amarás al Señor tu
Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente.
Este es el primero y grande mandamiento. Y el segundo es semejante:
Amarás a tu prójimo como a ti mismo. En
estos dos mandamientos cuelga toda la ley y los profetas"(Mateo
22:34-40)
"Entonces los fariseos, oyendo
que había hecho callar a los saduceos, se juntaron a una. Y uno de
ellos, intérprete de la ley, preguntó por tentarle, diciendo:
Maestro, ¿cuál es el gran mandamiento en la ley? Jesús le dijo:
Amarás al Señor tu
Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente.
Este es el primero y grande mandamiento. Y el segundo es semejante:
Amarás a tu prójimo como a ti mismo. En estos dos mandamientos
cuelga toda la ley y los profetas"(Mateo
22:34-40)
"Si un hombre cometiere adulterio con la mujer de su
prójimo, el adúltero y la adúltera indefectiblemente serán muertos. (Levítico
20:10)
"Y la hija del sacerdote, si comenzare a fornicar, a
su padre deshonra; quemada será al fuego". (Levítico 21:9)
No es eso lo que hizo Jesucristo con la mujer adultera en el Ejemplo del
Evangelio:
"Entonces los escribas y los fariseos le trajeron una
mujer sorprendida en adulterio; y poniéndola en medio, le dijeron: Maestro,
esta mujer ha sido sorprendida en el acto mismo de adulterio. Y
en la ley nos mandó Moisés apedrear a tales mujeres. Tú, pues, ¿qué dices?
Mas esto decían tentándole, para poder acusarle. Pero Jesús, inclinado hacia
el suelo, escribía en tierra con el dedo.
Y como insistieran en preguntarle, se enderezó y
les dijo: El que de vosotros esté sin pecado sea el primero en arrojar la
piedra contra ella. E inclinándose de nuevo
hacia el suelo, siguió escribiendo en tierra. Pero ellos, al oír esto,
acusados por su conciencia, salían uno a uno, comenzando desde los más viejos
hasta los postreros; y quedó solo Jesús, y la mujer que estaba en medio.
Enderezándose Jesús, y no viendo a nadie sino a la mujer, le dijo: Mujer, ¿dónde
están los que te acusaban? ¿Ninguno te condenó? Ella dijo: Ninguno, Señor.
Entonces Jesús le dijo: Ni yo te condeno; vete,
y no peques más" (Juan 8).
Con esta enseñanza, Jesucristo dejó abolidos los mandamientos del viejo
testamento que mandaban matar a las personas por diversas causas, porque todos
los hombres son pecadores, por lo tanto, ningún hombre tiene autoridad, ni
nunca la tuvo, para matar a sus semejantes.
Jesucristo era el Único que tenía la autoridad, porque Él es Dios, y porque
Él era el único libre de pecado..., pero Él tampoco condenó a la mujer para
que el mundo supiera que lo que Dios quiere es la misericordia y el perdón y no
los sacrificios, y mucho menos sacrificios de personas:
"... si supieseis qué
significa: Misericordia quiero, y no sacrificio,
no condenaríais a los inocentes" (Mateo 12:7
)
"Si
decimos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos, y la
verdad no está en nosotros.
Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar
nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad. Si decimos que no
hemos pecado, le hacemos a él mentiroso, y su palabra no está en
nosotros".(1ª
Juan 1:8-10)
"El Señor, con mucho amor, puso sus manos sobre mis hombros, y así me sentí amado y bendecido por Él por unos momentos... Enseguida sentí que detrás de mí se acercaba mucha gente. Yo miré, y vi los campos llenos de gente que venía con odio y con rabia buscando a Jesucristo para matarlo... Era como si el mundo entero se hubiera vuelto loco de odio contra Jesucristo.
Yo estaba en un puente, y la parte baja del puente terminaba en los campos donde venia el mundo en manifestación contra Jesucristo... En la parte alta del puente había un palacio donde entró Jesucristo con los amigos que le acompañaban, y se cerró la puerta.
Yo, pronto me sentí rodeado de gente violenta que quería derribar la puerta del palacio para matar a Jesucristo""...
Jesucristo fue adorado por los apóstoles y por las mujeres
que le seguían:
"Entonces ellas, saliendo del
sepulcro con temor y gran gozo, fueron corriendo a dar las nuevas a
sus discípulos. Y mientras iban a dar las nuevas a los discípulos,
he aquí, Jesús les salió al encuentro, diciendo: ¡Salve! Y ellas,
acercándose, abrazaron sus pies, y le
adoraron. Entonces
Jesús les dijo: No temáis; id, dad las nuevas a mis hermanos, para
que vayan a Galilea, y allí me verán". (Mateo28:8-10)
"Pero los once
discípulos se fueron a Galilea, al monte donde Jesús les había
ordenado. Y cuando le vieron, le
adoraron"
(Mateo 28:16-18.)
Y también dice la escritura que todos los ángeles adoren a
Jesucristos:
"Y otra vez, cuando
introduce al Primogénito en el mundo, dice: Adórenle
todos los ángeles de Dios.
Ciertamente
de los ángeles dice: El
que hace a sus ángeles espíritus,
Y a sus ministros llama de
fuego. Mas
del Hijo dice: Tu
trono, oh Dios, por el siglo del siglo;
Cetro
de equidad es el cetro de tu reino. (Hebreos
1:6-8 )
LOS EMPERADORES DE ROMA DEL SIGLO IV Y SU RELIGIÓN DEL ESTADO FUERON LOS QUE
IMPUSIERON A LOS CRISTIANOS LOS LIBROS DE LAS BIBLIAS QUE TIENEN AHORA LAS
RELIGIONES.
En el siglo III, las cosas empezaron a cambiar, y los mandamientos del
Evangelio empezaron a ser olvidados. Y ya en siglo IV los judaizantes de Roma
dominados por los emperadores de Roma y su religión, volvieron a imponer,
como si fueran leyes de Dios, las leyes del viejo testamento que Jesucristo
había dejado abolidas, y las volvieron a llamar "mandamientos de
Dios".
En el año 382, en el Sínodo Romano, por el Decreto del obispo Dámaso, se
decidió qué libros se aceptaban y qué libros se rechazaban. Después, en
386, en el III Concilio de Cartago se prohíbe tener como escritura divina
cualquier libro que no fuera de los que allí se escogieron.
Que mandó Jesucristo BIBLIA O EVANGELIO...VAYAMOS A LAS ESCRITURAS.
"Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura. El que creyere y fuere bautizado, será salvo; mas el que no creyere, será condenado". (Marcos 16:15-16).
"Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén". (Mateo 28,19-20).
"Y será predicado este evangelio del reino en todo el mundo, para testimonio a todas las naciones; y entonces vendrá el fin". (Mateo 24,11-14).
JESUCRISTO ES DIOS, porque DIOS ES el PADRE, el HIJO y el ESPÍRITU SANTO, y estos tres son UNO, como nos dice en su carta el apóstol Juan:
1ª Juan 5:7 Porque tres son los que dan testimonio en el cielo: el Padre, el Verbo y el Espíritu Santo; y estos tres son uno.
Espero que muchos puedan comprenderlo y comprendan que Jesucristo es Dios, que fue manifestado en carne:
1ª Timoteo 3,16 E indiscutiblemente, grande es el misterio de la piedad: Dios fue manifestado en carne, Justificado en el Espíritu, Visto de los ángeles, Predicado a los gentiles, Creído en el mundo, Recibido arriba en gloria. Y es que Jesucristo es el Verbo que se hizo carne. Y antes del Verbo (la Palabra) no existía nada, pues al principio era el Verbo, la Palabra y por el Verbo de Dios, la Palabra de Dios, fueron creadas todas las cosas, porque la Palabra era Dios. Y la Palabra se hizo carne y habitó entre nosotros.
Y eso no es doctrina de religiones de hombres sino lo que enseña el Evangelio:
Juan 1:1 Al principio era el Verbo, y el Verbo estaba en Dios, y el Verbo era Dios. 1:2 El estaba al principio en Dios. 1:3 Todas las cosas fueron hechas por EL, y sin El no se hizo nada de cuanto ha sido hecho. 1:4 En El estaba la vida, y la vida era la luz de los hombres.
Juan 1:14 Y el Verbo se hizo carne y habitó entre nosotros, y hemos visto su gloria, gloria como de Unigénito del Padre, lleno de gracia y de verdad.
Las escrituras también dicen que a Jesús le adoren los ángeles:
Hebreos 1:6 Y otra vez, cuando introduce al Primogénito en el mundo, dice: Adórenle todos los ángeles de Dios.
Y el contexto de esta última cita también nos enseña que los Dios:
Hebreos 1:5-10 Porque ¿a cuál de los ángeles dijo Dios jamás: Mi Hijo eres tú, Yo te he engendrado hoy, y otra vez: Yo seré a él Padre, Y él me será a mí hijo? 1:6 Y otra vez, cuando introduce al Primogénito en el mundo, dice: Adórenle todos los ángeles de Dios. 1:7 Ciertamente de los ángeles dice: El que hace a sus ángeles espíritus, Y a sus ministros llama de fuego. 1:8 Mas del Hijo dice: Tu trono, el Dios, por el siglo del siglo; Cetro de equidad es el cetro de tu reino. 1:9 Has amado la justicia, y aborrecido la maldad, Por lo cual te ungió Dios, el Dios tuyo, Con óleo de alegría más que a tus compañeros. 1:10 Y: Tú, oh Señor, en el principio fundaste la tierra, Y los cielos son obra de tus manos. Como vemos, esta escritura nos enseña que Jesucristo creó la tierra y los cielos, pues dice de Jesucristo:
Tú, oh Señor, en el principio fundaste la tierra, Y los cielos son obra de tus manos.
BIBLIAS HABLAN DE SACRIFICIOS, PERO DIOS NO HABÍA MANDADO SACRIFICIOS...
Los
"testigos de Jehová", los "evangélicos, los judíos y otras religiones
Judaizantes imponen la creencia de que todas las leyes de penas de
muerte y de sacrificios del viejo testamento son mandamientos de Dios,
pero nos dicen las escrituras que Dios no había mandado sacrificios:
JESUCRISTO TAMBIÉN ABOLIÓ DEL VIEJO TESTAMENTO LAS LEYES SOBRE LOS
SACRIFICIOS, QUE ERAN INSOPORTABLES PARA LOS POBRES (sacrificios , que
Dios no había mandado)...
No es lo mismo ofrendas de amor en
agradecimiento a Dios, que no cuesten sacrificios, que los sacrificios
que a veces tenían que hacer los pobres, que Dios no había mandado, y
que les imponían los sacerdotes cuando los pobres en muchos casos no
tenían ni para comer. Jesucristo, cuando nos habló de los sacrificios,
así nos dijo:
"Si hubierais comprendido lo que quiere decir: "Misericordia quiero y no sacrificios", no condenaríais a los inocentes". (Mateo 12,7).
Los verdaderos mandamientos que había dado Dios desde el principio son los mandamientos del Evangelio, que mandan:
"NO MATARÁS", perdonar a las personas setenta veces siete, amar a
nuestros enemigos, hacer el bien a los que nos persiguen y tener
misericordia con todos... También manda a los ricos que repartan todos
sus bienes entre los pobres y que no condenen ni maten a sus
semejantes... porque lo que Dios quiere es la misericordia y no los
sacrificios, y mucho menos los sacrificios humanos, esto es, las penas
de muerte y los genocidios donde se mataba a hombres, mujeres y niños.
En Jesucristo radica toda la plenitud de la
Divinidad. Y Él es el Verbo Encarnado, es Dios hecho Hombre.
Y eso es lo que te dice la escritura. Jesucristo también
te dice:
"Por
tanto, id,
y haced discípulos a todas las naciones,
bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu
Santo; enseñándoles
que guarden todas las cosas que os he mandado;
y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del
mundo. Amén". (Mateo
28,19-20).
Como ves, Jesucristo mandó bautizar en el
nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo. Y los tres
son Uno, como te dice la Escritura:
"Porque
tres son los que dan testimonio en el cielo: el Padre, el Verbo y el
Espíritu Santo; y estos tres son uno...".(1ª
Juan 5:7).
Los mandamientos de
Jesús son los mandamientos del Padre
"Si
guardareis mis mandamientos, permaneceréis en mi amor;
así como yo he guardado los mandamientos de mi Padre, y permanezco
en su amor. Estas cosas os he hablado, para que mi gozo esté en
vosotros, y vuestro gozo sea cumplido. Este
es mi mandamiento: Que os améis unos a otros, como yo os he amado.
Nadie tiene mayor amor que este, que uno ponga su vida por sus
amigos. Vosotros
sois mis amigos, si hacéis lo que yo os mando.
Ya no os llamaré siervos, porque el siervo no sabe lo que hace su
señor; pero os he llamado amigos, porque todas
las cosas que oí de mi Padre, os las he dado a conocer".
(Juan
15:10-15)
"El
que tiene mis mandamientos, y los guarda, ése es el que me ama; y el
que me ama, será amado por mi Padre, y yo le amaré, y me
manifestaré a él.
Le dijo Judas (no el Iscariote): Señor, ¿cómo es que te
manifestarás a nosotros, y no al mundo? Respondió Jesús y le dijo:
El que me ama, mi palabra guardará; y mi Padre le amará, y
vendremos a él, y haremos morada con él. El
que no me ama, no guarda mis palabras; y la palabra que habéis oído
no es mía, sino del Padre que me envió".
(Juan
14:21-24)
La
Ley de Dios fue cambiada según anunciaron los profetas
La Ley que Jesucristo nos enseñó en el Evangelio, que
mandaba que los hombres tuvieran misericordia y perdonaran a sus
semejantes, es totalmente contraria a muchos preceptos del viejo
testamento, preceptos que Jesucristo dejó abolidos porque no eran
verdadera Ley de Dios, sino preceptos de hombres, pues la Ley de Dios
fue cambiada por los escribas, como dicen los profetas:
"... mi pueblo no conoce el
juicio de Yavé. ¿Cómo decís: Nosotros somos sabios, y la ley de
Yavé está con nosotros? Ciertamente
la ha cambiado en mentira la pluma mentirosa de los escribas"
(Jeremías 8:7-9).
"Ay
de los que dan leyes inicuas y de los escribas que escriben
prescripciones tiránicas
para apartar del tribunal a los pobres y conculcar el derecho de los
desvalidos de mi pueblo, para despojar a las viudas y robar a los
huérfanos" (Isaías 10,1-2)
"Y
la tierra se contaminó bajo sus moradores; porque traspasaron las
leyes, cambiaron los
mandamientos, quebrantaron el pacto sempiterno"(Isaías
24:5-6)
"Así
ha dicho Yavé el Señor: Esta es Jerusalén; la puse en medio de las
naciones y de las tierras alrededor de ella. Y
ella cambió mis decretos y mis ordenanzas en impiedad más que las
naciones, y más que las tierras que están alrededor de ella;
porque desecharon mis decretos y mis mandamientos, y no anduvieron en
ellos". (Ezequiel 5:5-6)
"Sus
profetas son livianos, hombres prevaricadores; sus sacerdotes
contaminaron el santuario,falsearon la ley"
(Sofonías 3:1-4).
"Mi
pacto con él fue de vida y de paz.......
Mas vosotros os habéis apartado del camino; habéis
hecho tropezar a muchos en la ley; habéis corrompido el pacto de
Leví, dice Yavé
de los ejércitos". (Malaquías
2,5-10).
los misericordiosos mandamientos de Jesucristo (la Gracia) también
nos entrega otros mandamientos misericordiosos, que así nos dicen:
"... si supieseis qué
significa: Misericordia quiero, y no sacrificio,
no condenaríais a los inocentes" (Mateo 12:7
)
Como vemos, lo que Dios quiere es la misericordia y ésta
es la Ley de Dios, porque esto es lo que Dios que hagamos: misericordia con
todos.
"Amarás
al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente.
Este es el primero y grande mandamiento. Y el segundo es semejante: Amarás a tu
prójimo como a ti mismo". (Mateo
22:34-40)
Si no amas a tu prójimo como a ti mismo, no tienes
misericordia. Entonces, no sigues la Ley de la Gracia, porque la Gracia es la
misericordia de Dios derramada sobre sus hijos. Y la Gracia (la misericordia)
también manda a los hombres que no maten a sus semejantes sino que los
perdonen:
"Entonces se le acercó Pedro y
le dijo: Señor, ¿cuántas veces perdonaré a
mi hermano que peque contra mí? ¿Hasta siete? Jesús le dijo: No te digo hasta
siete, sino aun hasta setenta veces siete".
(Mateo18:21-22)
"Porque si perdonáis a los hombres sus ofensas, os
perdonará también a vosotros vuestro Padre celestial; mas
si no perdonáis a los hombres sus ofensas, tampoco vuestro Padre os perdonará
vuestras ofensas". (Mateo 6:14)