Adalid infante del rostro de la vida muerta
carne de piedra que viste la noche,
te mueves entre pensamientos oscuros
y reclamas a la oscuridad eterna
el fuego de nuestra pesadilla infinita,
recoges en tus manos yermas
las secas gotas de miedos infinitos
y siembras la rosa negra
de la desesperanza mas eterna,
fria amante de la noche mas larga
reina de cordura infame en las sombras,
acaricias humeda la llama mas viva
y llevas en tus ojos el nombre maldito,
aun asi te reclaman cada año a la luna
en un baile ancestro de historia muerta,
entre los pasos de tus almas malditas
y el hielo de tu sonrisa oculta…
Vagabunda...