En
un solo, día me quieren
vender el producto de la Paz.
En
un solo día, me hablan
para venderme la Verdad.
En
un solo día, me inundan
por doquier, de Solidaridad.
En
un solo día, me hacen
Abrazar.
En
un solo día, debo salir
de las tinieblas a la Luz.
En
un solo día, me invitan
a Orar.
¡No
quiero comprar estos productos
de un solo día!
Descubro,
que mi corazón tiene
las arcas llenas
para
comprar, durante trescientos
sesenta y cinco días,
todo
lo anterior.