Charla entre el corazón y la razón
¿Y si en realidad el tiempo no lo pudiese todo, si
no fuese tan cierto que las cosas con el pasar de los días
se van olvidando, o las heridas no se van cerrando, cuántas
cosas cambiarían? Porque es muy fácil pensar
que con solo dejar pasar los días, meses o años
las cosas se solucionan, y lo peor es que uno se autoconvence,
y se cree un superado, alguien que tuvo la suerte de superar
un dolor y sobreponerse, y se vuelve a sentir fuerte...
Sin embargo, un buen día, quiza el menos pensado, todo
el castillo que creías tan solido comienza a temblar,
porque te encuentras de nuevo cara a cara con el dolor, con
ese sentimiento tan helado y tan dormido del que ya casi ni
te acordabas, y que, muy a pesar de todo, sigue ahí,
y comienza a despertarse con todas las fuerzas acumuladas
por el tiempo en que estuvo inactivo y quiere salir, quiere
gritar que esta vivo y que va a dar pelea, por que la RAZÓN
piensa:
"¡Otra
vez no! ¿O acaso no te acuerdas el tiempo que te costó
volver a ponerte en pie?, ¿O no te acuerdas de esas
noche sin dormir, de esos desvelos y angustias, de tus días
vacíos, de tus noches sin estrellas?. ¿Quieres
realmente volver a vivir todo eso, o ahora que ya estás
de pie no sería mejor que anduvieras por otros caminos?
Porque, sinceramente, amores no te faltan, tienes la capacidad
de enamorar a quien quieras, y te vas a hacer problema por
un hombre/una mujer que, en realidad, no sabes si te quiere,
no sabes si te engaña?...
¡Piensa!
¡No te equivoques! Una vez creíste tocar el cielo
con las manos y en un instante descendiste al mas profundo
de los infiernos, ¿Crees que vale la pena?.
Haz lo que te digo, no existen los amores eternos, y seguramente,
todo eso lo único que te va a hacer es ilusionarte
y volverte a lastimar."
Y se hace
un silencio eterno...
El CORAZÓN,
aturdido por las palabras de la RAZÓN, se queda sin
aliento, pero despues de un rato de pensar, donde la RAZÓN
ya creía tener ganada la partida, el CORAZÓN
replica:
"No
sé si tus palabras son del todo ciertas, pero se que
no son tampoco del todo equivocadas: no es lo mismo pensar
que sentir, no es lo mismo razonar que hacer las cosas impulsivamente,
porque los que piensan son aquellos que nunca se arriesgan,
y pobre de aquél que no este dispuesto una vez en su
vida a perderlo todo por la persona que ama, pobre de aquél
que no esta dispuesto a olvidar, porque nunca será
perdonado, pobre de aquél que es tan ciego y vacío,
que no es capaz de dejar de lado todas las trivialidades de
la vida por amor... Pobre de quien teniendo en frente el amor
de su vida, no es capaz de quitarse la careta y sentir...
Porque
el amor no solo es alegría, no solo es paz y ternura,
el amor es tambien dolor y lágrimas, es angustia y
desvelo, es muchas cosas, pero bueno...la verdad es que no
se que pesa más, si la RAZÓN o el CORAZÓN.
Lo que
si se, es que si uno no siente ,se transforma simplemente
en una roca, una cosa que no es capaz de demostrar cariño
y confianza, un cuerpo sin alma. Por eso creo que uno debe
jugarse por lo que siente... le puede salir bien o mal, puede
equivocarse o vivir el resto de su vida con la persona que
ama... lo que sí es cierto es que jamás perdonaría
a alguien que por rencor o desconsuelo no sea capaz de tomar
a la persona que ama, y gritarle a todo el mundo que por ella
daría la vida...
Y, por último,
otra cosa que tengo bien clara, es que el que se enamora soy
yo, y el amor se siente con el CORAZÓN, no con la CABEZA".
Se
hizo el silencio... y, sin mediar palabra, el CORAZÓN,
decidió tomar el camino correcto... y fue tras el Amor...
Gabriela
Mistral