Cuenta la leyenda que fue en un pequeño pueblito de Austria, más exactamente en Oberndorf, cerca de Salzburgo, que apremiaba la necesidad de una canción religiosa para celebrar la Nochebuena que ya se acercaba, especialmente porque el órgano de la iglesita San Nicolás se rompió dos días antes de la celebración navideña.
Así fue que el párroco del pueblo, Joseph Mohr, compuso la letra de "Noche de Paz" (originalmente Stille Nacht, Heilige Nacht), y Franz Xaver Gruber, un maestro de música, se encargó de ponerle la música al villancico.
Fue entonces que Gruber le dio la letra a los feligreses y en la Misa de Gallo de ese 24 de diciembre, Mohr, un sacerdote con voz de tenor que tocaba la guitarra, y Gruber, que poseía una bella voz de bajo, interpretaron por vez primera en alemán "Noche de Paz".
El hecho era totalmente inhabitual para la época, cuando los textos religiosos aún se redactaban en latín. Pero Mohr consideraba que una letra sencilla y benevolente era lo más adecuado para sus fieles.
Desde entonces, el mundo no ha dejado de entonar "Noche de Paz" y éste ha pasado a ser el villancico universal de Nochebuena.
"Noche de Paz" fue traducido a 330 idiomas. Como le pasa a la mayoría de los genios, Mohr y Gruber murieron en el anonimato en 1848 y 1863, respectivamente.
En la actualidad, cada año llegan a Oberndorf entre 6.000 y 8.000 personas de todo el mundo para participar en la ceremonia navideña frente a la capilla conmemorativa de "Noche de Paz", donde se puede oir la melodía original que fuera interpretada en 1818.