Te regalo una sonrisa escrita para que la guardes y el dibujo e un
sueño en tu cuaderno. Una palabra perfumada y un día de sol con
tu nombre. El abrazo infinito de todos los árboles y un canto suave
para que duermas. La mirada más tierna, el color de una nube y un
beso en tu alma, para que me recuerdes siempre y en tu corazón me guardes.
Miguel Ángel Arcel
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