Nadie debe de bajar los brazos y poner excusas para lograr sus objetivos.
De las derrotas tenemos que sacar lo positivo y aprender.
Y si uno se cae dos veces, se tiene que levantar tres.
Uno es fruto de sus propias acciones y decisiones.
Hay que ser valientes y tenemos que ser y vivir
lo que realmente uno quiere, aún sabiendo que en el camino
sufriremos más de un fracaso.... pero hay que sobreponerse
y alcanzar los objetivos.
Uno sólo es feliz cuando lo que piensa, lo que dice y lo que hace está en armonía.