A veces por no estar solos, cometemos errores que nos desprenden de las cosas mas bellas, mas importantes, las que mas significado han tenido para nosotros.
Por no estar solos buscamos respuestas simples, donde no las hay, y creemos que esa respuesta es la correcta, sin importar las consecuencias.
Por no estar solos nos aferramos a lo primero que llega a nuestra vida, sin darnos la oportunidad de analizar detenidamente lo reconocido.
Por no estar solos buscamos compañías, ansiando palabras cálidas, dulces, sin percatarnos que a veces llegan personas falsas a ofrecernos un mundo de falsedad.
A veces por no estar solos... Nos hundimos en un abismo.